Asier Etxeandia, hundido por la muerte de su “segunda madre”: “El dolor es insoportable”

Asier Etxeandia, uno de los grandes actores del panorama nacional, está viviendo uno de los momentos más complicados de su vida. Completamente devastado, el bilbaíno ha anunciado en redes sociales la muerte de un familiar muy querido para él: su tía Clara, a quien ha definido como su segunda madre y a la que estaba muy unido.

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Helena Tomás

Junto a tres fotografías de la infancia de Asier junto a su tía, el actor ha escrito un desgarrador texto: “Se me ha ido mi Tía Clara, mi persona favorita, mi segunda madre, mi confidente, mi amiga, mi hogar, mi salvación desde la infancia, mi núcleo familiar. El dolor es insoportable, pero el amor que siento es insuperable. Gracias por estar a mi lado y darme tanto amor desde que nací. Gracias por quererme y por creer en mí. Ahora no dejo de llorar. Te voy a llevar conmigo siempre, amor mío, mi Tía, mi otra madre. No hay nadie como tú”.

En alguna ocasión, Asier Etxeandia ha confesado que su infancia no fue fácil. En el año 2018, en una entrevista para 'Icon', confesó que sufrió bullying: “Me esperaban los niños para pegarme. Sufrí bullying, no solamente por parte de los compañeros, también de los profesores. No entendí en absoluto cómo me transmitieron la idea de la religión, y me creó muchos traumas”.

También en redes sociales habló sobre este tema que marcó su vida y se dirigió directamente a esas personas que han maltratado alguna vez a otros niños en el colegio: "Las personas a las que hacías bullying y pegabas en el cole somos los que hacemos los libros, películas y discos que escucháis. Es la venganza de los inadaptados, los raros, los maricones, los freaks...”.

En junio del año pasado, cuando acudió como invitado al programa ‘La matemática del espejo’, presentado por Carlos del Amor, Etxeandia se explayó hablando de esa difícil infancia: “No tenía amigos, no sabía cómo hacerme amigos. Era un niño muy cobarde, con un niño interior muy bestia que se exponía todo el rato sin darse cuenta”. Y añadió: “A mí me hubiera gustado romperle la cara al cabecilla, como mi padre me decía. Pero yo pensaba: ‘¿Por qué me voy a tener que convertir en él? Si es que yo no soy él, yo no entiendo eso’".

Ante este panorama aterrador para un niño, Asier encontró mucho refugio en su madre y sus tías. Ellas han sido, según ha contado él mismo, las tres madres de su infancia: su tía Clara, su Amama Clara y su Amatxu Rosa.

Fue el 11 de octubre de 2006 cuando Asier Etxeandia perdía a su madre Rosa, su pilar fundamental. Ahora vuelve a enfrentarse a un golpe muy similar al perder a otro de los apoyos más imprescindibles para él.