La desconocida historia detrás de la boda de Ana Botín en tan solo 4 meses

A muchos les pilló desprevenidos, no es habitual que la jefa hable en clave personal. Según fuentes del banco, la cosa sucedió más o menos así. En un encuentro con la alta dirección, la presidenta tomó la palabra. "Era el momento del cierre y ella empezó a hablar de su matrimonio para ilustrar la importancia de la toma de decisiones", explican. Y entonces sucedió: Ana Botín habló como pocas veces de Guillermo Morenés, su marido y padre de sus tres hijos.

"La decisión más importante que he tomado tuvo que ver con quien quería pasar el resto de mi vida. Siempre digo que elegir el partner correcto es una cuestión 50% racional, 50% producto de la química, el corazón o los sentimientos. A mí me gusta ponerlo todo en números, ya sabéis. En mi caso, después de hacer un 'due diligence' de mi 'potential husband' tomé la iniciativa. Tenía 22 años, vivía en Nueva York y trabajaba en JP Morgan. Le llamé por teléfono y le pedí que se casara conmigo".

A la espalda de la presidenta, mientras, se proyectaba una imagen del matrimonio tomada no hace mucho en actitud relajada dando un paseo por la playa. Luego reconoció que no siempre había sido fácil, ya en los primeros días de convivencia comprobaron que tenían opiniones muy diferentes. Y, aun así, animó a saber conciliar, ceder y vivir en pareja.

Botín pretendía espolear en sus altos directivos la ambición por ejecutar una estrategia innovadora: "No siempre son decisiones racionales, pero si creemos en ello, vamos a por ello". El discurso caló entre su gente, sorprendida por poder asomarse así a la vida privada de su jefa. Pocos sabían que en esos días se cumplían 40 años de aquella llamada de teléfono que les cambió la vida y que recreamos algo ingenuamente: "¿Te quieres casar conmigo?".

En una entrevista con 'Telva', Ana Botín asumió lo inusual del asunto: "Creedme, se suponía que en aquellos tiempos esa no era la costumbre propia de una señorita española. Y tampoco era habitual planificar una boda en tan solo cuatro meses. Mi madre sabe bien de lo que hablo. Se suponía que había que esperar al menos un año desde que te pedían en compromiso. Y, a pesar de todo, aquí estamos mi marido y yo estupendamente".

Ana Botín y Guillermo Morenés se habían conocido por casualidad un par de años antes. La historia la contó la propia Botín en la revista 'Carácter': "Después de tantos años en el extranjero, que me casase con un español es un milagro. Le conocí durante unas vacaciones. En el verano del ochenta, en el que, por cierto, hizo prácticas en el Bank of America, también en Operaciones. Habían venido a verme a Madrid unos amigos americanos y les organicé una cena, a la que invité a una compañera española de Harvard que, a su vez, trajo a su grupo de amigos, Guillermo entre ellos. Los españoles, como suele suceder en estos casos, hicieron grupo aparte. Mientras, los americanos, mucho más abiertos, se enrollaron todo el rato con Guillermo. Eso me llamó la atención. A partir de ahí mantuvimos el contacto. Y hasta hoy...".

En el retrato que publicó la periodista Ana Samboal sobre la presidenta del Banco Santander, 'Nacida para triunfar' (La Esfera), se aborda cómo fue la boda, organizada en tan poco tiempo, tras aquella llamada de teléfono. El enlace se celebró un 15 de septiembre de 1983 en la finca de la familia Botín de Puente San Miguel (Cantabria).

Solo hay una foto pública que circula por internet en la que la jovencísima Ana Botín aparece algo enfadada. Viste un diseño de mangas abullonadas muy propio de la época, sin velo. Consultamos la elección del vestido con la responsable de la sección de Novias de Vanitatis, Paula Mata, que lo analiza: "Fiel a los mandatos nupciales de la década de los 80, el vestido que escogió para pronunciar el 'sí, quiero' emanaba maximalismo y opulencia. Protagonizado por unas importantes mangas abullonadas y un gran lazo en la cintura, el traje estaba confeccionado con un tejido de organza bordado. El escote cuadrado con un pequeño pico se remató con un nudo. De la cintura ajustada brotaba una falda voluminosa con cola. El look nupcial se completó con una diadema adornada con semillas naturales para un efecto 3D".

Según el libro de Samboal, la ceremonia se celebró en el jardín, en la capilla de la Asunción de Santa María, y luego hubo un cóctel seguido de almuerzo para los invitados: "Su padre fue el padrino y 16 personas firmaron como testigos, entre ellas sus abuelos o su amiga Catalina Mestre, hermana de la que será después gran duquesa de Luxemburgo. El novio, Guillermo, de chaqué, llegó a la capilla del brazo de su madrina y hermana María Morenés, señora de Merry del Val".

Ana Botín no habla mucho de Guillermo Morenés, pero cuando lo hace siempre es para decir que él representa "la mejor decisión que ha tomado en la vida". En una charla informal con el exeditor del 'Financial Times', Lionel Barber, en 2019, reconoció sin sonrojo que no hubiera llegado a donde está "si no fuera por Guillermo". "Esto va de tener una vida personal y él ha sido un socio increíble. Tenemos una familia, tenemos tres hijos, y me siento muy afortunada de que acordáramos dividir al 50% nuestras responsabilidades personales", le dijo. "Ahora es más fácil porque mis tres hijos son mayores".

"Creo que es importante entender en cada momento qué es lo prioritario, por ejemplo, en cuanto al tiempo que tienes para ti misma, para tus amigos, para tu familia, para tu trabajo. Tener un compañero, o familiar, que te pueda apoyar en ciertos momentos –como lo he tenido yo con mi marido o mi madre–, te permite hacer cosas que de otra manera no serían posibles", explicó ante una audiencia entregada. En la misma charla también recordó aquel día de 1999 que su padre, Emilio Botín, la despidió del Banco Santander. "Aquel día lloré, y no lloro demasiado a menudo". Y cómo saber jugar al golf la ha ayudado "en un mundo de hombres".

"¿Destiny? I don't believe in it, you make your own destiny", aclaró Botín en esa charla con el 'FT'. Su 'destino trabajado' tenía buenos mimbres. Morenés es ingeniero agrónomo y cuenta con un MBA por la New York University. Trabajó como analista de riesgos en Manufactures Hannover y en 1986 se incorporó al Banco Santander para fundar la división de banca privada internacional. Tiene una larga trayectoria en banca privada. En los 90 creó Allfunds Bank, una plataforma de fondos de inversión entonces muy disruptiva que luego el Banco Santander vendió por 1.800 millones de euros. En 1999 dejó voluntariamente Banco Santander para fundar M&B Capital Advisers como firma independiente. Está emparentado tanto por vía materna como por vía paterna con la aristocracia más antigua de España.

Tradicionalmente, Morenés ha preferido no lucir galones en público. Dicen quienes conocen al matrimonio que ha sido él quien se ha encargado principalmente de las tareas más domésticas. En el programa 'Planeta Calleja' pudimos conocerle algo más. "Yo no podría haber hecho la mitad, ni un tercio de lo que he hecho, sin Guillermo", repetía la banquera al explorador. El inversor, también presente en la aventura televisiva de su mujer, quiso puntualizar: "Estamos juntos desde el primer día porque nos hemos respetado mucho, he respetado a mi mujer y ahora la admiro mucho".

En el libro de Ana Samboal se recogen unas declaraciones de Rafael del Pino sobre Botín en las que alaba su papel como madre: "Ana le da mucha importancia a la familia. Esa imagen no es conocida porque la que ella presta de ejecutiva agresiva permea en la organización. Pero ella cuida a las personas". Ahora sabemos que también hay personas que cuidan de ella.