Así recordaremos a Concha Velasco de sus inicios en el cine a 'Sorpresa, sorpresa' y su última aparición en público

Las últimas imágenes que tenemos en la cabeza de la que fuera nuestra chispeante chica ye-yé o alegre chica de la Cruz Roja son las que corresponden a una abuela de 84 años que llevaba ya meses ingresada en una residencia de ancianos. "Lo que pasa es que mi madre está muy muy muy delicada", contaba a Vanitatis Manuel, el hijo de Concha Velasco, en el momento en el que decidieron tomar la siempre difícil decisión de ingresarla.

"Muchas veces no sabemos lo que pasa de puertas adentro de las casas. Tiene muchísimos problemas de movilidad. Esto lo cuento porque es una persona querida y admirada, y sé que mucha gente se puede preocupar", nos decía entonces sobre la última etapa de la vida de la intérprete, a la que incluso visitó la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cumpliendo un sueño de Concha, a la que le hacía especial ilusión conocerla.

La actriz, convertida en reina de múltiples formatos y leyenda de nuestro espectáculo por derecho propio, había ido desapareciendo progresivamente del foco mediático desde que en 2020 abandonara sus labores como presentadora del espacio 'Cine de barrio' en Televisión Española.

* Si no ves correctamente este formulario, haz click aquí

Concha estuvo una década frente a las cámaras —tan solo se cogió una baja en 2014, cuando le detectaron un cáncer linfático del que afortunadamente se pudo recuperar—, presentándonos las películas de una época ya pasada, en la que ella misma fue una de las estrellas que más brilló.

Antes de que España se rindiera a sus pies, esta hija de una maestra republicana y de un comandante de caballería pasó su infancia en Marruecos y a su regreso a la península comenzó sus estudios de ballet y danza española. Aunque ganó una beca para formarse como bailarina en Lodres, la situación económica familiar no le permitió ir al extranjero y comenzó a trabajar en el cuerpo de baile de la Ópera de La Coruña y después en la célebre compañía de Manolo Caracol como bailaora flamenca antes de debutar como vicetiple en la revista de Celia Gámez.

Su carrera en el cine comenzó muy pronto. Con solo quince años apareció por primera vez en la gran pantalla en 'La reina mora', a la que seguirían papeles en películas como 'Muchachas de vacaciones' o 'Las chicas de la Cruz Roja'0, que rodó junto a Tony Leblanc y supuso su consagración profesional.

En 1965 rodó 'Historias de la televisión', donde por exigencias del guion la entonces conocida como Conchita Velasco interpretó un tema compuesto por Augusto Algueró y titulado 'La chica ye-yé', un apodo que llevaría ya para siempre y que fue el inicio de grandes éxitos también en su faceta como cantante, en la que llegó a grabar numerosos discos.

La actriz compartió escenas, y muchas veces matrimonios ficticios, con todos los grandes actores de la época: desde Manolo Escobar hasta Alfredo Landa, José Luis López Vázquez, Antonio Ozores o José Sacristán. Sobre este último, gran amigo suyo, decía en 2021 en el programa 'Palo y astilla' de La Sexta que, pese a sus diferentes opiniones políticas, ella no concebía su vida sin él: "Lo único que no hemos sido ha sido amantes, pero nos queremos tanto...".

Además de cosechar triunfos en series de televisión, Concha Velasco ha pisado con éxito las tablas del teatro y los musicales y en 1975 lideró la huelga de actores para conseguir mejores condiciones para la profesión. A lo largo de su carrera llegó a arruinarse por aventurarse a producir espectáculos musicales y tuvo problemas con Hacienda. En el lado positivo, recibió más de cuarenta premios por su labor como actriz, destacando el Goya de Honor a toda su carrera que recogió en 2013 de manos de su sobrina, Manuela Velasco.

Imposible olvidar también su papel en uno de los episodios más estrambóticos de la historia de nuestra televisión: el de Ricky Martin, el perro y el bote de mermelada. “Hemos sido víctimas de un bulo. Nos han atacado en una especie de locura colectiva. Un ataque en el que se hablaba de algo que nunca ocurrió y de protagonistas que nunca han existido. Todo es mentira”, explicaba ella misma en el propio programa 'Sorpresa, Sorpresa', donde supuestamente se habían producido aquellos hechos de los que habló toda España... sin que nadie los hubiera visto.

Unos años después publicaba sus memorias, 'El éxito se paga', donde contaba con lujo de detalles los pasajes más felices de su vida, pero también los amargos, en muchas ocasiones relacionados con sus parejas. "Siempre he ido a enamorarme de quien no debía", escribe en las páginas del libro.

TE PUEDE INTERESAR

Así era Carmen Sevilla en sus inicios, así la recordamos en el Telecupón y así fue su última aparición pública

Jorge C. Parcero

Sus grandes amores fueron Luis Sáez de Heredia, casado y junto al que pasó once años de su vida, el actor Juan Diego y el productor Paco Marsó, el padre de sus hijos. "Paco es parte profunda e importante de mi vida y lo único que de verdad lamento es que él no me quisiera o no me supiera querer", se puede leer en otro fragmento de su biografía sobre aquella tortuosa relación, sobre la cual dijo en una entrevista con 'XL Semanal' que había sido "la cornuda de España".

La retirada de los espectáculos llegaba para Concha en 2021, tras interpretar una última función de 'La habitación de María', escrita por su hijo Manuel, en el teatro Bretón de Logroño. "Estoy fundamentalmente triste porque me ha dado mucha pena, pero contenta porque esto es lo que queríamos en Logroño, en el teatro Bretón donde ya habéis visto cómo me quiere la gente. Hoy estoy especialmente triste, hacer este texto tan bonito y pensar que es la última vez que lo hacía. Estoy más dolorida que otros días, pero bueno, contenta porque ya habéis visto cómo me quieren", aseguraba entonces la emocionada intérprete.

Su última aparición pública también conectó con el mundo del teatro, pero en esta ocasión como espectadora. Fue el pasado mes de marzo, demostrando una gran vitalidad para ver sobre el escenario a Jorge Javier Vázquez protagonizar su 'Desmontando a Séneca'.

"Feliz por haberle podido dedicar la función a Concha Velasco. Qué emoción tenerte entre el público. Gracias por tanto durante tantos años", escribía el presentador en su cuenta de Instagram junto a una fotografía en la que posaba junto a la artista. Luciendo un exótico estampado animal y en una silla de ruedas empujada por su hijo Manuel, Concha Velasco se mostró tan optimista y risueña como la recordábamos y como siempre la recordaremos.