Andrea Duro rompe su relación con el número uno del pádel español, Ale Galán

La actriz Andrea Duro y el jugador de pádel, Ale Galán, lo han dejado tras más de dos años y medio de relación. Tal y como confirman a Vanitatis fuentes cercanas a la pareja, ambos habrían decidido poner punto final a su amor, que comenzó en 2021. “No es de ahora”, afirman esas mismas fuentes, que apuntan que podrían haber separado sus caminos hace unas semanas.

Por el momento, ella ha tomado la delantera y ha decidido poner espacio de por medio entre ellos, dejándolo de seguir en Instagram, aunque él todavía no le haya devuelto el ‘unfollow’. Su última publicación juntos fue a finales de enero, donde compartió una fotografía de forma cariñosa. “Con un tío majo”, escribió.

Un mes antes, por el día de Navidad, la actriz compartió una foto de ellos dos besándose. “He pasado la semana entre cajas de mudanza, guiones, perritos y familia”, afirmó. Hace poco, la pareja acababa de reformar su nueva casa. Un chalet con piscina y un gran jardín en el que disfrutaba su perra, Canela. Antes de mudarse allí, vivían en el piso que tenía la actriz en el centro de Madrid.

"Hace un año que me invitaste a vino al conocerme. Qué buen ojo tuve", escribió el deportista en sus redes sociales, cuando cumplían su primer aniversario. Un amigo en común intermedió entre ellos dos para presentarles. “Luego me hicieron un poco el lío entre él y mi amigo para invitarme a un partido de pádel. Me contaron que después íbamos a una cena con muchísima más gente, pero en la cena solamente estábamos los tres. Fue bastante rápido”, confesó Andrea en una entrevista para ‘Cosmopolitan’.

Un noviazgo que ambos han vivido de manera muy intensa. Sin embargo, en los últimos meses la actriz madrileña apuntaba a que todo no era perfecto. “Lo aprendo muchísimo con mi chico. Nos encanta la comunicación y cuando de repente nos hemos comunicado menos, hemos parado y decimos ‘¿por qué no hablamos tú y yo de tú y yo?’, y esto es genial”, confesaba en el programa ‘Estirando el chicle’.

Unos problemas que apostaban por solucionar y que podrían tener origen en sus apretadas agendas. “A veces, la gente se enfada porque se ha sentido desatendido o no le has cuidado y en vez de decírtelo, te hace el vacío. Hay que tener una capacidad bestial de entender que no eres perfecto”, explicó.

Por ahora, tanto Andrea como Ale continúan con sus compromisos profesionales. Durante la Semana Santa, ella se tomó unos días de descanso junto a unas amigas para ir a la playa. En cambio, Galán se encontraba al otro lado del Atlántico, donde tuvo un torneo en Venezuela. “Es muy difícil dejar las relaciones, pero yo soy súpertajante. Aguanto y cuando me canso de estirar, se acabó”, expresó ante la atenta mirada de Carolina Iglesias y Victoria Martín en su pódcast.