7 curiosidades sobre Javier Cámara que quizás no conocías todavía, pero que darán de qué hablar

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Icono imprescindible del cine y la televisión en España, Javier Cámara es uno de esos actores 360 a los que hacía referencia 'Paquita Salas'. De la comedia al drama o el thriller policiaco, ha sabido conquistar al público durante más de tres décadas en todo tipo de papeles.

Una versatilidad para meterse en la piel de otros, que contrasta con el máximo hermetismo que mantiene sobre su vida lejos de los rodajes. Así, en plena era de la hiperconexión, se suma a otros artistas como Manolo García, y el misterio de sus hijos, el actor Diego Martín, que vive entre París y Madrid, o la periodista Gloria Serra, que ha blindado su vida familiar.

Sin embargo, más allá de ciertos detalles sobre su faceta como padre de mellizos o sus orígenes en La Rioja, también hemos podido descubrir algunas curiosidades que marcan su carrera, Anécdotas que quizás no conocías, y que sirven para descubrir su lado más personal.

1. Estuvo a punto de ser sacerdote

El actor confesó que en su adolescencia se planteó entrar en el seminario antes de descubrir el teatro. "Quería ayudar a la gente… pensé que ese era el camino", reveló en 'El Hormiguero'.

2. Sus trabajos más curiosos

Antes de debutar en el mundo de la interpretación con un papel de camillero en un episodio de 'Eva y Adán, agencia matrimonial', trabajó de botones y bibliotecario para poder estudiar. Así, al llegar a Madrid, tuvo que encadenar trabajos mientras estudiaba interpretación. "Hacía de todo para sobrevivir y seguir en la RESAD", recordaba en 'Días de Cine'.

3. Tiene una memoria prodigiosa

Aunque la buena memoria es fundamental para los actores, parece que en su caso es excepcional. Así, diferentes directores han revelado que casi no consulta el libreto durante los rodajes. "Lo sabe todo antes de ensayar. Es increíble", aseguró Pedro Almodóvar en 'El País'. "Es memoria fotográfica pura", añadió Borja Cobeaga en el estreno de 'Fe de etarras'.

Las curiosidades de Javier Cámara

4. La frase que le cambió la vida

Precisamente, el director manchego fue quien le cambió la vida con una frase en el rodaje de 'Dolor y Gloria'. "Pedro me llevó aparte y, con tacto exquisito, me dijo: No pasa nada, pero nunca vuelvas a cortar una toma. Fíjate, mientras tú te quedabas en blanco, Darío (Granadetti) estaba poniendo una cara de expectación fascinante, y eso también es cine. En el cine, los errores son siempre bienvenidos", recuerda en 'ICON', sobre una anécdota del rodaje

"Si los errores son bienvenidos, si cagarla está bien, incluso cuando trabajas con Almodóvar, eso abre la puerta a vivir la profesión de otra manera, con sentido de la responsabilidad, pero sin ese punto de neurosis paralizante. Somos seres humanos, estamos programados para fracasar una y otra vez y seguir intentándolo. E incluso nuestros fracasos pueden resultar fértiles", añade en esta entrevista.

5 Sus gafas son casi un talismán

Más que un accesorio, forman parte de su identidad. "Sin gafas no soy yo" bromeó con David Broncano en 'La Resistencia', sobre este accesorio, explicando que comenzó a usarlas porque la necesitaba, pero que ya no se ve sin ellas.

6 La timidez le acompaña desde siempre

A pesar de ser un actor tan famoso, ha revelado en diferentes entrevistas que tiene una gran timidez. "Me da pánico ser el centro de atención", aseguró en una entrevista con 'El País'.

7 Sus 'desapariciones'

Tras los rodajes suele desconectar completamente, alejándose de todo. Una retirada casi ritual, puesto que como él mismo ha dicho en varias ocasiones, necesita recuperar el alma después de meses de exposición mediática. "Necesito irme, desaparecer… volver a ser yo", explicó en 'Late Motiv'. Además de señalar en 'El País': Si no paro, los personajes se me mezclan en la cabeza".

Unos detalles para conocer más a fondo al actor, no solo delante de las cámaras con sus múltiples éxitos, sino también en ese lado más personal que Javier Cámara quiere alejar de los focos.