La cita con la realeza de Sacha Baron Cohen

Sacha Baron Cohen ha vuelto a romper moldes con una película. Tras Ali G y Borat ha llegado Brüno y ni la familia real británica ha podido resistirse a ver el filme. Tanto es así, que según publican los medios británicos, los royals han pedido un pase privado de la cinta protagonizada por el controvertido artista.

La película, en la que Sacha Baron Cohen interpreta a un reportero de moda austríaco gay, se ha proyectado ya en una parte de Inglaterra y muchos de los trabajadores de Isabel II la han visto. Tanto visionado ha despertado el interés de los miembros de la familia real, por lo que desde la distribuidora ya preparan todo para un pase privado en palacio, aunque algunos apuntan a Buckingham, otros aseguran que será en Balmoral.

Los medios británicos no han podido averiguar cuál de todos los royals está interesado en ver la película, pero los próximos en acudir de visita a esta residencia son la propia reina y su marido, el duque de Edimburgo. Una fuente de los estudios Universal, encargados de la producción de Bruno, ha afirmado que “a menudo tenemos correos electrónicos de gente importante pidiendo datos de pases privados”.

Pero en este caso ha sido diferente, porque, tal y como cuenta la fuente que “cuando nos percatamos de que se trataba de la familia real hubo algunas risas. (La película) no es apta para cardíacos”. La calificación se la otorga por los comportamientos de Brüno durante toda la película, actitudes tales como cambiar a un niño de color por un iPod. Un tono irreverente que quizá no sea del todo del agrado de su graciosa majestad.

Algunos medios, como el diario The Sun ya han especulado con la posibilidad de que sean sus nietos quienes quieran ver la película, ya que, según publican, ese tipo de humor “hará que Guillermo y Enrique se rían, pero que el Príncipe Felipe probablemente tendría un ataque al corazón”.