La Reina llega a Marivent mientras Diego Torres decide declararle la guerra

Comienzan oficialmente las vacaciones para la reina Sofía, aunque las ha tenido que interrumpir forzosamente para viajar a Galicia junto al Rey, donde ambos dieron este jueves el pésame a las víctimas del accidente de tren. El pasado martes, después de recibir en Zarzuela a representantes de las ONG´s Manos Unidas y Unicef, doña Sofía puso rumbo a Palma de Mallorca para disfrutar de la isla. No se fue sola, en su estancia en Marivent le acompaña su hermana Irene, que como en otras ocasionessigue a la Reina allá donde va para hacerle más llevaderos sus momentos de soledad.

González Peeters pide una nueva ronda de interrogatorios que incluyan a la ex mujer de Carlos García Revenga y a Corinna Sayn-Wittegenstein

La princesa Irene, además, supondrá un apoyo para ella ahora que el exsocio de Urdangarin intenta involucrarla en todo el escándalo del caso Nóos. Diego Torres ha vuelto a destapar la caja de los truenos y ha entregado al Juzgado de Instrucción número 3 de Palma un escrito que incluye un mensaje de doña Sofía a su yerno a principios de 2003. En el email la Reina dice darse por enterada de la creación del Instituto Nóos: “Muchas gracias por la información de tu nueva empresa. ¿A que no esperabas esta contestación? Pero como ves soy cumplidora ¿A que sí?”, era la respuesta de la mujer del Rey a un correo electrónico que Urdanagarín había enviado a todos sus contactos para anunciar su nueva actividad al frente de la Fundación.

Este correo demuestra, según el abogado de Torres, “el nivel de implicación y conocimiento” que la Casa Real tenía de los asuntos que manejaba el yerno real. Pero las pretensiones del exsocio de Urdangarin no acaban ahí, en salpicar a la Reina, sino que a través de su letrado, González Peeters, pide una nueva ronda de interrogatorios que incluyan a la ex mujer de Carlos García Revenga, secretario de las Infantas, y a la princesa alemana, Corinna Sayn-Wittegenstein, la amiga del Rey.

Este es el nuevo panorama con el que se enfrenta ahora la Familia Real. Mientras el juez Castro valora lo solicitado por González Peeters, los Borbón continuarán con su hoja de ruta prevista en la que casi para todos, Marivent es parada obligatoria.

Los príncipes de Asturias visitarán Palma a principios de agosto con sus dos hijas, las infantas, Leonor y Sofía, ya que el día 6 presidirán junto a los Reyes la tradicional cena ofrecida por don Juan Carlos en el palacio de la Almudaina a las autoridades baleares. Poco tiempo disfrutará don Felipe de los encantos de la isla. El día 14 debe volar a Paraguay para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente, Horacio Cartes. Quién sabe si aprovechará entonces la Princesa para realizar una de esas escapaditas que organiza con sus más fieles amigas.

También está previsto que la Infanta Elena acuda a Marivent como cada año con sus dos hijos, Froilán y Victoria Federica. La estancia allí de los nietos de los Reyes hace sospechar que doña Cristina podría llevar a sus cuatro hijos a la isla para que disfruten de las vacaciones con sus primos, igual que el año pasado. Sin embargo, la incógnita, una vez descartada la presencia del duque de Palma, será si la infanta Cristina pasará unos días con sus hijos en Marivent o repitiráel mismo modus operandi de 2012 con miradas empañadas de sus hijos incluidas.