La impuntualidad de Alberto y los fuegos artificiales: la boda de Louis Ducruet y Marie Chevallier, según las redes
El principado se blindó para mantener la privacidad de la boda, así que solo nos han quedado los redes sociales, que nos han descubierto varios secretos
Louis Ducruet y Marie Chavellier ya son marido y mujer. Tras celebrar su boda civil el viernes, este sábado se daban el 'sí, quiero' religioso en la catedral de Mónaco. Como se celebraba en un lugar público, al contrario que Carlota Casiraghi, esperábamos tener muchas fotografías de los novios y los invitados, pero nuestro gozo en un pozo. El principado se blindó para mantener la privacidad de la boda, así que solo nos han quedado los redes sociales, que nos han descubierto varios secretos del último enlace Grimaldi.
1. Las damas de honor
Como puede verse en cuentas de amigos de los Grimaldi, las damas de honor eran amigas de los novios, con la única excepción de Camille Gottlieb, la hija pequeña de la princesa Estefanía y hermana de Louis Ducruet, con un diseño color oro de manga asimétrica. La sobrina de Alberto de Mónaco llevaba el pelo semirrecogido y un ramo de flores en la mano, tal y como podemos ver en esta imagen del Instagram de su novio, Médy Anthony, que lució un traje chaqueta oscuro con corbata roja y zapatillas, en una versión un tanto 'relajada' de lo que debe ser el atuendo de invitado masculino en una celebración de este tipo.
2. La impuntualidad (y soledad) de Alberto
Aunque un día antes, en la gala de la Cruz Roja, lo veíamos acompañado de Charlène, Alberto llegó solo a la boda de su sobrino, tal como se ve en un vídeo grabado por una fan que estaba a las puertas de la catedral y pudimos constatar gracias al posado familiar a las puertas de la catedral de Mónaco con los recién casados. Pero lo más grave es que el soberano llegó unos minutos tarde, cuando la boda ya había empezado. Ni rastro de Charlène, quien es conocida por faltar a los eventos familiares. En teoría su asistencia estaba confirmada...
3. ¿Un homenaje a Estefanía?
Los novios han querido blindar Mónaco para mantener la privacidad (o quizás vender después la exclusiva), por lo que existen muy pocas fotografías del enlace fuera de las oficiales. Las únicas en las que se ve a Marie se tomaron cuando se desplazaba del Palacio Grimaldi a la catedral y están algo borrorsas. Pero algunos usuarios de Instagram han destacado que parece que la novia lleva un collar de perlas que podría ser el mismo que lució la princesa Estefanía en la boda de Daniel Ducruet, todo un homenaje a sus suegros.
4. Los preparativos
Otro turista que estaba paseando por Mónaco compartió este vídeo donde vemos los preparativos de la catedral -flores, alfombra- antes del enlace. Gracias a las dos fotografías oficiales del interior, con el beso de los novios y su salida de la iglesia, podemos hacernos una ligera idea del resultado de las horas de trabajo.
5. La celebración
Una vez más, han sido los perfiles de los propios invitados los mejores informadores. Gracias a ellos, hemos podido saber que la celebración fue en el Monte Carlo Bay & Hotel Resort y hasta altas horas de la noche. Hubo música en directo, mucho baile y canciones de todas las épocas, desde los Jackson Five hasta Ed Sheeran, además de fuegos artificiales que los invitados pudieron disfrutar desde la terraza del hotel, donde también había 'sishas' disponibles para ellos.
6. El segundo vestido de Marie
Y otra vez hay que dar las gracias a otro de los invitados, en este caso uno de los amigos del novio, porque a través de los vídeos colgados en su Instagram hemos podido confirmar que la novia se cambió de vestido para el baile. En la parte izquierda de la imagen vemos a Marie, de espaldas y preparada para lanzar el ramo a un grupo de invitadas que esperaban ansiosas el momento. Podemos ver que, aunque la flamante esposa de Louis Ducruet lleva la melena suelta, el vestido es de tirantes y con toda la espalda descubierta, muy diferente al escogido para la ceremonia religiosa, diseñado por Pauline y Atelier Boisanger.
Louis Ducruet y Marie Chavellier ya son marido y mujer. Tras celebrar su boda civil el viernes, este sábado se daban el 'sí, quiero' religioso en la catedral de Mónaco. Como se celebraba en un lugar público, al contrario que Carlota Casiraghi, esperábamos tener muchas fotografías de los novios y los invitados, pero nuestro gozo en un pozo. El principado se blindó para mantener la privacidad de la boda, así que solo nos han quedado los redes sociales, que nos han descubierto varios secretos del último enlace Grimaldi.