Divorcio real: las pistas que nos dieron Peter Phillips y Autumn Kelly (y no supimos ver)

Es la noticia real 'british' de la semana. El lunes, los medios de Reino Unido anunciaban el divorcio de Peter Phillips, el hijo mayor de la princesa Ana, tras 12 años de matrimonio, 17 de relación y dos hijas en común. Una ruptura que supone la primera que ocurre entre los nietos de la reina Isabel, quien al parecer está bastante triste por los acontecimientos, dada la especial relación que tenía con Autumn Kelly, la ya exmujer de su nieto. Aunque lo cierto es que la separación de la pareja no ha pillado a la monarca por sorpresa.

Al parecer, según varios portales británicos, Peter y Phillips le contaron hace unos meses que tenían intención de separarse, mientras disfrutaba de sus vacaciones en Balmoral, y fue una de las primeras personas a las que quisieron hacer partícipe de la situación. A partir de entonces, la pareja ya tenía vía libre para actuar en consecuencia, sin correr el riesgo de que el rumor le llegara antes de conocer la noticia por los propios interesados. De hecho, en los últimos meses fueron dejando pistas sobre la situación. Pistas que fueron pasadas por alto, hasta que se ha conocido la decisión del matrimonio.

La última vez que vimos a la pareja fue en septiembre, acompañando al príncipe Carlos y la reina Isabel en los llamados Bramer Gathering, en las Highlands escocesas. Aunque la actitud de Autumn con su abuela y su tío -políticos- fue la misma de siempre, cordial y cariñosa, según algunos testigos de la cita, entre la pareja se notaba algo de frialdad. Una actitud a la que en ese momento no se daba importancia pero que ahora cobra algo de significado. Y lo mismo pasaba con sus siguientes apariciones.

Era la canadiense la que asistía en solitario a la fiesta benéfica The Ball Fall el pasado noviembre, mientras que extrañaba la ausencia de la pareja en el servicio religioso de Navidad en la iglesia de Santa Magdalena en Sandrigham, y a la que asistía el grueso de la familia real. Días después, Peter acudía a misa en el mismo sitio, pero sin la compañía de su ya exmujer. La última vez que veíamos al empresario -además de en el polémico anuncio de la televisión china- fue el 22 de enero, en la entrega de unos premios hípicos.