Mary de Dinamarca desempolva su vestido de Ralph Lauren preferido

No es ningún secreto que de un tiempo a esta parte las royals, coordinadas o no, han adoptado una táctica de reciclaje de looks que todas ponen en práctica en la gran mayoría de sus puestas en escena. En parte, esta medida insólita en sus estilismos se debe a una política de contención tan necesaria (y bien vista) en tiempos de crisis y que, para nuestra satisfacción, nos está brindado la oportunidad de volver a ver algunos de los mejores looks que estaban enterrados en lo más profundo de sus armarios.

Hoy le ha tocado el turno a Mary de Dinamarca y, te lo adelantamos, ha sacado a pasear la artillería pesada. La princesa, australiana de nacimiento, ha acudido a un acto muy especial y cargado de simbolismo para a ella: la inauguración de un monumento bautizado con el nombre de Australian War Memorial, que busca rendir un homenaje a los soldados y militares australianos que contribuyeron a la liberación de Dinamarca durante la Segunda Guerra Mundial, así como a los soldados australianos caídos en la Primera Guerra Mundial.

A lo simbólico del acto en sí, se une un detalle fashionista que no ha pasado por alto ante nuestro radar: Mary de Dinamarca ha desempolvado de su armario el que es, desde hace años, su vestido preferido de Ralph Lauren.

Hablamos de un vestido bicolor confeccionado con un tejido satinado y estampado con flores que la princesa ha llevado multitud de veces y al que suele recurrir para las ocasiones especiales, y la inauguración de este monumento en honor a sus compatriotas era una de esas.

Pero, por muchas veces que haya lucido el vestido, Mary de Dinamarca siempre nos sorprende con combinaciones diferentes con él como protagonista y, de rebote, actualiza la prenda firmada por Ralph Lauren cada vez que la lleva. Para esta ocasión ha unido el vestido a una chaqueta negra con el cuello mao decorada con un minicinturón, unos salones básicos en color nude, guantes cortos en el mismo tono y un bolso de mano trenzado.

El vestido, una auténtica y singular joya en su colección, es uno de esos modelos clásicos que jamás pasan de moda, de ahí que Mary haya podido lucirlo desde su compra hace unos cuantos años sin desentonar ninguna de esas veces. Es un diseño de manga corta, con el escote redondo, ajustado en la cintura, de donde parte una falda de largo midi con un ligero vuelo.

A estas alturas te picará la curiosidad por ver y recordar a la Mary de Dinamarca del pasado con este vestido bicolor de flores de Ralph Lauren, y como tus deseos son órdenes para nosotras, tenemos el documento gráfico (uno de los tantos) que estabas deseando volver a ojear.

Integrado en un look completamente distinto al que ha llevado recientemente, pero para una ocasión con un significado similar: uno de los viajes oficiales que la pareja real realizó a Australia y que se remonta al año 2011.