Ana Boyer, más instagramer que nunca: las mechas con truco para levantar el look mami

Las mujeres Preysler no son precisamente amigas de los cambios radicales ni de las coloraciones atrevidas. Jamás verás a Tamara Falcó con un pixie rubio platino y jamás creímos que veríamos a Ana Boyer desprendiéndose de su larguísima, y pelín aburrida, melena.

Pero llegó Mikey, como Tamara llama cariñosamente al hijo de Ana, y su vida cambió por completo. La falta de tiempo libre y la necesidad de un peinado cómodo y que no necesite demasiado aderezo llevaron a Ana Boyer a un corte de pelo drástico, de los que le gustan últimamente a Tamara Falcó. Así que se pasó a una melena midi, tan midi que prácticamente era un corte bob. Un mom hair en toda regla.

Este largo, ligeramente por encima de los hombros, ha sido el cambio más radical que hemos visto en Ana Boyer. La pequeña del clan Preysler siempre había lucido una larguísima melena que peinaba al gusto, primero ultralisa, como dictaba la moda, y después con ondas naturales. Durante años jamás vimos el más mínimo cambio en su melenaza...

Hasta que llegó la melena midi y dio un vuelto al look de Ana. Su aspecto, hasta entonces sobrio, se llenó de matices. De entrada, su cabello creció en volumen. Ya no había necesidad de estar ahuecándose el pelo constantemente al estilo Ariadne Artiles, la melena corta de Ana Boyer era voluptuosa sin que le hiciera nada.

Precisamente eso era lo que buscaba Ana, que su cabello no le robara tiempo de estar cuidando del pequeño Miguel. A este tipo de cortes de pelo se les suele llama ‘mom hair’, pelo de madre, porque son muchas las famosas que se cortan el pelo cuando se convierten en madres. Es el equilibrio entre ahorrarse tiempo cada mañana y que el bebé no te tire el pelo. Ya lo hicieron Elsa Pataky, Carlota Casiraghi, Irina Shayk o Jessica Alba.

La otra parte positiva, además de la funcional, es que se trata de un corte de pelo muy chic y fácil de moldear. Ana Boyer lo peina con ondas abiertas y retro, lo lleva liso, se hace una diminuta e ideal coleta… Y tan versátil le resulta y tan cómoda está con él que lo ha aclarado como nunca antes.

Aunque en el pasado habíamos visto a Ana con reflejos que aclaraban ligeramente su melena, se trataba de una coloración tan sutil como difícil de distinguir. Incluso, antes de cortarse el pelo, parecía que sus mechas surgían solo de medios a puntas, como si se tratara de unas mechas californianas muy discretas. Así que cuando se pasó a la melena midi, la coloración desapareció y Ana Boyer se quedó con su cabello castaño. Muy natural, cuidado y brillante, pero color block, sin matices.

Con lo mucho que cuida su cabello, durante la cuarentena la hija de Isabel Preysler debió de darle miles de vueltas a su melena. ¿La recorto y mantengo su largo? ¿La dejo crecer? El resultado final han sido unas finísimas mechas miel que llenan de luz el cabello. Al tratarse de una coloración unos tonos más clara que su color natural, el resultado no es agresivo y la idea es que el cabello parezca aclarado por el sol.

Se trata de unas mechas muy finas que van desde la raíz hasta las puntas, no buscan un degradado sino aportar luz a todo el cabello. La coloración, junto a su piel bronceada por los primeros días del verano, crea una imagen de calidez que resalta mucho más sus facciones, haciendo que su rostro pareza iluminado. Además, Ana ha sabido interpretar muy bien su nueva coloración y desde que ha pasado por la peluquería ha comenzado a hacerse unas ondas muy abiertas y deshechas con las tenacillas.

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El resultado final de las mechas color miel y el peinado ondulado y veraniego ha sido el de un inesperado y refrescante rejuvenecimiento. Es un mom hair sí, pero tiene tantos matices que, por primera vez, Ana Boyer tiene mucho rollo instagramer.