Aceites corporales con los que te olvidarás del perfume este verano

Seguro que has probado los beneficios de los óleos en tu propia piel (y probablemente también en el cabello). Pero, más allá de sus infinitos puntos fuertes cosméticos y de sus fundentes y cálidas texturas, la mayoría cargadas de ingredientes naturales, esconden la virtud de proporcionar fragancias muy cuidadas y gustosas que conquistarán las narices más exigentes. Y te hacen ahorrar espacio en tu neceser de vacaciones.

La firma Leonor Greyl cuenta con una dilatada experiencia (nada más y nada menos que de cinco décadas) en cosmética oleosa. La razón de su sanísima obsesión por los aceites de cuidado se resume en la infinidad de ventajas que este formato de producto ofrece. En sus propias palabras:

• Tienen un alto poder de nutrición. La mayoría incluyen oils esenciales y vegetales que pueden presumir de ser únicos en hidratar y nutrir la dermis.
• Penetran en profundidad. Gracias a su estructura (son lipofílicos, es decir adoran a los lípidos) se absorben en el interior de la piel y de las cutículas capilares, formando un escudo natural.
• Iluminan al instante. Con solo aplicarlos compruebas como su acabado satinado embellece la textura de la tez y multiplica su capacidad para reflejar la luz.
• Cunden mucho. Con unas gotas, cubres grandes superficies a tratar. Además, se extienden muy fácilmente.
• Son multiusos. La mayoría tienen la capacidad de poder ser útiles para diferentes gestos de autocuidado y en tu pericia está la capacidad de multiplicarlos y adaptarlos a tus necesidades.
• Huelen de maravilla. Es un hecho del que, como buena fan de la cosmética, debes aprovecharte.

Modo de aplicación

Seguro que no es la primera vez que te decides a utilizar un aceite corporal… Sin embargo, para sacar el máximo partido a estas fórmulas altamente olfativas, el consejo experto es utilizarlo justo después de la ducha, con la piel ligeramente húmeda. Lo ideal es hacerlo a través de gestos circulares y, siempre que sea posible, no olvidarte de dar un toque de fórmula en el cabello ya que, gracias a su estructura porosa, es el vehículo ideal para dispersar la fragancia.

Descubre la selección de aceites corporales que te harán tomarte un descanso con tu perfume de cabecera.

Huile Secret de Beauté de Leonor Greyl

Con un 97% de ingredientes naturales, Huile Secret de Beauté, de Leonor Greyl (51 euros), es un cóctel antioxidante multiusos. Compuesto de óleos de burití del Amazonas, pepitas de granada y nuez de mongongo, repara, nutre y mejora la elasticidad de la piel mientras tiene un gran punto a su favor: deja una delicada fragancia de jazmín y tiaré.

Huile Prodigieuse Florale de Nuxe

La ya clásica referencia de la firma francesa se compone de siete aceites vegetales y es apto para rostro, cuerpo y cabello. El tacto seco de Huile Prodigieuse Florale, de Nuxe (29,90 euros, en Sephora), resulta perfecto para sublimar la piel mientras aporta una fragancia chispeante con pomelo, flor de azahar, magnolia y almizcles blancos.

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Luminous Perfumed Dry Oil de Comodynes

Se trata de una referencia multiusos que suaviza, ilumina, nutre, protege, hidrata y, por supuesto, aporta un efecto olfativo. Luminous Perfumed Dry Oil, de Comodynes (18,50 euros), supone toda una experiencia sensorial (también para los que te rodean) a través de notas solares, flores blancas y acordes de coco y vainilla.

Ritual of Karma Soul Shimmer Body Oil de Rituals

Su objetivo es claro: sublimar tu piel bronceada. Para ello, Ritual of Karma Soul Shimmer Body Oil, de Rituals (19,50 euros, en Sephora), contiene partículas iluminadoras, además de un complejo activador para acelerar la subida de tono. Sin embargo, este mix de aceite de oliva, cártamo, jojoba y girasol se quedará en la memoria colectiva gracias a su perfume veraniego con extracto de loto sagrado y té blanco.

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Golden Radiance Body Oil de Freshly Cosmetics

Entre sus beneficios se encuentra su capacidad de nutrir e hidratar, mejorar la elasticidad y la firmeza de la piel, minimizar el aspecto de la celulitis y las estrías… Pero nuestro mayor aplauso es por esa fragancia natural de la que Golden Radiance Body Oil, de Freshly Cosmetics (18,20 euros), hace gala. Incluye pomelo, bergamota, mandarina, piña, sándalo… Adictiva.

Cocon de Sérénité Relaxing Body Wrap de L’Occitane

La textura en aceite de Cocon de Sérénité Relaxing Body Wrap, de L’Occitane (35 euros), se transforma en leche al contacto con el agua. Su misión es aportarte un momento de calma gracias a su delicioso aroma que se construye como un perfume: con notas de entrada (petitgrain, lavanda y geranio), corazón (naranja, flor de naranjo y mandarina) y de fondo (rosa, albahaca y hojas de menta).

Dry Body Oil Wonder Fig de Clarins

Formulado con cuatro óleos vegetales (coco, camelia, girasol y sésamo), Dry Body Oil Wonder Fig, de Clarins (35 euros), nutre, hidrata y suaviza la dermis del cuerpo, dejando un acabado sutil y atractivo con una irresistible fragancia verde y vibrante.

Aceite Luminoso Peonia Nobile de Acqua di Parma

Inspirado en la fragancia de la entidad italiana, el Aceite Luminoso Peonia Nobile, de Acqua di Parma (58 euros, en El Corte Inglés), combina oil de jojoba, de semillas de granada, manteca de karité y unas perlas reflectantes que aportan luz al instante. Una delicia para todos los sentidos.

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N° 5 L’Huile Corps de Chanel

Con motivo del centenario del perfume más célebre de la maison, han creado una fábrica efímera con casi dos docenas de referencias centradas en sus notas olfativas. N° 5 L’Huile Corps, de Chanel (70 euros, edición limitada), es un tesoro de óleo que, gracias a su rica textura, deja un efecto satinado, hidratado y con el inconfundible aroma.