Las seductoras propiedades que han convertido a la trufa blanca en el objeto de deseo de la cosmética well aging

Exquisita y solo al alcance de unos pocos privilegiados -y en su prácticamente mayoría profesionales de la cocina-, la trufa blanca solo se encuentra en los meses de otoño (octubre-diciembre) en la región del Piamonte, en el noroeste de Italia.

Su precio es mucho más elevado que el de la trufa negra y su sabor y propiedades también las diferencian, características que también se trasladan a su uso cosmético. La trufa blanca contiene ácidos grasos, lo que se traduce en unas interesantes propiedades no solo hidratantes sino también protectoras de la barrera de la piel.

A la lista de propiedades se le suman auténticos conceptos best sellers del sector, desde los antioxidantes hasta los despigmentantes.

Pero, aunque todo esto pudiera ser un indicador de que los cosméticos que incorporan trufa blanca en su formulación tendrían un precio tan prohibitivo como el del hongo -entre los 2000€ y los 6000€/Kg según Laumont, operador de trufas y setas en España-, la realidad es que los pocos pero selectos productos que lo utilizan tienen un precio mucho más asequible.

Marcas españolas como Carmen Navarro o Sepai la incorporan en algunos de sus productos, pero la veloz fama actual de la trufa blanca se debe, una vez más a pesar de la distancia geográfica, a la cosmética coreana.

La trufa blanca detrás de la glass skin

Nos referimos a la marca d'Alba Piedmont, que le debe el nombre a una de las poblaciones del Piamonte, en la que se recolecta la trufa blanca. Todos los cosméticos de la firma incorporan las propiedades del hongo -incluso han patentado su trufferol™ = trufa blanca + vitamina E-, pero es su bruma bifásica First Spray Serum la que no solo ha disparado sus ventas en nuestro país, sino que también ha protagonizado cientos de vídeos en TikTok.

La leyenda cuenta que todo comenzó cuando la tiktoker de ascendencia coreana Aylen Park publicó un vídeo con su madre en el que la radiante, impoluta y repulpada piel de la señora lucía como un verdadero tutorial de glass skin. Para lograrlo, apuntaba al sérum en spray con trufa blanca. El resto es historia de las redes sociales.

Medio TikTok se lanzó a comprar los productos y el otro recibió el pack de sérum, crema modulable y fotoprotector para testar los resultados en su propia piel y el veredicto terminó siendo una venta masiva del sérum bifásico en bruma a la trufa blanca.

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Pero, mientras la principal motivación de la compra del producto era recrear la clásica piel coreana, sin imperfecciones, luminosa y muy jugosa, lo que conocemos como una glass skin (piel de cristas porque parece que te puedes ver reflejada en ella), tenemos que apartar el boom viral y poner sobre el tocador las verdaderas propiedades de la trufa blanca a nivel cosmético.

Propiedades cosméticas de la trufa blanca

Mientras lo que se aprecia a simple vista puede determinar una compra compulsiva, la verdad es que la trufa blanca tiene propiedades que ayudan en la prevención del envejecimiento cutáneo y, a la vez, se puede aplicar hasta en pieles muy secas o sensibles.

• Es antioxidante, es decir, frena la acción de los radicales libres que alteran el normal funcionamiento de las células de la piel y aceleran el proceso de envejecimiento.
• Al contener niacinamida, entre sus propiedades está la despigmentante, al igualar el tono de la piel.
• Estimula la producción de colágeno y elastina, lo que mejora la firmeza y elasticidad de la piel.
• Es hidratante por su alto contenido en ácidos grasos que también impiden que la piel pierda agua, a lo que se suma que también contiene vitamina B2.
• Tiene propiedades antiinflamatorias y calmantes, lo que la convierte en aliada para pieles sensibles.

Todos estos beneficios han convertido a la trufa blanca en una verdadera joya para el cuidado de la piel que quiere tratar los signos de la edad no de una forma agresiva sino controlada y sin riesgos, el well aging (envejecer bien y con dignidad) que ha venido a sacudir a la tiranía del concepto antiedad.