Javier Bardem, nuevo Tritón de 'La Sirenita' (Disney): el actor dramático que hace películas para sus hijos

El soberano de los siete mares de 'La Sirenita' ya tiene rostro en la versión de acción real. Javier Bardem será Tritón, el protector y cálido padre de la díscola Ariel en la nueva adaptación del clásico de Disney. No es la primera vez que el actor trabaja para el estudio ni que se mete de lleno en el personaje de una cinta familiar. En 2017 dio vida al temible capitán Salazar en la quinta entrega de 'Piratas del Caribe'.

En sus últimas elecciones profesionales quizá tiene algo que ver su paternidad con hacer películas que puedan ver sus hijos (una frase que es todo un clásico en las entrevistas que dan los actores). Pero esto no deja de ser una hipótesis, ya que Bardem sigue siendo reacio a comentar detalles de su vida privada.

Recordada es aquella entrevista que concedió a la edición norteamericana de la revista 'Esquire' (allá por 2017) en la que sí habló de traumas infantiles con un "padre despótico" que siempre estuvo "ausente". En la misma publicación también mencionó, cosa rara, a los hijos que tiene fruto de su unión con Penélope Cruz: "Mis hijos son increíbles. Nos tienen en sus manos. Lo que más me gusta es pasar horas y horas jugando a princesas y dragones con ellos y con mi mujer".

En el mismo escrito, el hijo, sobrino y nieto de actores reconoció que estar alejado de los suyos por motivo de un rodaje le producía dolor. "Es algo que se vuelve hasta físico”, aseguró. "El amor de un padre es tan inmenso que nadie puede entenderlo hasta que lo experimenta", reconoció. Aunque fue una de las pocas ocasiones en las que se coló algo personal en una entrevista, no hubo apenas mención a Penélope. Pese a que jamás evitan posar juntos o mostrar una complicidad a prueba de bombas en galas y entregas de premios siempre declinan hablar excesivamente el uno del otro.

Así que, pese a que Bardem esté cumpliendo el viejo cliché del 'hago películas que puedan ver mis hijos', dudamos que lo manifieste verbalmente. El trabajo y la vida, por separado.