Fotos exclusivas: Simeone y Carla Pereyra, sus días más apasionados en Marbella

Cualquier expresión cliché serviría para explicar las fotografías que ilustran y dan sentido a este reportaje... "Más enamorados que nunca", "apasionados como el primer día", "románticos y felices"... Lo cierto es que Simeone y Carla Pereyra rezuman felicidad y es muy habitual que los paparazzi puedan hacer fotos del matrimonio muy efusivos y apasionados.

Su historia de amor se remonta a 2014 y el 14 de junio celebraban su segundo aniversario de boda civil, que tuvo lugar en Alvear Icon de Puerto Madero en Argentina. Recordemos que tres meses más tarde celebrarían la reboda en Castello di Casole, en la Toscana, entre Florencia en Siena. Mientras que la primera fue muy íntima, la segunda fue mucho más multitudinaria, pues, en definitiva, querían festejar ese acontecimiento tan trascendental por todo lo alto.

Era la propia Carla la que explicaba en Vanitatis los motivos que les llevaron a celebrar una ceremonia 'pequeña' para formalizar su relación: “Fue un enlace íntimo y familiar porque siempre consideramos que la gente que de verdad sentía y nos acompañaba era muy contada. Como era nuestra boda civil, queríamos hacerla en nuestro país de origen, Argentina, donde estaban en ese momento nuestros padres, amigos y familiares más íntimos. Fuimos 50 personas y fue muy bonita y muy emotiva. La gente que nos acompañó era la gente que de verdad se alegraba por nosotros y no necesitábamos más.”

Y, lo más significativo, Pereyra explicaba lo que significaba este enlace para ambos (atención, 'spoiler', la vida sigue igual, como cantaba Julio Iglesias): “No siento que haya cambiado mucho nuestra relación. Siempre fue una relación de confianza y de amor. Un papel no nos ha cambiado, pero la boda sí supuso un momento bonito con nuestras hijas, con nuestra familia y una celebración del amor, sobre todo”.

Respecto a la ceremonia italiana, Carla también habló en Vanitatis y nos contó algunas anécdotas muy jugosas, como cuando cantó Andrea Bocelli, lo que propició algunas escenas de gran intensidad emocional: "Yo ya estaba llorando al entrar con mi padre del brazo y ver a Diego en el altar... Me emocioné muchísimo. Y luego al ver al señor Bocelli, a quien admiro tanto, fue un momento que nunca olvidaré".

El entrenador del Atlético de Madrid y su mujer han disfrutado estos días en Marbella, donde fueron fotografiados, como decimos, sin prestar atención a si había algún fotógrafo en la lontananza o escondido con un teleobjetivo para conseguir las imágenes que ahora podemos mostrarles, que evidencian su gran momento.

Los atléticos ya están al tanto, pero para los que no, diremos que 'el Cholo' regresaba a la competición por todo lo alto este domingo a defender un título, el de La Liga, que esperan conseguir por segundo año consecutivo. De momento, las cosas empezaron muy bien ya que derrotaron a domicilio por dos goles a uno al Celta de Vigo, merced al buen hacer del equipo y en concreto de Ángel Correa y Mario Hermoso, que fueron los artífices de los dos tantos.

Más allá de su brillante trayectoria profesional, primero como futbolista y ahora como entrenador, debemos recordar que Simeone, de 51 años, tiene cinco hijos, dos con Carla, Francesca y Valentina, y tres de su primer matrimonio con Carolina Baldani, con quien estuvo casado entre 1994 y 2010, Gionanni Gianluca y Giuliano. Este último pasó con su padre y la mujer de este la época más dura del confinamiento, como Carla nos contó en una entrevista exclusiva.

"Lo hemos pasado todos en casa, los cuatro. Hemos estado quince días confinados y ha sido una experiencia bastante dura. Mucha tristeza e incertidumbre. Ver a las niñas con fiebre era poco alentador. Si hay algo que me ha dejado todo esto, al menos en mi caso, es un mensaje de gratitud, por estar todos sanos ahora, pero también una bocanada de conciencia humana, porque nos hemos convencido de que en cualquier momento, a cualquiera de nosotros, nos puede cambiar la vida de repente", nos comentaba.