La realeza belga celebra el Día Nacional: todas las fotos del desfile militar
Toda la familia real de Bélgica se ha reunido para celebrar la Fiesta Nacional del país y, como siempre, la gran protagonista ha sido la princesa Elisabeth
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Cada 21 de julio, la familia real belga se reúne para celebrar la Fiesta Nacional del país. Una importante cita que, como cada año, ha arrancado con un Te Deum en la catedral de Santa Gúdula de Bruselas. Precisamente en esta primera parada antes del desfile militar pudimos ver al rey Felipe y Matilde de Bélgica posando, visiblemente felices, junto a sus cuatro hijos, Elisabeth -que fue la protagonista absoluta con un precioso vestido rojo-, Gabriel, Emmanuel y Eléonore. Sin embargo, además del estilismo de la princesa heredera también ha habido otros detalles que no han pasado desapercibidos.
Ha sido ampliamente comentada la entrada de los hijos mayores de los reyes, pues Elisabeth lo hizo del brazo de su hermano Emmanuel y este, además, llevaba una corbata a tono con su vestido. No obstante, desde los reporteros presentes a las afueras del templo hasta nosotros mismos no hemos podido dejar de fijarnos en lo mucho que han crecido los jóvenes príncipes. Cuando uno de los fotógrafos comenta lo alto que está Gabriel (de 18 años), la reina Matilde lo mira orgullosa y dice: "Se está haciendo grande". Amplias sonrisas y varios estilismos elegantes no han bastado, sin embargo, para que dejásemos de ver una escena que se vuelve a repetir pese a la polémica que causó el año pasado.
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La reina Matilde apostó este año por un vestido amarillo intenso de manga francesa y cuello chimenea que combinó con una sofisticada pamela natural, guantes de cuero y un broche de oro con forma de flor a juego con sus pendientes. Sus hijas se decantaron también por colores vivos para plantarle cara a la lluvia, ya que la benjamina acudió enfundada en un clásico vestido azul cielo y la heredera deslumbró con un diseño de Victoria Beckham con manga de vuelo, aberturas en los hombros y silueta entallada.
El estilismo de la princesa Elisabeth nos recuerda al diseño de Essentiel Antwerp que llevó su madre a finales del mes de mayo para asistir a un concurso de violochelo en el Bozar. Acostumbrados a ver la reina con estilismos más discretos, ver lo bien que le sentaba ese tono rojo intenso ocasionó una lluvia de titulares y elogios similar a la que hoy aclama la elección de su hija mayor.
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📱 A yearly tradition @ Belgium’s National Day: Prince Laurent is distracted by his phone.
— [Wim Dehandschutter] (@WDehandschutter) July 21, 2022
📵 In the past, King Philippe’s brother has come under fire for taking an inappropriately timed phone call in the middle of the parade.
📳 Today, he played a few times on his phone. pic.twitter.com/Tjk9NLD2jp
Uno de los momentos más comentados en los medios y también en las redes sociales ha sido el que protagonizó el hermano del rey Felipe. Este 2022 se ha vuelto a repetir la imagen del príncipe cogiendo el móvil en pleno acto y guardándolo después de unos segundos como si los objetivos de las cámaras no fueran a capturar este inoportuno gesto. El año pasado ya lo hizo y le costó las miradas incrédulas de los reyes, pero esta vez no vemos ningún gesto en señal de reprimenda para él. Sin embargo, esto no es todo, pues Laurent también ha sido fotografiado con los ojos cerrados en múltiples imágenes del desfile como si dormitara.
En clave más positiva, los rumores de crisis que afloraron el año pasado por la ausencia -sin justificación oficial- de la esposa del príncipe Laurent quedan olvidados. En esta Fiesta Nacional hemos visto a Claire muy contenta, sonriendo en todo momento y compartiendo risas con la princesa Delphine de Bélgica.
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El Día Nacional de Bélgica es una fecha importante para la hija ilegítima del rey Alberto II, pues un día como hoy hace 12 meses fue su gran debut como princesa. Después de que el emérito reconociera en enero de 2020 a Delphine como hija biológica, la artista (conocida antes por su apellido Boël) comenzó a formar parte de la familia real. Desde entonces su vida no ha estado exenta de primeras veces, como en febrero de este año, cuando participó en un compromiso por primera vez con su padre y la reina Paola.
Tratándose este de su segundo desfile por el Día Nacional de su país, no nos extraña que la escultora haya optado por acudir con un look poderoso y con un mensaje (no tan) oculto. El periodista Wim Dehandschutter fue invitado por la princesa antes del desfile para conocer en exclusiva su look de hoy y le explicó con lujo de detalles el significado de su estilismo. "Quería un vestido que tuviera un mensaje sobre esperanza y paz. El rojo simboliza la acción de seguir adelante en días difíciles y la paloma blanca es un símbolo de paz", rezan las palabras del comunicador en Twitter.
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La gran Fiesta Nacional de Bélgica de este año ha estado marcada por varias anécdotas, pero es probable que todos coincidan en que los estilismos de la realeza han robado el protagonismo del desfile militar. Aunque no nos extrañaría que el año que viene haya otro incidente con un móvil, no cabe duda de que el estilo de la familia real belga trasciende ante cualquier infortunio.
Cada 21 de julio, la familia real belga se reúne para celebrar la Fiesta Nacional del país. Una importante cita que, como cada año, ha arrancado con un Te Deum en la catedral de Santa Gúdula de Bruselas. Precisamente en esta primera parada antes del desfile militar pudimos ver al rey Felipe y Matilde de Bélgica posando, visiblemente felices, junto a sus cuatro hijos, Elisabeth -que fue la protagonista absoluta con un precioso vestido rojo-, Gabriel, Emmanuel y Eléonore. Sin embargo, además del estilismo de la princesa heredera también ha habido otros detalles que no han pasado desapercibidos.