El importante papel de George y Charlotte en el funeral de su bisabuela
Los hijos mayores de los príncipes de Gales han seguido el féretro de Isabel II en el funeral de Estado de su bisabuela junto a sus padres y el resto de los Windsor
George y Charlotte ya son suficientemente mayores para acudir al funeral de su bisabuela, Isabel II, según sus padres, los nuevos príncipes de Gales. Por esta razón, hemos podido verles en la abadía de Westminster esta mañana de lunes, 19 de septiembre, sin la compañía de su hermano, Louis, que a sus tan solo 4 años es demasiado pequeño como para un evento de esta envergadura y solemnidad.
Los dos bisnietos de la reina Isabel han viajado en coche junto a su madre, Kate Middleton, y la nueva reina consorte, Camila. Los hermanos, que son el segundo y tercero en la línea de sucesión al trono británico, han acompañado a su padre, el príncipe Guillermo, a su abuelo, el rey Carlos, y a su tío, el príncipe Harry, en este día histórico para el Reino Unido.
Kate llegaba de la mano de su hija Charlotte, de 7 años, que al igual que su madre iba vestida de riguroso luto con un sombrero. La niña ha lucido un broche de herradura en el pecho que ha llamado la atención por la sobriedad de su atuendo. Por su parte, el príncipe George, a sus 9 años, ha optado por un traje de chaqueta azul marino, con corbata de color negro. Su madre no se ha separado de ellos en este día histórico en el que tanto la princesa de Gales como su marido han considerado que los pequeños ya son suficientemente maduros como para acompañar al féretro de su bisabuela junto al resto de la familia.
Los hijos de Guillermo y Kate ya estuvieron previamente en el funeral de su bisabuelo, Felipe de Edimburgo, el año pasado y en aquella ocasión ya tuvieron un papel absolutamente ejemplar para despedir al que ellos llamaban Gan-Gan. Un homenaje que también se produjo en la misma abadía de Westminster a la que han acudido hoy, con semblante serio y acompañados de sus padres. En esta ocasión, se trata de un funeral de Estado, el primero desde la muerte de Winston Churchill, que acontecía en enero de 1965, y los niños han tenido un papel importante, pues han seguido el féretro de la monarca británica junto al resto de su familia, encabezada por el nuevo rey, Carlos III, y su esposa, Camila. Lo han hecho junto a sus padres. Su padre, Guillermo, ha llegado a pie a la abadía previamente al igual que el rey Carlos y el príncipe Harry.
Kate ha querido hacer un homenaje a la abuela de su marido y ha utilizado una gargantilla de perlas de tres hilos y unos pendientes colgantes que son parte de la colección personal de joyas de la reina. George y Charlotte han seguido atentos el funeral, que ha sido encabezado por el decano de Westminster, David Hoyle, y cuyo sermón es pronunciado por el arzobispo de Canterbury. Ambos han cantado de pie junto a sus padres, leyendo la letra como ellos y el resto de los presentes. El príncipe George se encontraba entre sus padres, mientras que la princesa Charlotte estaba a la izquierda de su madre.
Primero ha sido la primera ministra británica, Liz Truss, la que ha dedicado unas palabras en este funeral, para pasar después el arzobispo de Canterbury a dar el sermón, durante el cual hemos visto ya sentados a los jóvenes príncipes junto a sus padres en la primera fila de bancos del lado derecho de la abadía de Westminter. En un momento dado, el príncipe George miraba a su abuelo, que se hallaba en la primera fila del lado izquierdo de la bancada de la abadía.
Tras el sermón, la princesa Charlotte se acercaba al oído de su madre, discretamente, para comentarle algo, a lo que su madre le respondía. En la primera fila junto al rey Carlos y Camila se encontraban también la princesa Ana y su marido, además de los condes de Wessex. Detrás del rey Carlos se encontraba su hijo, el príncipe Harry, en segundo fila junto a su mujer, Meghan Markle, que están sentados junto a la princesa Beatriz de York y su esposo, Edoardo Mapelli, además de lady Louise y su hermano Jacobo, vizconde Severn.
Tras los príncipes de Gales, George y Charlotte están la princesa Eugenia y su marido, Jack Brooksbank. La noticia de que los hijos mayores de los príncipes de Gales acudirían al funeral se confirmaba este mismo domingo, una decisión familiar que ha sido colectiva debido a que es una ocasión trascendental para la familia Windsor.
Este lunes se han dado varias imágenes históricas, debido a que ha sido un encuentro que ha unido a los Gales con los duques de Sussex, que el pasado junio no posaban para ninguna instantánea con motivo del Jubileo de Platino de Isabel II. No ha ocurrido este lunes, cuando hemos podido ver a los Sussex caminando junto al resto de su familia en el funeral de la longeva monarca británica. Además, Meghan Markle se ha situado cerca de su cuñada, Kate Middleton, en un momento antes de comenzar la ceremonia y también ha compartido espacio con sus sobrinos, George y Charlotte, de los que se encuentra muy distanciada desde el Megxit.
De hecho, en junio, los que fueran los duques de Cambridge ni siquiera acudieron al primer cumpleaños de Lilibet, la hija pequeña de Harry y Meghan, y tampoco sus primos, George, Charlotte y Louis. Sí felicitaron públicamente Guillermo a Kate a la pequeña en sus redes sociales, pero no compartieron espacio. Algo que sí pudo hacer la reina Isabel II antes de fallecer, conocer a su pequeña bisnieta, la número 12.
No ha sido la única imágen insólita de este lunes, pues frente a la familia real británcia se han sentado miembros de la realeza de todos los países europeos y muchos del mundo asiático y árabe. En segunda fila podíamos una imagen para el recuerdo, los reyes Felipe y Letizia se sentaban junto a los eméritos en una imagen que hacía más de dos años que no se daba.
Tras el funeral, a las 12:56 horas, aproximadamente, se han dado dos minutos de silencio en honor a Isabel II, que George y Charlotte han respetado a la perfección, de pie junto a sus padres. Con estos dos minutos de silencio que se han roto con el sonido de unas cornetas, Reino Unido ha querido homenajear a la monarca que ha reinado durante 70 años.
George y Charlotte ya son suficientemente mayores para acudir al funeral de su bisabuela, Isabel II, según sus padres, los nuevos príncipes de Gales. Por esta razón, hemos podido verles en la abadía de Westminster esta mañana de lunes, 19 de septiembre, sin la compañía de su hermano, Louis, que a sus tan solo 4 años es demasiado pequeño como para un evento de esta envergadura y solemnidad.