La mudanza de Magdalena de Suecia se retrasa aún más: no consigue vender su casa de Florida

Justo hace un año, la Casa Real sueca anunciaba con alegría una gran noticia: la princesa Magdalena iba a regresar a casa. La Corona infomó de que la benjamina de los reyes había decidido dejar Florida e instalarse junto a su marido y sus tres hijos, Leonore, Nicolas y Adrienne, en Estocolmo. Sin embargo, doce meses después, esa mudanza no se ha producido todavía, y aunque hay varios motivos, el principal es que Magdalena y Chris no consiguen vender la mansión que tienen en Miami.

Por ese motivo, la pareja se ha visto obligada a bajar el precio en varias ocasiones, pero sin éxito. Parece que no hay ningún comprador interesado en la casa de seis dormitorios que la princesa y su marido adquirieron en 2018, cuando decidieron dejar Suecia e instalarse de forma definitiva en la soleada Florida. Les costó en su momento 30 millones de coronas suecas, unos 2,6 millones de euros, y a ese precio hay que añadirle el dinero que se gastaron para reformarla a su gusto.

Chris y Magdalena pusieron la casa a la venta por 79 millones de coronas suecas, que al cambio son casi 7 millones de euros. Mucho más que el doble por el que la habían comprado, aunque ese incremento se justificaba, según ellos, en las obras de mejora que habían llevado a cabo. A las dos semanas ya bajaron un poco el precio, a 77 millones de coronas, 6,7 millones de euros. Y así ha estado a la venta durante estos meses, sin que nadie se haya decidido a hacer una buena oferta.

Eso ha obligado a la pareja real a tener que tomar cartas en el asunto, dejando el coste a 72,2 millones de coronas suecas, 6,2 millones de euros. Sin embargo, ni rebajando casi 800.000 euros la princesa y el empresario han conseguido deshacerse de la casa, de ahí que, de momento, su mudanza a Suecia siga en 'stand by'. Según cuenta 'Svensk Dam', desde varias inmobiliarias les han recomendado que rebajen el precio, al considerarlo muy alto, pero ellos se niegan, así que tendrán que esperar.

Y, mientras llega ese momento, Magdalena ya le ha echado el ojo a una casa en Suecia. Se trata de una vivienda de ensueño compuesta por doce habitaciones, ubicada en una idílica zona a solo 9 kilómetros del centro de Estocolmo. Su nombre es Villa Loviseberg y tiene mucha historia. Edificada en 1860 en el parque del palacio real de Ulriksdal y decorada con un llamativo color amarillo, fue el hogar de los amigos íntimos de los reyes suecos Hans Eric y Eva Benita Brodin, que vivieron allí durante más de 40 años, hasta que decidieron venderla en 2021.

El comprador fue la Junta Nacional de la Propiedad de Suecia, que pagó 59 millones de coronas suecas (5,2 millones de euros) por esta casa muy bien conservada, con todos sus detalles originales y que incluye una pista de tenis, establos, casa para invitados y garaje para tres coches.

El hecho de que la residencia sea ahora propiedad estatal sería otro punto que facilitaría la mudanza de la princesa Magdalena. Según informa el citado medio sueco, es el monarca Carlos XVI Gustavo el que tiene el derecho de decidir quién puede instalarse ahí, y según confirman "varias fuentes", sus nuevos inquilinos ya están asignados. Aunque previamente había planes para otro huésped ilustre.