Muere Andrés Sardá, el diseñador español que fue el gran genio de la lencería

Si en España la lencería de mujer tiene un nombre propio, ese es el de Andrés Sardá y el imperio que el genial diseñador tuvo a bien levantar con la firma que se llama como él. Por eso, la noticia de su fallecimiento deja al sector de la ropa interior femenina de nuestro país huérfano de padre. Andrés Sardá murió ayer en Barcelona a los 90 años de edad y tras una vida dedicada a la moda de lencería para la mujer.

De casta le viene al galgo, porque el diseñador Andrés Sardá provenía de una familia pudiente catalana que desde sus orígenes se dedicaba a este bonito oficio de la moda, pero bien es cierto que lo que hizo él, Sardá, por el sector de la lencería en nuestro país fue una auténtica revolución sin precedentes, un hecho que le catapultó al estrellato fashionista y le otorgó un nombre propio, el de la mujer sexy, sugerente y sensual vestida en ropa interior.

Año tras año, década a década y con mucho mucho trabajo a sus espaldas, Andrés Sardá consiguió que la lencería de mujer 'made in Spain' se asociara directamente con él y con la firma que con tanto cariño y tesón había levantado. Una empresa fundada en 1962 que, gracias al buen hacer de sus trabajadores, a los impecables diseños y a la creatividad de una mente visionaria como la de Andrés Sardá, se convirtió con el tiempo en el sinónimo de la lencería con mayúsculas.

Sus desfiles han sido, son y serán de los acontecimientos más importantes de la moda española, no solo por las atrevidas y sensuales colecciones con la mujer ataviada con ropa interior como la única y gran protagonista, también por dos razones más. Una, la cantidad de celebs que se agolpaban (y lo siguen haciendo) en el front row. Y dos, porque además de lencería, los desfiles de Andrés Sardá se caracterizan por ser un auténtico espectáculo para los cinco sentidos.

Hoy la moda pierde a uno de sus grandes, aunque su marca queda a buen recaudo. Recordemos que desde 1995 es su hija, Nuria Sardá, quien dirige la empresa familiar y diseña todas las colecciones de la firma que creó su padre. Él, Andrés Sardá, fue el precursor de la revolución de la lencería en nuestro país, y eso es un título que siempre acompaña al genial y gran diseñador catalán, el mago que ha sabido vestir con fantasía, feminidad, sensualidad y elegancia el interior de la mujer.