¿Cómo parecer una auténtica top model de los años 90? Robándole los relojes a tu madre

En los años 90, cuando aún no se hacían selfis porque el móvil más usado era el indestructible Nokia (que no incorporaría la cámara hasta el año 2002), la moda se basaba en la simplicidad y comodidad. Nada que ver con el ostentoso estilo de los años 80, en los que las hombreras y los colores flúor marcaban tendencia.

Al mismo tiempo, sobre la pasarela relojera desfilaron los modelos más emblemáticos de la relojería hecha para mujeres. Al margen del tradicional oro en todas sus formas, apareció una combinación ganadora, sencilla, elegante y muy ponible que aún sigue de moda: acero y diamantes.

Estos seis relojes te harán entender por qué vas a quererle pedir prestado el reloj a tu madre, como ya habías hecho con sus bolsos o trenchs. Además de levantar cualquier look, te harán sentir como las top models de aquellos años.

Panthère, de Cartier

Creado en 1983, este modelo debe su nombre al brazalete de estructura ultraflexible que evoca los movimientos de una pantera, animal emblemático de la casa. Tema fetiche del bestiario Cartier, la pantera ha originado infinidad de versiones tanto de joyas como de relojes, por no mencionar los bolsos, pañuelos, cinturones, gafas o perfume.

El reloj Panthère volvió en 2017 como el básico de toda amante de la relojería de lujo. Y lo hizo con una fiesta en Los Ángeles en la que se dieron cita rostros tan conocidos como Sienna Miller o Dakota Johnson. Y es que son legión las embajadoras y fans de la marca parisina. Entre ellas se encuentran la bailarina y coreógrafa Blanca Li, Jill Biden (suele llevar a menudo su Panthère en oro amarillo), Rihanna, Sofia Coppola, Dua Lipa, Bella Hadid, Zendaya o Chiara Ferragni, por no hacer eterna la lista. Precio: 27.000 euros.

Zarpazos distinguidos

Happy Sport, de Chopard

Presentado en 1993, fue el primer reloj que mezcló el acero con los diamantes. Encarna la alegría de vivir y el espíritu libre en el que se inspiran las mujeres contemporáneas, convirtiéndose en un icono de la moda y de la relojería. Ha mantenido la fascinante coreografía de sus diamantes móviles en la esfera gracias a una multitud de versiones que han ido seduciendo a todas las generaciones. Y es que se lleva igual de bien con vaqueros y zapatillas que con un vestido de fiesta y zapatos de tacón.

Su embajadora es nada menos que Julia Roberts, protagonista de la nueva campaña de espíritu feel-good —firmada por el cineasta James Gray y el fotógrafo Alasdair McLellan— lanzada el pasado 20 de marzo, Día Internacional de la Felicidad.

Y es que Julia Roberts, además de tener la sonrisa más escandalosamente bonita del cine, es imagen de las colecciones Happy Sport y Happy Diamonds desde 2021, y a partir de este mes, de todos los relojes y joyas de la casa: lo que viene siendo toda una embajadora mundial. Precio: 25.300 euros.

Lo que es bueno para Julia…

Ladybird, de Blancpain

Berthe-Marie Fiechter, conocida como Betty, fue la primera mujer propietaria y CEO de una compañía relojera suiza en 1933. Contra viento y marea, esta visionaria en un mundo exclusivamente masculino impulsó a Blancpain hasta la cumbre de la alta relojería.

Ella estuvo detrás del lanzamiento de relojes pioneros que siguen siendo iconos en nuestro siglo, como el Fifty Fathoms, el primer reloj de buceo moderno.

También fue la artífice del éxito del reloj femenino Ladybird (1956) —provisto del movimiento redondo más pequeño del mundo (11,85 mm de diámetro)—. Y del reloj de noche de estilo art déco favorito de Marilyn Monroe —rememorado ahora en el biopic 'Blonde’, protagonizado por Ana de Armas—.

Betty Fiechter marcó el exquisito nivel estético y la mecánica de los relojes femeninos de Blancpain, de lo cual nos hemos beneficiado generaciones de mujeres amantes de los relojes mecánicos. Precio: 26.650 euros.

Tú eres un icono

Twenty~4, de Patek Philippe

Lanzada en 1999, Twenty~4 es la primera colección diseñada exclusivamente para mujeres de Patek Philippe. Su nombre indica su vocación de acompañar a cualquier hora del día a las mujeres modernas e independientes que quieren llevar un reloj elegante y de calidad en su muñeca. Se distinguió por mezclar el acero con los diamantes, lo cual no era muy habitual en aquellos años.

El primer modelo Twenty~4 de inspiración art déco, que se presentó bajo la forma de un diseño de tipo manchette, se volvió a retomar en 2018, cuando la firma decidió enriquecer la colección con una nueva versión mecánica —el original era de cuarzo, es decir, de pila— dotada por primera vez de una caja redonda. Como su predecesor, el nuevo reloj ha sido creado para llevar con vaqueros, con un little black dress o incluso con un traje de gala. Precio: consultar punto de venta.

Twenty something

Constellation, de Omega

Esta colección, que hace referencia a las estrellas que cada noche se prenden del cielo para que pidas un deseo, es tan pródiga como fascinante. Desde su nacimiento, en 1952, esta familia está simbolizada por el medallón con la imagen de un observatorio bajo un cielo con ocho estrellas grabado en el fondo de la caja de algunos modelos. Los ocho astros representan los logros de Omega en materia de precisión, porque para que un reloj mecánico de esta casa se convierta en Master Chronometer debe ofrecer las máximas prestaciones en precisión, rendimiento y resistencia al magnetismo.

Desde su lanzamiento se ha diversificado en tantos modelos que casi resulta imposible seguirles la pista. En este siglo se han lanzado más de cien. Y es que Omega siempre se ha empleado a fondo en la relojería para mujeres.

Cuenta con la primera embajadora de marca de relojes de la historia, Cindy Crawford, fiel desde 1995 —como ella misma dice: “Llevo lleva tiempo en Omega que casada”—, a quien ahora acompaña su hija Kaia Gerber, imagen del Constellation Master Chronometer 29 mm de oro.

La nueva hornada de embajadoras de Omega es explosiva: las actrices Nicole Kidman, Zoë Kravitz, So-hee Han y Dongyu Zhou, la modelo Kiko Mizuhara y la legendaria atleta Allyson Felix. Precio: 8.500 euros.

Tendrás las estrellas

Dolce Vita, de Longines

Desde su lanzamiento en 1997, el Dolce Vita ha sabido transmitir el mensaje de elegancia atemporal de la casa por todo el mundo, especialmente desde 2010 a través de su embajadora y oscarizada actriz Kate Winslet.

Aunque el modelo original estaba realizado completamente en acero y presentaba una límpida esfera blanca, los nuevos modelos son monocromáticos, en perfecta sintonía con las tendencias. Las dimensiones de las cajas rectangulares de los nuevos modelos (23,30 mm x 37,00 mm) aportan una gran comodidad para llevarlos a todas horas. Existen decenas de modelos diferentes y numerosas opciones de personalización. Precio: 1.550 euros.

Superpersonalización

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