La nueva vida de Arantxa Sánchez Vicario: pelirroja y feliz en el anonimato de Miami

Con dos procedimientos judiciales abiertos, Arantxa Sánchez Vicario trata de llevar una vida tranquila y ‘normal’ dentro de lo posible. Y dice a sus allegados que al menos para sus hijos lo ha logrado. Hace unos días se reunió en una productora de Miami con unos colegas y les contó que se sentía feliz por ver a sus pequeños disfrutar de la vida. “En Miami puede mantener una vida anónima, la prensa no la acosa y eso la deja tranquila”, nos cuentan, “además está feliz de ver a sus hijos felices”.

La excampeona, ahora profesora de tenis y comentarista de varios programas y citas deportivas internacionales, ha querido dejar atrás su pasado y lo ha hecho también con su imagen. Desde hace unos días, Sánchez Vicario es pelirroja.

Con su nuevo color de pelo alegre que rompe con la imagen de niña bien que ha trasmitido desde bien joven. Adiós a las mechas y a la melena con balayage a la que nos tenía acostumbrados. Con unos zapatos de tacón y un vestido corto y ajustado, la tenista posaba sonriente con sus amigos, a quienes les confesó su buen ánimo.

La estrategia de Arantxa Sánchez Vicario para evitar su entrada en prisión

Silvia Taulés J. M.

Mientras, tanto su proceso de divorcio de Josep Santacana como la querella que presentó el Banco de Luxemburgo contra la expareja siguen su curso. Con todo, desde el pasado mes de julio no hay ni un registro nuevo en el proceso de divorcio de los Santacana Sánchez Vicario. El proceso, intenso en el principio, parece estancado tras haber sido redirigido a Miami como siempre pidió Sánchez Vicario, quien espera poder lograr que su exmarido declare ante el juez su patrimonio americano.

Divorcio sin resolver

El pasado mes de marzo, la Audiencia Provincial de Barcelona dio la razón a la tenista para tramitar su divorcio en Miami, tal como confirmó su abogado, Ramón Tamborero. Fue el 17 de marzo cuando los magistrados se reunieron para deliberar el recurso interpuesto por la tenista, que pedía que el divorcio se tramitara en Estados Unidos y no en España, como había pedido su exmarido.

Día clave para el divorcio de Josep Santacana y Arantxa Sánchez Vicario

Paloma Barrientos

Los jueces debían decidir si era correcto que el divorcio de la expareja se tramitara en España como pedía el empresario, algo que había confirmado el juez de Primera Instancia de Esplugues. Y le dieron la razón a ella tras largos meses de silencio.

La sentencia de la Audiencia fue clara y así la resumía Tamborero: ”La sentencia confirma que Estados Unidos es competente para dirimir el divorcio de mi cliente y el señor Santacana. Hemos tenido la confirmación de la deliberación de los tres magistrados de la Audiencia”. La defensa de Santacana apeló la decisión y no se ha movido nada por el momento, según hemos podido corroborar.

La difícil conciliación de Arantxa Sánchez Vicario, en Miami y a la espera del divorcio

Silvia Taulés

No hay que olvidar, además, que a este proceso judicial se suma otro, de mayor calado para el futuro de Arantxa, que es la querella del Banco de Luxemburgo, entidad que pide incluso una pena de cárcel para ella.

Bajo la petición de prisión

Todavía debe fijarse fecha para el juicio, algo que debería suceder en breve. Uno de los últimos pasos necesarios era que se presentara el escrito de la Fiscalía, algo que sucedió en el pasado mes de julio y se hizo con graves palabras hacia la tenista. La acusaron a ella y a su exmarido de un supuesto delito de alzamiento de bienes por el que piden cuatro años de prisión para ambos, además de indemnizaciones millonarias.

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Según el escrito del Ministerio Fiscal, mientras Arantxa acusaba a sus padres de haberla dejado en la ruina, ella y su entonces pareja estaban en un proceso de venta de todo su patrimonio, una bolsa ingente y millonaria de viviendas, plazas de aparcamiento, terrenos, locales y trasteros, para evitar pagar su deuda con el Banco de Luxemburgo, entidad que les había avalado para saldar su deuda con Hacienda. El supuesto proceso de despatrimonialización es enrevesado y sorprendente. Sobre todo si tenemos en cuenta las lágrimas desesperadas de la tenista ante la prensa.

"Sin nada"

“Me han dejado sin nada, estoy endeudada con Hacienda y mis propiedades son muy inferiores a las que tiene, por ejemplo, mi hermano Javier, que a lo largo de su vida ha ganado mucho menos que yo”. Arantxa pronunció estas palabras en 2012 frente a decenas de periodistas a los que ella misma había convocado. En aquellas fechas se convirtió en portada de todos los medios del país cuando acusó a sus padres de haberla arruinado. Aquella niña de sus papás, siempre sonriente y familiar, aparecía ante los medios arropada por su entonces marido, José Santacana, entre lágrimas.

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De todo eso quiere olvidarse la tenista, tanto de su pasado como de sus procedimientos presentes. Y cambiar su imagen es un paso, pequeño pero importante para ella, para mirar hacia adelante con precisión. Como cuando lidiaba con sus rivales en la cancha de tenis.