El bautizo de Ana Sandra, hija de Aless Lequio: Ana Obregón, feliz y arropada por los suyos

Ha llegado el gran día para Ana Obregón y su nieta, hija de Aless Lequio, la pequeña Ana Sandra.

Este domingo 17 de diciembre se ha llevado a cabo el bautizo de la niña en La Moraleja, tal y como confirmó la propia Obregón a Vanitatis, así como otras fuentes familiares.

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Noelia Zazo

Muy emocionada se ha mostrado la presentadora al llegar a la iglesia Nuestra Señora de Alcobendas (Madrid) en este día tan señalado. En el mismo lugar donde Ana daba su último adiós a su hijo, hoy se mostraba feliz por el inicio de la vida de su querida y deseada nieta. Ana Sandra le ha devuelto las ganas de sonreír y de vivir tras sufrir la triste pérdida de Aless y en este evento tan señalado, el hijo de la presentadora ha estado muy presente en el corazón de todos, ya que es el padre biológico de la pequeña, que fue concebida por gestación subrogada y que nació el pasado 20 de marzo.

Para una ocasión tan especial, como es el primer gran evento en el que la protagonista es su nieta, Ana no ha querido arriesgar y se ha decantado por un diseño exclusivo del alicantino Rubén Hernández, el mismo que la vistió en otros momentos importantes para ella como fueron las campanadas o la presentación de su libro. Es, por tanto, su diseñador de confianza y quien conoce a la perfección el estilo de la bióloga y lo que mejor le sienta.

El estilismo de Obregón, un total look en color rosa, ha estado compuesto por una falda midi plisada en crepé combinada con una chaqueta entallada de tweed y unos zapatos destalonados con tacón ancho.

La pequeña Ana Sandra ha sido vestida con el mismo faldón que lució su padre, Aless Lequio, con tres meses de vida, un precioso detalle que ha enfatizado la presencia del joven fallecido el 13 de mayo de 2020 en el recuerdo de todos los presentes.

El papel de padrino y madrina en la ceremonia lo han llevado a cabo dos personas muy cercanas a Aless Lequio: un chico llamado Giacomo, que conocía al hijo de Ana Obregón y Alessandro Lequio desde los 4 años, y Celia Vega-Penichet, sobrina de la presentadora y prima de Aless Lequio, al que estaba muy unida y al que consideraba casi como un hermano. Celia ha llegado al templo enfundada en un abrigo negro que dejaba asomar una falda midi en tono azul marino y que ha combinado con unas botas negras de caña alta y un bolso naranja.

Ana Obregón ha vivido con emoción esta jornada en la que ha estado rodeada de familiares y amigos, entre ellos sus inseparables Susana Uribarri y Raúl Castillo (a quien Ana llama cariñosamente Ra). Susana ha lucido una camisa negra combinada con pantalón del mismo color, una chaqueta en tono bronce y un abrigo negro. Destacaba el gran colgante dorado de Chanel de su collar.

Tras la misa, unas veinticinco o treinta personas han sido convocadas a una merienda en casa de Ana Obregón, en La Moraleja. A esta reunión han acudido las hermanas y los hermanos de la presentadora con sus respectivas parejas y los hijos de todos ellos, es decir, los sobrinos de Ana, acompañados también por sus parejas.

A la merienda tampoco han faltado Susana Uribarri y Raúl Castillo, siempre al lado de la presentadora en los buenos y en los malos momentos.

El gran ausente ha sido Alessandro Lequio. Tanto él como su esposa María habían sido invitados por Ana Obregón tanto a la misa como a la posterior merienda. No se esperaba que acudieran, pero, por parte de Ana, ambos tenían las puertas de la iglesia y de su casa abiertas.