La actriz Mónica Estarreado pone su intimidad en manos del abogado de Mourinho

Mónica Estarreado comenzó hace años una gran guerra contra el Grupo Hearst. La actriz de Hospital Central interpuso varias demandas contra la revista ¡Qué me dices! por la publicación de varios artículos y el “acoso constante” al que está sometida. Para defenderse de todo ha contratado a Manuel Matamoros, el abogado de José Mourinho, que ahora lleva al Tribunal Constitucional el caso de la actriz por lo que consideran una vulneración del derecho a la intimidad.

Los hechos se remontan hasta 2006, cuando la popularidad de la actriz sube como la espuma al protagonizar la serie de televisión Yo soy Bea. A partir de ese momento era bastante normal ver a Estarreado en las portadas de las revistas. La gota que colmó la paciencia de la intérprete fue el que el día de su boda aparecieran los fotógrafos en Marruecos para sacar imágenes de un enlace que se había mantenido hasta la fecha en secreto. Es entonces cuando la actriz comienza una batalla personal contra la revista ¡Qué me dices! y su director por entonces, Javier Huerta Parrondo.

Estarreado ya ha presentado más de cinco demandas que fueron atendidas en el Juzgado de Primera Instancia Número 5 de Móstoles. Se ganaron la mayoría, reconociendo que había una intromisión ilegítima en la intimidad personal de la actriz y su marido, sin proyección pública, y se les iba a indemnizar a cada uno de ellos con 12.000 euros. La Audiencia Provincial de Madrid desestimó el recurso presentado por la revista. Los problemas para Estarreado han llegado en el Supremo, cuando la Sala de lo Civil ha revocado la decisión. En estos momentos, el abogado de la actriz ha solicitado el amparo al Constitucional denunciando que la revista “había vulnerado el derecho de la intimidad personal de los representados”.

Entre los ejemplos que pone Mónica Estarreado para hablar de acoso se habla de fotografías publicadas que recogen el momento en el que la actriz y su pareja pasean “con su perro, por un parque, agarrados de la mano e intercambiando caricias y besos en un momento dado. También recoge el momento en el que, tras abandonar el Aeropuerto, Mónica sufre una avería en un vehículo particular. Lo que muestra que la persecución por parte de los reporteros es constante”. Así figura en el recurso al que ha tenido acceso Vanitatis.

Según cuenta Manuel Matamoros, abogado de la actriz, a Vanitatis, se ha intentado llegar a un acuerdo con la revista. Sin embargo, “la única condición era hablar directamente con los directivos. No hay forma de sentarse con ellos”, dice el abogado, por lo que el proceso sigue sus cauces legales. "No queremos un acuerdo económico, sino de compromiso”. De momento, el Constitucional ha admitido dos recursos a trámite y se espera que admita un tercero. “La revista ha tenido una insistencia perturbadora con Mónica”, dice Matamoros.