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El despliegue policial para recuperar al perro del amigo íntimo de Mohamed VI
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El despliegue policial para recuperar al perro del amigo íntimo de Mohamed VI

La policía científica y la unidad canina peinaron la ciudad de Salé, junto a Rabat, para encontrar al can del boxeador Abu Azaitar

Foto: Mohamed VI. (Getty)
Mohamed VI. (Getty)

Los marroquíes que paseaban o disfrutaban de la puesta de sol sentados en los cafés del puerto deportivo de Salé, la ciudad pegada a Rabat, se vieron sorprendidos, el fin de semana, por un repentino despliegue policial.

Allí irrumpieron al atardecer decenas de agentes de la policía científica de la unidad canina mientras otros pedían revisar las cintas grabadas por las cámaras del puerto. Algo grave debía de haber sucedido, pensaron los transeúntes, a los que también los uniformados hicieron algunas preguntas.

Entonces comprendieron que los policías buscaban a un perro desaparecido. No se trataba, como algunos creyeron, de un can rabioso al que había que capturar. La mascota pertenecía a Abu Azaitar, un campeón de artes marciales mixtas (MMA), que lo había perdido cuando corría por el puerto deportivo.

placeholder Un meme de Abu Bakr Azaitar y su perro que circula en las redes sociales. (RRSS)
Un meme de Abu Bakr Azaitar y su perro que circula en las redes sociales. (RRSS)

Las intensas pesquisas policiales dieron resultado. Al cabo de un par de horas localizaron al perro, cuya raza se desconoce, en una chabola de un viejo barrio de Salé. Los agentes detuvieron al presunto ladrón, un joven parado, al que trasladaron a comisaría, según el diario 'As Sabah' de Casablanca, que reveló los motivos de la operación policial.

Los padres y los vecinos del detenido declararon a la prensa que el chaval no había robado al can, sino que el animal le siguió cuando tras pasear por el puerto deportivo regresó a pie a su casucha. La hipótesis del robo es poco probable porque el perro no es considerado en Marruecos como un animal comestible y para una familia humilde es una boca más que alimentar. En las sociedades musulmanas los perros son, además, considerados con frecuencia como animales impuros y no de compañía.

[Bajo estas líneas vemos un vídeo en el que los padres del presunto ladrón defienden su inocencia]

La noticia de la operación para recuperar a la mascota figura en gran parte de la prensa digital de Marruecos a veces con titulares asépticos y otras dando cuenta, con cierta retranca, de la importancia y de la urgencia de la movilización policial. 'El robo del perro de Abu Azaitar priva a las fuerzas de seguridad de Rabat de su fin de semana', tituló, por ejemplo, 'Al Hayat', un diario en árabe publicado en Londres.

La amistad con Mohamed

Los diarios no explican, sin embargo, que el despliegue policial para rescatar al perro no es probablemente achacable a los triunfos deportivos acumulados por Abu Azaitar, sino a su cercanía con el rey Mohamed VI, al que le une una gran amistad desde abril de 2018. Fue entonces cuando, junto con sus dos hermanos, Omar y Othman, conoció en Rabat al monarca alauí. Desde entonces, los cuatro se han convertido en inseparables hasta el punto de pasar juntos sus vacaciones en las islas Seychelles, en Rincón (norte de Marruecos) o a bordo del yate Al Lusial, que el emir de Catar prestó el 2018 al soberano marroquí.

placeholder Los hermanos Azaitar, en La Meca. (RRSS)
Los hermanos Azaitar, en La Meca. (RRSS)

Mustafa Alaoui, que dirigió el semanario 'Al Ousboue', escribió en noviembre pasado: “Esta presencia (de los hermanos) rebasa hoy en día la mera amistad porque Abu Azaitar acompaña a Mohamed VI en muchos de sus desplazamientos a través del país y las puertas de los palacios reales están cada vez más abiertas, a él y a sus hermanos, hasta el punto de que algunas fuentes empiezan a especular sobre su nombramiento como guardaespaldas del soberano (…)”.

En las redes sociales sí se insiste en esa cercanía sobre la que la prensa pasa de puntillas. Abu Azaitar es “más conocido localmente por su estrecha relación con el rey Mohamed VI”, escribió, por ejemplo, el periodista Soukhail Karam este lunes en Twitter. Esa relación explica el empeño policial en dar cuanto antes con el can perdido. En esa y en otras redes abundan también los comentarios comparando la diligencia de las fuerzas de seguridad en este caso concreto con su ineficacia a la hora de investigar otros robos o de rescatar a marroquíes aislados por la nieve en el Alto Atlas.

¿Trato de favor?

No es la primera vez que esa estrecha amistad con el monarca depara a Abu Azaitar un trato de favor. La prensa marroquí publicó en enero fotos de su lujoso vehículo aparcado delante de la comisaría de la célebre plaza Jemaa el Fnaa de Marrakech, un lugar donde nadie puede estacionar. El boxeador increpó a un periodista que tomaba fotos, le arrebató su móvil y borró las imágenes.

placeholder El boxeador conocido como Gladiator y Mohamed VI. (Instagram)
El boxeador conocido como Gladiator y Mohamed VI. (Instagram)

Él mismo Abu Azaitar subió la semana pasada a Instagram fotos de su peregrinación a La Meca junto con su hermano Omar. Las instantáneas ponen de relieve que las autoridades de Arabia Saudí le otorgaron un trato privilegiado “como si fuese un rey o una destacada figura política”, según el diario digital 'Akhbarona'. No solo le acompañaron en la ciudad santa agentes de las fuerzas de seguridad saudíes, sino que le permitieron acceder a la Piedra Negra, o la Piedra del Paraíso, un privilegio del que gozan muy pocos peregrinos.

Aunque los medios de comunicación marroquíes no se atreven a analizar las consecuencias de la relación entre el rey y los Azaitar, esta es con frecuencia comentada por las élites de Marruecos. Su proximidad al monarca y las prerrogativas de las que disfrutan suscitan un cierto malestar que solo se manifiesta, a veces, en las redes sociales.

Los marroquíes que paseaban o disfrutaban de la puesta de sol sentados en los cafés del puerto deportivo de Salé, la ciudad pegada a Rabat, se vieron sorprendidos, el fin de semana, por un repentino despliegue policial.

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