Kate Middleton confirma su pasión por los lunares en su último día en Escocia

Último día para el príncipe Guillermo y Kate Middleton en Escocia. Es el fin de una intensa gira que ha tenido un gran significado, por dos motivos. Primero, porque el duque de Cambridge actuó unos días en solitario como alto comisionado de la Iglesia Escocesa, designado directamente por la reina Isabel como su representante. De ahí que la pareja se haya alojado en el palacio de Holyroodhouse, la residencia oficial de la monarca en Edimburgo. Y segundo, porque su tour también era una estrategia para intentar debilitar esa ola republicana e independentista que ha tomado gran protagonismo en el país. Si ha funcionado o no, se sabrá más adelante, pero lo que está claro es que ellos han puesto todo de su parte, con un despliegue de actividades y vestuario, en el caso de Kate, muy a propósito. Concretamente, este jueves ha tirado de uno de sus estampados favoritos, confirmando su pasión por los lunares en su última cita en Escocia.

Su compromiso les ha llevado hasta el Starbank Park, un parque de Edimburgo gestionado por el ayuntamiento de la capital escocesa y protegido por la fundación Fields in Trust. Aunque actualmente está presidida por el príncipe Guillermo, él tomó el relevo del duque de Edimburgo en 2013. En este parque se han rodeado de alumnos de una guardería y varios adolescentes para hacer trabajos de jardinería. La pareja se ha colocado unos guantes, se ha equipado con pala y ha estado plantando semillas, girasoles y hasta un árbol frutal. Y como siempre que hay niños, los duques de Cambridge han protagonizado imágenes muy espontáneas con los más pequeños.

No ha sido un viaje especialmente espectacular en cuanto al vestuario de Kate Middleton. Al no haber grandes cenas con autoridades ni citas de gala, su maleta ha estado llena de prendas fundamentalmente cómodas, ya que estaba previstas diversas actividades, como la de este jueves, en las que no había espacio ni para tacones ni para vestidos imposibles. Y este jueves no ha sido una excepción, con un traje de chaqueta que ha combinado con unas zapatillas blancas. Una combinación a priori complicada, pero que ha sabido lucir para su visita a Starbak Park, añadiéndole una blusa de lunares, un estampado que se ha convertido, con permiso del tartán, en uno de sus favoritos.

Tampoco ha habido grandes estrenos de Kate Middleton para recordar en este viaje, a excepción del abrigo en color azul con estampado de cuadros -todo muy escocés- que escogía para la noche de cine que los Cambridge celebraron en Holyroodhouse, donde acogieron el estreno de 'Cruella'. De ahí que también haya tirado de fondo de armario para meterse de lleno en tareas de jardinería, rescatando su traje de chaqueta en color verde bosque de la firma Massimo Dutti.

Y más niños con los que uno y otro han mostrado su lado más divertido. Tras su mañana de jardinería, los duques de Cambridge se han desplazado hasta un club de tenis, donde han compartido un rato muy deportivo con los jóvenes. Para esta nueva cita, Kate Middleton ha lucido un vestuario diferente, pero para ello ha tirado de un viejo truco de estilo, solo cambiando la parte superior de su primer outfit por un jersey mucho más acorde con la situación. Gracias a que con este jersey de línea deportiva su escote estaba más despejado, hemos visto que llevaba la cadena con las iniciales de sus tres hijos, una forma de tenerlos cerca después de llevar cuatro días alejada de ellos.

Tanto ella como el príncipe Guillermo se han equipado con raquetas y han intentado defender el papel como han podido, implicándose en la actividad tanto como ya han hecho en días anteriores. No se puede decir, desde luego, que no hayan puesto todo de su parte para dejar un buen sabor de boca en Escocia, donde se ha instalado un sentimiento republicano e independentista, como decíamos, que preocupa al Reino Unido y a la monarquía. Hay que esperar para ver si su gira ha dado el resultado esperado, pero al menos la reina Isabel no les puede reprochar sus esfuerzos.