Los reyes de Bután presiden un acto histórico (y muy significativo) en su país

A Jigme Khesar Namgyel Wangchuck y a Jetsun Pema se les ha comparado muchas veces con Kate Middleton y el príncipe Guillermo. De hecho, en algunos medios se habla de ellos como los duques de Cambridge asiáticos. Los monarcas son tremendamente populares en su país, Bután, y con su labor están contribuyendo a visibilizar ese pequeño estado asiático. Parte del mérito de esa labor recae sobre Jetsun que en 2011, con solo 21 años, daba el 'sí, quiero' al quinto rey Dragón en una boda que duró tres días y en la que los novios quisieron hacer partícipes a los habitantes de Punakha, la que fuera capital del país hasta 1955, en un claro gesto de acercar la monarquía al pueblo.

Desde entonces, la pareja ha trabajado de forma conjunta por modernizar un lugar que parecía anclado en el tiempo. Como ejemplo, un pequeño gesto: el rey rompió con la tradición de un país donde las manifestaciones de afecto en público no son bien recibidas al besar a su mujer hasta en dos ocasiones.

Parafraseando a Neil Armstrong podríamos decir que fue "un pequeño beso para la pareja, pero un gran gesto para el país". Ese proceso por acercar Bután al siglo XXI no se queda solo en guiños afectivos: el rey mantiene una intensa agenda internacional y una importante actividad con los países cercanos, especialmente con la India, con Japón y con Tailandia.

Hacia la modernización

Ahora los reyes han sido testigos de un nuevo e histórico cambio en el país al presidir el desfile del primer grupo de mujeres que forma parte del Ejército Real de Bután. Así lo recogía también la cuenta oficial de la casa real: “El evento marca un hito en la historia militar de Bután, con el primer grupo de mujeres reclutas en el Ejército Real de Bután. 151 hombres y 150 mujeres han completado su formación de un año en el MTC y ahora serán enviados a las distintas áreas en todo el país”. La incorporación de las mujeres a los cuerpos de fuerza del estado pretende acercar la realidad del país hacia la igualdad de género.

En el acto, además de distintos miembros de su gobierno, también estuvieron presentes su mujer, la reina Jetsun, y el heredero al trono, el pequeño Jigme, que con cinco años no perdía ningún detalle del desfile. “Me alegra que Jetsun y Jigme Namgyel estén presentes para esta ocasión especial y que también tengamos aquí al Primer Ministro y al Director de Operaciones de la RBA. Es un momento de orgullo para todos nosotros, un momento que nunca será olvidado”, dijo el rey dragón en su discurso. Wangchuck fue coronado en 2008 al abdicar su progenitor, convirtiéndose así a sus entonces 28 años en el rey más joven del mundo.

Un amor de película

Jigme Khesar y Jetsun Pema protagonizan una historia de amor que sellaron el 13 de octubre de 2011 con una romántica boda a la que asistieron unos 1.500 invitados. Aunque el rey podría tener varias esposas, renunció a la poligamia brindando un toque de modernidad a la monarquía. Jetsun consiguió romper con esta tradición tan arraigada en la monarquía de Bután. La joven pidió a su marido que no siguiera esta costumbre y él no dudó en aceptar su petición.

Jetsun Pema recibió la educación primaria y secundaria entre su país y la India, para después completar sus estudios en Regent's College, un centro universitario por el que han pasado distintos miembros de la realeza como el príncipe Felix de Luxemburgo o Lady Kitty Spencer, sobrina de Lady Di, entre otras figuras de enorme relevancia social. La conocida como reina Dragón es una gran entusiasta de la pintura y al baloncesto. "Es un ser humano maravilloso, inteligente. Tenemos una gran cosa en común: el amor y la pasión por el arte", aseguró su marido tras su boda, que fue el acontecimiento más mediático de toda la historia del país.

Desde entonces, la pareja ha formado una familia con, de momento, dos hijos y los detalles de su vida las hemos ido conociendo a través de las redes sociales. El hecho de que utilicen las redes y compartan momentos de su vida familiar es una señal más de lo atípica que es esta monarquía, que aúna la tradición butanesa y la modernidad.