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Las 10 bombas de más impacto de Corinna en su pódcast sobre Juan Carlos I
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Las 10 bombas de más impacto de Corinna en su pódcast sobre Juan Carlos I

Secretos, chantajes, acoso y amenazas. El pódcast 'Corinna y el Rey' llegó pisando fuerte y ha terminado del mismo modo: la expareja del monarca no ha dejado títere con cabeza

Foto: Corinna Zu Sayn-Wittgenstein, en una imagen de archivo. (Getty)
Corinna Zu Sayn-Wittgenstein, en una imagen de archivo. (Getty)

El 1 de noviembre, en pleno puente de Todos los Santos, apareció la primera bomba. Corinna Larsen, expareja del rey Juan Carlos I, era la protagonista de un pódcast en el que iba a narrar su relación con el exmonarca al detalle. Serían ocho capítulos, a razón de uno a la semana, que debían dejarnos boquiabiertos.

Acaso con inocencia, muchos pensaron que ya estaba todo contado: con el proceso judicial contra don Juan Carlos abierto en Londres, con las decenas de entrevistas que ha dado la empresaria alemana y con las filtraciones de sus conversaciones con el excomisario Villarejo…

placeholder El rey Juan Carlos I saluda a Corinna zu Sayn-Wittgenstein. (EFE)
El rey Juan Carlos I saluda a Corinna zu Sayn-Wittgenstein. (EFE)

Pero no, al menos no de la manera en la que se ha contado en ‘Corinna y el Rey’, pódcast creado por Project Brazen y un experiodista del 'Wall Street Journal' en el que la empresaria es el centro. Eso sí, no cobró nada por aparecer. Escuchar la historia entera de corrillo, seguida, con detalles desconocidos o poco explicados hasta la fecha y con pullas a unos y otros. Las bombas de Corinna han sido muchas a lo largo de estos casi dos meses. Aquí les presentamos las más sonadas.

1. El Rey “despiadado”

Ya en el tráiler que avanzaba algunas de las declaraciones de Corinna en el pódcast se escuchaban palabras como las siguientes: “Hay algo de perturbador en él y bastante despiadado. Creo que era una cuestión de pura supervivencia”. Un halo de misterio, casi de intriga, que se desgranaría en los capítulos y se avanzaba en el trailer: “Imagina que la persona que dice amar a tus hijos y que eres el amor de tu vida te involucra en una investigación criminal”.

2. Un monarca aka ‘Sumer’

Cuando la llamaba a su oficina, dejaba los mensajes como “señor Sumer” (en alusión a Su Majestad el Rey, ahora emérito). Pretendía esconder su identidad, pero su voz era “tan genuina” que todo el mundo sabía de quién se trataba. Lo curioso es que el mail de don Juan Carlos de aquellos años, al que tuvo acceso quien esto escribe, era sumer@… Según cuenta Corinna en el primer capítulo, la llamaba diez veces cada día, le mandaba flores a diario y le escribía decenas de cartas “a puño y letra”.

Foto: Juan Carlos I, en una imagen de archivo. (Reuters)

Cuando Corinna visitaba España, hacían vida de pareja en ‘La Casita’, un pabellón dentro del propio El Pardo, remodelado para la ocasión -supuestamente- con fondos reservados. Y las barbacoas en ambiente desenfadado que tanto disfrutaban, junto al hijo de ella, tenían lugar apenas a unos kilómetros de la casa donde vivía la reina Sofía.

3. La muerte del hermano y el alcoholismo de la madre

Según cuenta Corinna, este es uno de los episodios más oscuros en la vida temprana de don Juan Carlos, algo que le persigue y le atormentará de por vida. “Claramente, estuvieron jugando a un juego estúpido. En cualquier caso, él cargó el arma. Nunca se ha investigado correctamente, claro, pero creo que, en el fondo de su alma y de su cabeza, él siente una gran culpa. Tiene pesadillas al respecto. Creo que lo que más lo traumatizó fue que la primera reacción de su padre fue la de decir: 'Prométeme que no lo hiciste a propósito'. Me puedo imaginar cómo se debió de sentir porque aquello significaba que el padre pensó que él había disparado deliberadamente a su hermano”.

Foto: Las infantas Pilar y Margarita con don Juan Carlos, vistas por Jate.

La empresaria alemana aprovecha la ocasión para asegurar que la condesa de Barcelona, “su mamá, María de las Mercedes, se hunde en el alcohol, tanto que hasta llega a beberse su propio perfume. Durante años acude a un centro de rehabilitación”.

4. El pedrusco de pedida

“Fui muy muy discreta en público. Solo lo sabía un pequeño número de personas en España, amigos íntimos del Rey. Digamos que teníamos una cena con algunos amigos. Entonces ahí sí me ponía el anillo. Él estaba muy orgulloso de ello. Se lo enseñaba a sus amigos como lo harías tú, y todas las esposas lo querían ver. Solo tuve la precaución de no ponérmelo en reuniones donde pudieran verlo y provocar rumores en torno al palacio”.

Foto: El anillo de Corinna que nuestro experto ha valorado de 500.000 a 800.000 euros. (Project Brazen)

Pasado el tiempo, a Corinna no le importa e incluso hacen llegar a las redacciones una fotografía del supuesto anillo, un pedrusco que podía valer hasta medio millón de euros.

5. Encontronazo con Sofía

“Tenía bastante miedo de poner un pie en el palacio, a menos que tuviera el cien por cien de seguridad de que durante mi visita no coincidiría con ella. También por respeto, porque lo último que quería era montar una escena”, asegura en ‘Corinna y el Rey’. Pero sucedió: “Sofía saludó al invitado y luego me señaló a mí y me dijo algo así como: ‘Sé quién eres’. El Rey parecía completamente desconcertado e incapaz de responder a esta reacción de hostilidad que se estaba produciendo ante otras personas. Fue una escena bastante vergonzosa para todos los que estábamos allí”.

6. La reina Sofía, de nuevo

La voz en off, perteneciente a la actriz Laura Gómez, lee algunos de los insultos que, según Corinna, recibe de la prensa, como “asesina de elefantes” o “bruja malvada”. Y llega a una clara conclusión: “Estoy leyendo estas confabulaciones y todas ellas son muy despiadadas, solo pensaba: 'Vaya, esto tiene la marca de la reina Sofía por todas partes'. Es una mujer enfadada, capaz de salir a destrozar la imagen de otra mujer a la que percibe como una especie de rival”. Y aunque no hay pruebas de lo que dice, Corinna está segura de su teoría.

7. La fiesta más extraña

Alexander, su hijo, cumple 10 años y su madre le prepara una fiesta. Una celebración de lo más sorprendente. Corinna sienta a la mesa a su primer marido, Philip Adkins, y padre de su hija mayor, Nastassia; Casimir zu Sayn-Wittgenstein, su segundo marido y el padre biológico de Alexander; y, por supuesto, don Juan Carlos, para quien el pequeño era un hijo más, tal y como ella misma ha contado en anteriores episodios y podíamos comprobar en esa imagen que dio la vuelta al mundo y en la que veíamos al Rey emérito en un acto tan cotidiano y familiar como chef de una barbacoa al aire libre, con un atuendo bastante alejado de los protocolos.

8. Una Navidad de mentira

“Las relaciones familiares se habían deteriorado hasta tal punto que me dijo que no podía soportar la idea de pasar la Navidad con ellos y que temía volver a casa”. Corinna vuelve al ataque, sigue en modo ofensa, y asegura que pese a no mantener una relación sentimental, siente que debe seguir satisfaciendo al Rey y hacer caso a todos sus caprichos.

Foto: El rey Juan Carlos y Corinna, en una imagen de archivo. (EFE)

"Y en ese momento, su capricho era celebrar la Navidad con las personas que él quería, no con las que debía. Aunque fuera en otra fecha". Así que la empresaria organizó una cena de Navidad alternativa antes de la celebración auténtica.

9. La mansión de Londres

“Me desconcertaba un poco porque pensaba: 'Dios, que no se mude aquí; me tendría que ocupar de este problema para siempre”. Corinna se refiere a la primavera de 2014, semanas antes de abdicar de la Corona de España, cuando Juan Carlos I empezó a viajar a Londres con mucha frecuencia. Y finalmente se compró una mansión. Lo hizo con dinero del sultán de Omán a de 2014, según dice. “El rey Juan Carlos se acercó a mí, me dijo: ‘Quiero que sea como tu piso de Londres, quiero los mismos diseñadores de interiores y quiero que se parezca a tu casa’. En aquel momento empecé a preocuparme ligeramente por el nivel de obsesión que estaba alcanzando”.

10. Aquel grupo de whatsapp

“Se hacen llamar 'The Pride' [en inglés se podría traducir como 'el orgullo' o como 'la manada', y al tratarse de expertos cazadores, Corinna da por buena la segunda traducción], como en una manada de leones”. Estas declaraciones en el pódcast son muy parecidas a las que realizó en su demanda contra don Juan Carlos. En el documento se lee: “Además, en un grupo de WhatsApp llamado ‘The Pride’ (integrado por el Demandado, Philip Adkins, Alexander, Nastassia y el príncipe Casimir), Adkins escribió a Alexander, el 18 de julio de 2016, entre otras cosas para decir: ‘Ella le robó el título a tu padre. Y a mí muchas cosas. Y muchísimo dinero a SM'”.

Foto: Corinna Larsen, en una imagen de archivo. (Getty)

Este grupo es una prueba, según ella, de la campaña de desprestigio de don Juan Carlos en su contra: “En ese punto, les había comido la cabeza a muchos de mis contactos, a todos mis clientes, exmaridos, amigos cercanos, y ahora iba a por mis hijos”. Y añade, para enfatizar los problemas de ansiedad que dice haber padecido: “A todos les había dicho que era una ladrona, que era desleal y que no era digna de confianza, y eso para mí fue devastador”.

El 1 de noviembre, en pleno puente de Todos los Santos, apareció la primera bomba. Corinna Larsen, expareja del rey Juan Carlos I, era la protagonista de un pódcast en el que iba a narrar su relación con el exmonarca al detalle. Serían ocho capítulos, a razón de uno a la semana, que debían dejarnos boquiabiertos.

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