Exclusiva | Elena y Cristina, dos infantas liberadas y sin presiones: su hoja de ruta estival
A diferencia de otros años a estas alturas, este verano solo tienen dos planes claros: visitar a su madre, la reina Sofía, en Marivent y a su padre, el rey Juan Carlos I, en Abu Dabi
Cuando empezaron a salir publicadas informaciones sobre los ‘desmanes’ económicos del rey Juan Carlos I, sus hijas, las infantas Elena y Cristina, se sintieron apenadas y mostraron todo su apoyo a su padre. Poco a poco, ese gota a gota ha ido calando en ellas hasta darle la vuelta al calcetín: ya no sienten que tengan que esconder sus privilegios, y con ese espíritu de libertad es como plantean su vida. Y sus vacaciones.
Tanto la infanta Elena como la infanta Cristina han decidido este año improvisar más que de costumbre su agenda estival. Si el año pasado a estas alturas ya habían planeado todo su periodo de verano, este año solo tienen claras dos cosas: que van a ir a ver a su madre y van a ir a ver a su padre, cada uno en su lugar, Palma y Abu Dabi. Así lo ha podido confirmar Vanitatis de fuentes directas del entorno de las hermanas de Felipe VI.
La reina Sofía, como adelantó Vanitatis en exclusiva hace más de un mes, se instalará en el palacio de Marivent el 15 de julio. A partir de ese momento, sus hijas planean visitarla, concretamente la segunda quincena del mes. Será entonces, según ha podido saber Vanitatis, hacia finales de julio, cuando doña Elena y doña Cristina pasen unos días con su madre y con su tía, la princesa Irene.
Es en agosto cuando han apuntado en sus agendas el momento para visitar a su padre en Abu Dabi. Son días calurosos en Emiratos, lo saben porque ya estuvieron ahí el mes de agosto pasado; primero viajó doña Elena y después lo hizo doña Cristina, en tandas para que don Juan Carlos tuviera compañía durante ese largo mes árabe.
Las regatas de don Juan Carlos
Este año, sin embargo, preferían ir juntas porque el rey Juan Carlos no tiene tanto tiempo como tuvo el año pasado. Hay que recordar que se ha inscrito en la final mundial de la categoría 6M en las regatas de la isla de Wright, en Inglaterra, que dan comienzo a finales de agosto. Así pues, siempre que sus condiciones físicas se lo permitan, el Rey expatriado viajará a Europa de nuevo este verano.
Antes, no obstante, recibirá la visita de sus hijas, con quienes ha estado este año más que en otras ocasiones. Eso sí, no ha sido en Abu Dabi donde más se han visto. Recordemos que don Juan Carlos ha viajado a Europa varias veces este año, y en casi todas se ha visto con sus hijas. No fue así cuando viajó a Sanxenxo, momento en el que les pidió que no se vieran para rebajar la burbuja mediática que le había rodeado (y perjudicado) en su primera visita a España desde su marcha.
De Londres a Atenas
El Rey emérito estuvo en Londres en el funeral de Isabel II en otoño de 2022, viajó después a París con la infanta Cristina, también estuvo en el funeral de su cuñado Constantino de Grecia con toda su familia, volvió a Londres antes de viajar a Galicia… Aunque la última vez que han estado todos juntos ha sido en Ginebra, en la graduación de Irene Urdangarin, hace un par de semanas, cuando toda la familia Borbón, a excepción de los Reyes actuales y sus dos hijas, se reunió en la ciudad suiza con la infanta Cristina como anfitriona.
En verano, decíamos, todo será distinto y serán los padres los anfitriones de sus hijas. Como tantas familias de clase media, que no pueden pagarse unas vacaciones y pasan el verano en casa de sus padres, en la playa o la montaña. Pero, en este caso, no es por cuestiones económicas. Tanto doña Elena como doña Cristina tienen capacidad financiera para pagarse unas buenas vacaciones, por lo que se espera que viajen a otros lugares, puntos geográficos que planean sobre sus agendas.
La infanta Cristina estará, con toda probabilidad, en Barcelona y alrededores, donde tiene a sus mejores amigos y además cuenta con varias opciones en casas privadas, cercanas al mar. Doña Elena, por su parte, estudia también las posibilidades de ir a Sotogrande, como ya hizo el año pasado, y a alguna finca campestre, acompañada de Rita Allendesalazar, su gran amiga.
Sin Bidart en la agenda
Lo que por ahora no está previsto, según han informado las mismas fuentes a Vanitatis, es que la infanta Cristina visite Vitoria o Bidart como hizo el año pasado, donde se encontró con su todavía marido, Iñaki Urdangarin. Decimos marido porque no se han divorciado aún. Desde Vanitatis hemos consultado en varias ocasiones con el círculo cercano de la infanta Cristina y con el abogado de Iñaki Urdangarin, su gran amigo Mario Pascual Vives, y por el momento siguen sin firmar el divorcio. Pese a que la visita de Urdangarin a Ginebra debía servir para acelerar el proceso, parece que por el momento sigue estancado.
Las mismas fuentes aseguran, con todo, que la relación entre ambos es cordial y que la prioridad, como siempre insisten, son sus cuatro hijos. Con ellos pasan temporadas cada vez que tienen tiempo libre y este verano no debería ser diferente. La infanta Cristina espera poder compartir sus vacaciones, aunque solo sea un par de días, con sus hijos en el palacio de Marivent como ya hizo el año pasado. En 2022 fueron Miguel y Pablo quienes estuvieron en casa de los abuelos en Palma con Victoria Federica y Felipe Froilán de Marichalar.
Leonor y Sofía, la incógnita
Este año esperan que se repita con la asistencia también de Irene y de Juan Urdangarin. A doña Sofía, nos lo han asegurado varias veces, le gustaría que también se sumaran al encuentro familiar la princesa Leonor y la infanta Sofía, pero esa posibilidad es complicada, puesto que las agendas de ambas son intensas este verano y deben compaginarlas además con las de sus padres.
Ssea como sea, queda claro que las infantas Elena y Cristina han cambiado su forma de actuar y han pasado de ser rigurosas con su agenda, en las que cabía la improvisación pero hasta cierto límite, a decidir o no decidir hasta el último momento. Y eso porque, según nos aseguran, después de todo lo que ha sucedido, se sienten liberadas de todas las ataduras, tanto protocolarias como económicas, con las que han vivido durante décadas. Veremos, pues, si las hermanas amplían su agenda este verano y suman a sus planes algún punto más además de Palma de Mallorca y Abu Dabi.
Cuando empezaron a salir publicadas informaciones sobre los ‘desmanes’ económicos del rey Juan Carlos I, sus hijas, las infantas Elena y Cristina, se sintieron apenadas y mostraron todo su apoyo a su padre. Poco a poco, ese gota a gota ha ido calando en ellas hasta darle la vuelta al calcetín: ya no sienten que tengan que esconder sus privilegios, y con ese espíritu de libertad es como plantean su vida. Y sus vacaciones.