El San Valentín de Felipe VI y la reina Letizia en Barcelona: gran clamor popular y un reencuentro político

Las visitas de los Reyes a Cataluña se van normalizando. Atrás quedan aquellos años en los que los grupos independentistas rodeaban los sitios en los que don Felipe y doña Letizia iban a cumplir con actos para mostrarles su rechazo. Este miércoles, sin embargo, ocurrió todo lo contrario. El público que había a las puertas de la nueva Torre Puig, que Sus Majestades inauguraron en L'Hospitalet, no dudó en expresar su alegría ante la presencia de los Reyes.

A la llegada se oyeron gritos de "viva el Rey" y "viva España", y a la salida, ante el clamor popular, don Felipe y doña Letizia se acercaron a los ciudadanos allí congregados para saludarlos personalmente. Una situación inaudita que no ocurría desde hacía mucho tiempo y que muestra que, poco a poco, el 'procés' va quedando olvidado y que la figura de los Reyes es alabada y querida en Cataluña.

No solo esos vítores dan prueba de ello, también el hecho de que Pere Aragonès estuviera presente en el acto. Desde febrero del año pasado, cuando ambos coincidieron en el Mobile World Congress, no había existido un encuentro entre el Rey y el presidente de la Generalitat, ya que este último siempre había declinado asistir a compromisos en los que estuviera Su Majestad.

Sin embargo, la foto se ha vuelto a repetir este febrero de 2024, aunque Aragonès siguió con su fórmula para encontrarse con el Rey. Como ya ocurrió en el MWC y en anteriores ocasiones, el presidente de la Generalitat declinó participar en el recibimiento al monarca y su esposa. Prefirió, en cambio, acceder a la Torre Puig por otra puerta distinta y ya en el interior, antes de la fotografía de familia, saludó a Sus Majestades. Después, durante el acto, se sentó a la derecha del Rey.

En el acto había otras autoridades como el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu; el delegado del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Cataluña, Carlos Prieto; la alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat, Núria Marín; el jefe de la oposición del Parlamento de Cataluña, Salvador Illa; el presidente de Puig, Marc Puig, y el vicepresidente de Puig, Manuel Puig, entre otras personalidades.

El homenaje de la Reina

Doña Letizia quiso homenajear a la empresa Puig, cuyo conglomerado cuenta con las firmas internacionales Carolina Herrera, Nina Ricci, Dries Van Noten y Rabanne, entre otras, luciendo un estilismo con sus prendas. La Reina estrenó un dos piezas negro con brocado formado por un pantalón de pinzas pitillo y una chaqueta de cuello mao con hombrera marcada, la cual destaca por su frontal cierre de botones y grandes bolsillos.

Fue en 2018 cuando se anunció que la empresa catalana había adquirido la mayor parte del accionado de la casa de modas belga Dries Van Noten. Desde entonces, la Reina ha apostado en varias ocasiones por ella, introduciéndola en su armario y eligiéndola para actos como el de este miércoles en Barcelona.

No solo con el traje doña Letizia homenajeó a sus anfitriones, también con los complementos, todos de Carolina Herrera. Su Majestad apostó por unos pendientes bañados en oro en forma de jazmines con detalle de cristal en el centro, que están a la venta en la web de la firma por 245 euros. Unos slingbacks negros con tacón moderado y un nuevo bolso, el modelo Initials Insignia, redondeaban su estilismo.