La reina Letizia estrena un vestido de gala negro de Max Mara en Roma y lo combina con las pulseras gemelas de diamantes y pendientes suizos

El Palacio de Quirinal, el mismo que esta mañana albergaba la ceremonia de bienvenida oficial a don Felipe y doña Letizia, se ha engalanado esta noche para un evento muy especial. Y es que en toda visita de Estado que se precie no puede faltar una cena de gala, ofrecida en este caso por el presidente de Italia, Sergio Mattarella. En esta ocasión, la Reina de España ha vuelto a dar una lección de elegancia y diplomacia, apostando por un vestido negro de una firma italiana, Max Mara, que ha lucido junto a las pulseras gemelas del lote de pasar y pendientes de la firma suiza De Grisogono.

A las 20:00 horas, don Felipe y doña Letizia llegaban al Palacio Quirinal, residencia del presidente Mattarella, para este banquete de Estado que pone fin a la jornada más oficial de la estancia de los Reyes en Italia. Una cita en la que ambos Jefes de Estado han pronunciado unas palabras y cuya etiqueta marcaba traje largo para las mujeres, algo que doña Letizia ha cumplido a rajatabla.

Si en Francia llevó Dior y en Dinamarca Rotate, en Italia la Reina también ha querido vestir moda del país, con un diseño de Max Mara. Se trata de un vestido de gala compuesto por cuerpo sin mangas de georgette de pura seda, y falda de raso brillante cortado al bies. Presenta drapeado escultórico en el hombro y detalle de lágrima en la parte delantera. Su precio es de 599 euros y está disponible en la web de la firma.

Nos encontramos ante un modelo sencillo y sobrio, ya que la Reina ha querido alejarse de brillos o lentejuelas, pues sigue todavía muy presente todo el asunto de la DANA. Así pues, se trata de una decisión de doña Letizia y el resultado, con este vestido minimalista, no puede ser mejor.

Siguiendo el "ejemplo impagable" de la reina Sofía, palabras que Letizia pronunció durante el anuncio de su compromiso, la Reina prefiere no llevar tiaras cuando visita repúblicas. Así lo hizo, por ejemplo, en las cenas de gala celebradas en Alemania o Portugal. Por lo que nos hemos quedado sin ver a doña Letizia con tiara. En este 2024 solo ha coronado su cabeza en una única ocasión, durante la visita de Estado a Países Bajos, cuando eligió la Rusa para el banquete ofrecido por Guillermo Alejandro y Máxima de Holanda.

Eso sí, doña Letizia llevaba dos piezas del lote de pasar, esas joyas que la reina Victoria Eugenia dejó escrito en su testamento que debían pasar de reina a reina. Hablamos de las pulseras gemelas, realizadas con diamantes. Su origen se encuentra en una corona de Cartier que Alfonso XIII entregó a Victoria Eugenia como regalo de bodas. La corona pasó de moda rápidamente y, tras su exilio, la Reina encargó a la misma firma que la desmontara y con los diamantes creó estas dos pulseras.

Desde la muerte de Victoria Eugenia, solo habían sido lucidas por doña Sofía, hasta que Letizia las lució por primera vez en febrero de 2017. Desde entonces, se las hemos visto en numerosas ocasiones, tanto en actos de gala como en otros más informales. Las suele lucir ambas en la misma muñeca, mientras que doña Sofía prefería una en cada brazo.

La Reina lucía también unos pendientes en forma de lágrima, realizados en oro blanco y diamantes negros, de la firma suiza De Grisogono. Aunque tiene el collar a juego, siempre usa únicamente los pendientes. No faltaba, por supuesto, su anillo de Coreterno. A pesar de que ha habido intercambio de condecoraciones, ni los Reyes ni los Mattarella han lucido ninguna en la cena.