Mette-Marit reaparece tras el empeoramiento de su enfermedad: junto al príncipe Haakon y muy animada

La princesa Mette-Marit ha reaparecido en público tras la preocupante actualización sobre su estado de salud emitida por la Casa Real noruega. A pesar del reciente comunicado que confirmaba la progresión de su enfermedad, la futura reina ha querido estar presente en un evento de gran relevancia en Noruega.

Acompañada por su marido, el príncipe Haakon, ha acudido la final de relevos femenina en el marco de los Campeonatos del Mundo de Esquí Nórdico FIS 2025. Esta esperada reaparición se ha producido apenas unos días después de que la familia real informara sobre el empeoramiento de su fibrosis pulmonar.

La royal lleva años conviviendo con esta enfermedad crónica, cuyo diagnóstico se hizo público en 2018. Sin embargo, en las últimas semanas, ha experimentado un deterioro en su estado de salud que ha afectado a su capacidad para desempeñar sus funciones oficiales.

Durante su presencia en la competición de esquí, la princesa ha sido vista con una actitud animada, vestida con un abrigo rojo a juego con el de su marido, y arropada por el cariño del público. Se mostró sonriente y aplaudió a las participantes de la prueba, en un evento marcado por la emoción del deporte y el espíritu de equipo.

“La enfermedad crónica ha progresado”, explicaba el último parte médico, añadiendo que la princesa presenta síntomas y dolencias diarias que le obligan a reducir su agenda y a descansar con mayor frecuencia.

A pesar de ello, Mette-Marit ha demostrado su fuerte compromiso con sus responsabilidades y su deseo de continuar con su labor pública. De hecho, un día antes de que se hiciera oficial la actualización sobre su estado, visitó el hospital de Ullevål para conocer de cerca la labor de una asociación dedicada a ayudar a niños y jóvenes en Noruega.

Ahora, su agenda será menos predecible y se ajustará en función de su evolución, con cambios más frecuentes y con menor antelación de lo habitual. Este regreso a la esfera pública se produce en un momento delicado no solo por su salud, sino también por una crisis institucional que afecta a su familia.

En los últimos meses, su hijo, Marius Borg, ha estado en el centro de la polémica tras varias denuncias de mujeres por violencia que podrían llegar a juicio este año. El joven regresó a Noruega en enero, tras un período en Londres, y en una reciente entrevista junto a su madre y el príncipe Haakon, reconoció lo complicado que ha sido este proceso. “Ha sido muy duro”, declaró.