Bob grunge, el corte salvaje con volumen rock y mucho rollo de los 90

Hablan de él como una renovación del corte de pelo bob; sin embargo, el bob grunge también encaja como una adaptación del estilismo a otras tipologías de cabello y, por supuesto, como el toque noventero y rockero de la popular minimelena.

Una de sus premisas es la de simplificar al máximo el momento del styling. Su superposición de capas, desfilado frontal o flequillo contribuyen a que su forma de peinarlo apenas demande un gesto de manos y un producto texturizante.

La forma sencilla de describir el bob grunge es la de un bob francés (con flequillo incluido) más salvaje, rockero, desaliñado, aunque cortado con mucha precisión. No tiene la geometría impoluta de una clásica melena bob.

El movimiento y el indudable volumen que consigue el corte de pelo lo han convertido en una opción muy interesante para cabellos finos, ya que, con mesarlo y alborotar un poco, el peinado está listo y gana mucho cuerpo.

La textura es una de sus claves. A diferencia de otros tipos de bob, el grunge no solo se adapta a cabellos ondulados, rizados o con tendencia al encrespamiento. El grunge se aprovecha de ese tipo de texturas y, en caso de no tener ese tipo de cabello, lo falsea con productos o moldeadores.

Sobre el corte de pelo, siempre se apunta a que no es tan exigente como otras melenas de ese largo. No se busca un corte recto perfecto, sino despuntado. La forma de crear las capas tiene que ser equilibrada, no estamos ante un corte de capas largas como las melenas noventeras que vemos por todas partes, pero tampoco hay que llenar el cabello de capas para conseguir el efecto de plumas.

Las capas del bob grunge están bien integradas en el conjunto de la melena, no se aprecian escalones marcados, simplemente el cabello parece salvaje. Aquí las puntas también juegan un papel fundamental pues, en pro de romper con la perfección de los bobs geométricos, se despuntan, logrando un efecto entrecortado, lo que también ayuda al movimiento.

La idea es que se logre una textura suave que realce el tipo de cabello y que enmarque el rostro. El desfilado delantero es fundamental, ya que en casi todos los bob grunges que veas habrá flequillo. Mientras que en otras melenas bob, el flequillo es fino y largo, tipo curtain fringe, para dar con el toque rockero, en este look el flequillo es algo más corto y se peina también en abierto y jugando con el efecto despuntado.

El corte no busca tanto resaltar las facciones, puesto que las capas que incorpora no aportan muchísima estructura al corte. Más bien lo que pretende es lograr esa estética grunge de los 90.

Entre los nombres que se asocian a esta tendencia, para explicar un poco su inspiración, están nombres como Winona Ryder, Drew Barrymore o Kate Moss. Mientras las dos primeras sí llevaban el cabello más corto, de la modelo británica, por ejemplo, se toma su melena desaliñada, ondulada, alborotada. Eso es una textura grunge en el terreno capilar. Cameron Diaz o Lady Di, rubias y con cabellos más pulidos, también pueden representar el largo del bob grunge.

TE PUEDE INTERESAR

Cómo hacerse el peinado de Polina Podpletennaya, la melena bob con más volumen de Instagram

Margarita Velasco

Sobre la forma de peinarlo, como decíamos, la sencillez y la búsqueda de un acabado muy natural son, quizá, su característica más original. Efecto messy, alborotado, de ese pelo nada más levantarte en el que, por la fricción contra la almohada, ha aparecido algo de encrespamiento y tienes un volumen que solo requiere que lo acicales con los dedos.

Si la textura de tu cabello es de por sí ondulada, tendrás aún menos trabajo; en el caso contrario, sprays de agua salada y otro tipo de texturizadores crean ondas naturales y le dan cuerpo al cabello. El plan B es recurrir a unas tenacillas para crear ondas muy poco marcadas que deshacer con los dedos. Y listo, ya tienes una melena grunge noventera.