Petos, chándales y botas de pelo: la nueva cara de Chanel en la Semana de la Moda de París

Las propuestas para el otoño-invierno 2021/2022 de Chanel conjugan la estética de unas vacaciones entre pistas de esquí con el savoir faire parisino, y la marca parisina ha logrado ser una de las pocas que al lanzar el claim de sus propuestas consigue que este quede perfectamente reflejado en las mismas. Gracias al mensaje de la colección, se comprende de forma instantánea el porqué de esas botas après-ski combinadas con minivestidos, así como esas prendas tan parisinas sumadas a diseños tan abrigados y cálidos. Porque ¿acaso no nos encontramos en un momento que deambula entre dos mundos radicalmente opuestos?

La colección funciona como un puente entre ambos mundos, por lo que a su vez refleja bien una realidad en la que las marcas oscilan entre los diseños de fiesta y los más caseros ante un presente en el que el futuro es incierto. De lo que no cabe duda es de que la llegada de Virginie Viard a la firma como directora creativa supone un soplo de juventud y modernidad.

Por más que Karl Lagerfeld se caracterizara siempre por innovar pese a mantenerse fiel al ADN de la maison, las propuestas de Viard van un paso más allá al tener en mente claramente a la generación Z y al uso constante (y vital) de las redes. Podríamos hablar de una de las colecciones más sensuales de la marca, que sorprende con conjuntos en los que Chanel aparece estampado a todo color y hasta el infinito. Ya no basta con botones con el logo ni con el mítico tweed: ahora, si se viste de Chanel, también hay que presumir de ello haciendo de su nombre el nuevo estampado.

Los diseños de siluetas sporty han vuelto a estar presentes, los crop tops dejan claro que una nueva compradora está en mente de Virginie, y si 'Emily in Paris' ha hecho que la estética parisina se llene de color, Chanel acepta la propuesta y la integra en sus diseños. Maxijerséis de lana de cuello vuelto a modo de vestido con el logo de la firma y estampados zigzag, vestidos de lentejuelas combinados con cárdigan de efecto pelo e incluso petos (¡petos!) y chándales de tweed (¡chándales de tweed!) dejan claro que Chanel todavía nos puede sorprender.

El final del fashion film, dirigido por Inez & Vinoodh, sitúa a las modelos en las calles de París, mandando de esta forma un mensaje esperanzador en el que pronto, esperamos, todos podamos regresar a las aceras con toda la libertad del mundo y, sobre todo, con toda la moda posible, pues las firmas han dejado claro esta temporada que confían en que no tardaremos en volver a arreglarnos como antes o incluso mucho más.