Pablo Alborán, en 10 curiosidades: aficiones, vicios y su bisabuelo marqués
Es uno de los artistas más relevantes de los últimos tiempos. Su talento le ha permitido acumular una gran legión de fans, pero ¿lo conocen todo sobre él?
Su salida del armario fue una noticia que corrió como la pólvora, sobrepasando en atención mediática a los logros de una carrera llena de éxitos y premios, pero lo cierto es que desde su debut en el mundo de la música son casi 40 los galardones que ha obtenido y 74 a los que ha estado nominado Pablo Alborán. Nada que pudiera imaginar aquel chico que empezó cantando flamenco en un restaurante y saltó a la fama tras colgar algunas de las canciones que él mismo había compuesto en YouTube.
La sensibilidad artística con la que interpretaba cada uno de sus temas conquistó a miles de personas alrededor del mundo y el sencillo 'Solamente tú' obtuvo más de 180.000.000 reproducciones siendo un éxito en toda España y Latinoamérica. Desde entonces, se ha consagrado como uno de los artistas más relevantes de los últimos tiempos en el panorama nacional e internacional y acumula una nutrida legión de fans que siguen cada uno de sus pasos. No en vano, este malagueño de 32 años es una auténtica caja de sorpresas y son muchas las cosas que esconde su personalidad: las repasamos.
Mucho ha llovido desde aquel 2011 que fue el gran año del artista andaluz. En el mes de febrero, publicaba su primer álbum, bautizado con su propio nombre. 2011 fue el año también de su primera gira, los primeros estadios abarrotados y la 'pablomanía' desatada. Los premios le llovían y los galardones se le amontonaban en casa: de Los 40 a Cadena Dial, del Premio Andalucía a su primera nominación de los Grammy Latinos.
Una década después, poco queda ya de aquel tímido chico que le cantaba al amor. Pablo ha crecido por dentro ("Estoy aquí para contaros que soy homosexual. No pasa nada, la vida sigue igual", confesaba) y por fuera (no hay más que echar un vistazo a su cuenta de Instagram en la que se aprecia el sustantivo cambio). Después de diez años de estar en el centro del foco mediático, tal vez aún hay cosas que no sepas sobre el malagueño, como sus 'vicios' o su odio al WhatsApp.
1. Pasado aristocrático
Pablo siempre presume de que, cuando se marea, tiene un entorno familiar sólido al que aferrarse. El artista viene de una familia muy conocida en Málaga. Su padre es el prestigioso arquitecto Salvador Moreno Peralta, nieto del primer marqués de Alborán. Entre sus últimos proyectos, ha sido responsable de devolver a los peatones parte del centro de Torremolinos. Pablo es el menor de tres hermanos: Casilda, la mayor y diseñadora de interiores, y Salvador, el mediano, que trabaja en publicidad.
Su madre, aquella madre que le acompañaba a las alfombras rojas, se llama Elena Ferrándiz y es de origen francés e hija de españoles. Por cierto, que en una entrevista para el periódico 'Hoy', el cantante revelaba que la canción de cuna que usaba para dormirle era 'La vie en rose'.
2. 16 años y 120 canciones
Criado en el barrio malagueño del Limonar, algunos amigos recordaban para Vanitatis hace unos años aquel chaval que logró componer su primer tema con diez años mientras combinaba sus estudios en el Liceo francés con clases de guitarra y de piano: "Era encantador y se notaba desde el principio que lo suyo era la música... Cada canción era como una especie de hijo para él", decía una de ellas.
El 'Nómadas' era el café donde comenzó a experimentar la sensación de ponerse delante del público. Con 16 años ya tenía una libreta con 120 canciones compuestas por él mismo. "Pasaba mucho tiempo solo y componiendo, pero luego salíamos como todo el mundo de copas", comentaba otro de sus amigos de entonces.
3. Discos de platino y un Goya
Y de pronto, 2010 y el boom de YouTube. Y después 2011 y todo lo demás. Lo que vino a continuación fue tan fuerte que tuvo que parar un par de años para asimilar las ventas, los éxitos, la fama, los números: más de 30 discos de platino y hasta un Goya por el tema que compuso para 'Palmeras en la nieve'.
De hecho, en una entrevista relativamente reciente para 'El Mundo' llegaba a confesar haber sufrido problemas de ansiedad, a lo largo de su carrera. "Tener un cuadro de ansiedad es horrible, es como si estuvieras drogado. Se te paraliza el cuerpo, crees que te vas a morir y no tienes ni una sola herramienta racional a la que te puedas agarrar. Es de las peores cosas que me han pasado".
4. Instagram sí, WhatsApp no
Aunque el cantante ha echado mano de su perfil de Instagram para dirigirse a sus fans y hablarles con total sinceridad sobre distintos temas como, por ejemplo, su sexualidad, la verdad es que con otra aplicación muy utilizada hoy en día está más que enfrentado. El cantante confesó en una entrevista para la revista 'Que.es' que el WhatsApp le pone enfermo, sobre todo cuando discutes por mensaje porque todo se malinterpreta y no le gusta utilizarlo, así que prefiere prescindir de él.
5. Adicciones
Cuesta creer que el chico que cualquier madre quisiera para su hija o hijo, también tiene adicciones, pero de 'drogas' muy blandas. Entre sus predilecciones: el regaliz, las palomitas y la Nutella. Vicios no tan inconfesables que se unen a su pasión por la repostería; campo en el que cada vez es más profesional.
6. Complejos
Más allá de la cocina, una de las grandes aficiones del artista es el deporte, por lo que presume de un cuerpo atlético y tonificado, pero esto no implica que no tenga complejos. En su caso es la altura. Aunque el malagueño mide 1,74 (muy en la media de los españoles), en el programa 'Hay una cosa que te quiero decir' confesó que le habría gustado ser más alto.
7. Buen ojo para los negocios
Excelente, de hecho. El artista ha sabido invertir en bienes inmuebles en Madrid y Málaga. Parte están a su nombre y parte están gestionados desde la sociedad Sirona Investments, de la que Pablo es administrador único y accionista mayoritario al menos con datos obtenidos en 2019. Según los datos de 2017, los últimos de los que dispone el Registro Mercantil, la entidad tiene un activo de 7.674.505 euros y en el último ejercicio declaró unas ganancias cercanas a los 400.000 euros.
8. Es muy casero
Pero no de quedarse en casa, sino de alquilarlas. En este caso locales comerciales en las mejores calles de Madrid y Málaga. En la ciudad andaluza, Sirona Investments (y por lo tanto, Pablo) es propietaria de un local en la calle de La Bolsa (Málaga) y otro en el Edificio Calafate. En Madrid, cuenta con otros dos locales. Uno de 190 metros cuadrados entre Diego de León y Velázquez, y otro en la calle Ortega y Gasset. Todos ellos se han adquirido mediante hipotecas (en algunos casos millonarias), por lo que la factura mensual de Alborán debe ser de infarto.
9. Madrileño y malacitano
Alborán se crio en el Limonar, uno de los barrios más exclusivos de la capital de la Costa del Sol, y no ha querido abandonar esa zona a la hora de independizarse. En el año 2012 adquirió un piso no muy grande con plaza de garaje y trastero en la mejor zona del barrio. Un refugio para cuando puede parar su vida profesional y volver al mar, a ver a sus amigos del Liceo francés, donde estudió, y a recuperar al antiguo Pablo. Pablo tiene también en Madrid un piso en propiedad, en una gran avenida fuera del jaleo del centro. Un inmueble con una gran terraza desde donde Alborán puede centrarse en componer.
10. Malagueño y culé
A Pablo le encanta el fútbol y, como no podía ser de otra manera, es del Málaga, pero su corazón futbolero está dividido porque también es seguidor del Barça y, por supuesto, de la que, hasta hace poco, era la gran estrella del equipo, Leo Messi.
Su salida del armario fue una noticia que corrió como la pólvora, sobrepasando en atención mediática a los logros de una carrera llena de éxitos y premios, pero lo cierto es que desde su debut en el mundo de la música son casi 40 los galardones que ha obtenido y 74 a los que ha estado nominado Pablo Alborán. Nada que pudiera imaginar aquel chico que empezó cantando flamenco en un restaurante y saltó a la fama tras colgar algunas de las canciones que él mismo había compuesto en YouTube.