Así era Loquillo hace 43 años: de sus inicios en la música a ser el rey del rock & roll español

Los años 80 marcaron un antes y un después para José María Sanz Beltrán, más conocido como 'Loquillo'. El barcelonés saltó a la fama tras la participación en un conocido programa de TVE, 'Aplauso'. A partir de entonces, su popularidad fue in crecendo por ser el autor de algunos temas que siguen siendo recordados a día de hoy.

Dentro de su repertorio están canciones como 'Rey del glam', 'Chanel, cocaína y Dom Perignon' y 'Cadillac solitario'. Sin embargo, tuvo unos comienzos bastante humildes y, para ganar dinero, trabajó como modelo de peluquería y fue vendedor de libros. Su infancia estuvo marcada por varios episodios, y la música siempre estaba presente en su familia. "Los Sírex sonaban en mi casa y también Manolo Escobar. Por unas cuestiones familiares tiene una vinculación con mi barrio", dijo en una entrevista para 'Uppers'.

España lo conoció en los 80 como aquel joven con pendiente y un peinado que nos hacía recordar a Elvis Presley, con quien siente una gran admiración. "Hay muchos pretendientes, pero REY solo hay uno: Elvis Presley", confesó una vez Loquillo en un tuit.

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Una de las cosas que más caracteriza de Loquillo, además de su talento musical, es su estatura. El intérprete mide casi dos metros y, antes de entrar al mundo de la música, estuvo a punto de ser jugador de baloncesto. Sin embargo, debido a su actitud rebelde, no pudo cumplir con las expectativas. Aun así, asegura que fue una época que le marcó mucho. "El basket me ayudó a desviarme del mal camino", confesó en el medio 'Mundo deportivo'.

Como buen rey del rock & roll, su estilo nunca pasó desapercibido. Él, junto a sus estilismos rockeros compuestos en ocasiones por chaquetas de cuero, total black looks y un tupé hacia arriba, marcó una nueva era en el mundo de la música de España.

Al cabo de los años, la imagen de Loquillo fue adaptándose, y dejó las 'chupas' por las americanas, pero sin dejar de lado el negro. Un cambio que se pudo apreciar a principios del s. XXI, aunque su esencia juvenil jamás dejó de existir.

Han pasado más de cuarenta años y su nombre sigue resonando en la actualidad, al igual que sus icónicos temas. Ahora, vemos a un Loquillo más adulto, con el típico tupé de los ochenta y siempre luciendo el negro, en muchas ocasiones, con un tuxedo.

En la actualidad, Loquillo, tiene 62 años y un hijo, Cayo, que es su community manager y con él comparte muchas aficiones, como la música o el baloncesto. Ha confesado que no tiene planes para el futuro, siendo uno de los motivos principales la enfermedad que padece y que le afecta a la zona del cuello. "De momento, de lo del cuello estoy bien, pero no hago planes por adelantado desde hace unos años", confesó en una reciente entrevista a Cadena SER.