Costa Brava, el discreto encanto de la burguesía

No busquen un club de élite donde se practiquen deportes ecuestres. No traten de husmear en sus campos de golf –que los hay, y magníficos– para ver qué vip tiene mejor handicap. Tampoco se acerquen a sus clubes náuticos para tratar de inmortalizar al magnate bajando del yate. Quien se refugia en la Costa Brava huye precisamente de todo ello. El poderoso industrial del cava se oculta de la foto en una suntuosa masía y el futbolista es sorprendido en una taberna marinera sin que nadie supiese que estaba allí. A diferencia de los incondicionales de los veranos en Ibiza o Marbella, lugares que se convierten en un colorido escaparate humano, quien se pierde en las calas de Girona, se pierde de verdad. No quiere que le encuentren. Por eso no hay una urbanización exclusiva ni un pueblo que destaque sobre los demás en calidad vacacional. Todos son únicos.

En la Costa Brava, donde se encuentra el mejor restaurante del mundo (antes elBulli y ahora, el Celler de Can Roca), persiguió Frank Sinatra a Ava Gardner, la Reina Letizia hizo de mochilera, se enamoraron Velencoso y Corberó y aún hoy se cantan habaneras a pie de playa. También tiene su propia Fashion Weekend y se celebra el evento más hipster de todo el verano, el White Summer de Pals. Si quiere gozar de un verano inolvidable sin que le encuentren, este es su destino.

Cuerpos vips de la costa catalana

No sabemos si a una edad tan respetable como la de la Carmen Cervera podemos hablar de cuerpos vip, pero si tenemos en cuenta que fue Miss España en 1961 y llegó a participar en Miss Universo, y que ostenta título de baronesa creemos que cumple a la perfección. Si se acerca a la playa sin tocar yate, será en Sant Feliu de Guíxols.

Cuando Tita era poco más que una niña, Ava Gardner ya se enamoró del lugar como prueba el busto que tiene dedicado en Tossa de Mar. Allí rodó Pandora y el holandés errante y allí la cortejó un obsesionado Frank Sinatra. Es la misma Tossa de Mar donde nació Andrés Velencoso y adonde sigue acudiendo, ahora ya sin Kylie Minogue. A veces juega al despiste en Instagram para que adivinemos en qué cala se esconde con Úrsula Corberó. En la bahía de Roses los paparazzi han captado a Javier Bardem y Penélope Cruz. Las presentadoras Susanna Griso y Alejandra Prat y familia, así como el expresidente del Barça Joan Laporta se dejan ver en S’Agaró.

La Costa Brava es la cornisa mediterránea preferida de algunos de los más señalados famosos catalanes para casarse. El blaugrana Xavi Hernàndez escogió el Castillo de Blanes para dar el sí a Nuria Cunillera; Aldo Comas y Macarena Gómez se casaron en San Miquel de Fluvià, muy cerca de la casa de Jacobo Siruela y Marc Clotet lo hizo con Ana de Armas en secreto, pero en esta zona. Todos ellos se dejan caer por sus calas.

Playas, calas y 'beach clubs'

Aiguablava, en Begur, es, tal vez, el más completo rincón natural de la Costa Brava. Esa pequeña cala, de unos 75 metros, dispone de duchas, servicio de vigilancia, rampas de acceso, aparcamiento, chiringuito y varios restaurantes. También de un Parador de Turismo que se ha unido al restaurante Mar i Vent. En realidad es mucho más que un restaurante: se trata de un beach club que abrió hace tres años y ya se ha consolidado como uno de los más deseados de la zona. Su alma máter, de Javier de las Muelas –dueño de Gimlet y Dry Martini Bar de Barcelona– está extendiendo un imperio de clubes por medio mundo.

De S’Agaró nos quedamos con la cala Sa Conca y, sobre todo, con su Camí de Ronda: una circunvalación que rodea la población por el exterior y desde la que se puede saborear, caminando, todo el aroma del Mediterráneo entre vegetación exuberante. En Calella de Palafrugell, el pueblo de las habaneras por excelencia, está la pequeña cala Es Canadell, la preferida de Judit Mascó y en Cadaqués, además de que hay que ir obligatoriamente (un must es visitar la casa-museo de Salvador Dalí en Port Lligat) quizá se encuentre usted a los Tous, a Telma Ortiz o a Alejandro Amenábar. Si no, al menos piérdase por las calles, paseo y callejuelas de unos de los pueblos más bonitos del mundo.

En el término de Palamós, donde Truman Capote se retiró para escribir, destaca cala Estreta, una de las más recónditas y encantadoras de toda la costa de Gerona. No hay una sola construcción humana alrededor. También en Palamós, aunque en su paseo marítimo, se encuentra el beach club La Corniche, ubicado en el centenario hotel Trias. No espere ver camas balinesas sino decoración mediterránea y ambiente marinero, aunque sí una extensa carta de cócteles exóticos. En Santa Cristina d’Aro, la cala del Senyor Ramon, en realidad una playa aunque de difícil acceso, permite la práctica del nudismo.

Recomendamos dos parajes naturales por encima de los demás: el Cap de Creus y las islas Medes, un archipiélago completamente salvaje que constituye la reserva de flora y fauna marinas más importantes del Mediterráneo occidental. Es un paraje ideal para hacer submarinismo. Desde la playa de L’Estartit se puede alquilar una excursión en ferry con suelo de cristal para admirar sus espectaculares fondos. Si hemos de escoger una playa, nos quedamos con la de Sant Pere Pescador: inmensa, salvaje y donde puede practicarse kite surf y otros deportes náuticos.

En Roses, déjese caer por el hotel Vistabella, un 5 estrellas de lujo donde se han alojado Eva Longoria, Leo Messi, Penélope Cruz y Javier Bardem. Tiene spa, terraza solárium con jacuzzi, varios restaurantes (Els Brancs, con estrella Michelin) y un pantalán propio por si llega en barco. Pero nos interesa, particularmente, por su beach club, el más exclusivo de la Costa Brava. El Pirata organiza cada verano la famosa Champagne Party y cada jueves, la fiesta del bogavante.

¿Dónde viven los vips?

En la Costa Brava no podemos encontrar un solo complejo residencial de lujo. Ni varios o una zona concreta. Aquí lo exclusivo se desparrama por la costa escondiéndose del fotógrafo todo lo posible y la gente de dinero vive oculta en masías suntuosas o casas señoriales de las que nadie o casi nadie ha oído hablar. Tita Cervera construyó Mas Mañanas en la urbanización Punta Brava de Sant Feliu de Guíxols estando casada con el actor Lex Barker, el Tarzán más famoso después de Johnny Weissmuller. Hoy es la principal sede del conjunto de residencias Thyssen. Hasta Borja, su hijo, tiene allí domiciliada Caribbean Breeze, una de sus sociedades.

Otro de los más ilustres habitantes de la zona, con casa en el interior aunque a 20 minutos en coche de la playa, es Jacobo Fitz-James Stuart, conde de Siruela. Se instaló con Inka Martí en la comarca de l’Empordà hacia 2003, en la masía Mas Pou (Vilaür), y desde allí edita libros para minorías bajo los sellos Siruela y Atalanta.

Tiene casa en Blanes –la Costa Brava comienza precisamente ahí y sube bordeando toda la provincia de Girona– la 'popular' Alicia Sánchez-Camacho y la familia de Gerard Piqué. Allí se refugiaba el fubolista con Shakira mientras reformaban su domicilio de la Ciudad Diagonal. Esa lozana pareja son los famosos más jóvenes –junto con Borja y Blanca Cuesta– que vamos a ver en la zona. Otros, como Andrés Velencoso, juegan al escondite. Es natural de Tossa de Mar y su novia, Úrsula Corberó nadaba de niña en Palamós. El piloto Dani Pedrosa y el ya exblaugrana Xavi Hernández tienen casa en Sant Antoni de Calonge; Sete Gibernau, en Pals y las raíces familiares de Judit Mascó veranean de toda la vida en Calella de Palafrugell. Por allí tiene también un chalé el exportero del Barça Víctor Valdés.

Duran i Lleida saca la barca en Begur mientras que en Cadaqués tiene residencia la familia Tous –a la que han invitado a veces a Telma Ortiz–, el empresario Javier de la Rosa y el presentador Manel Fuentes. En la vecina Roses, Dyango y Sergi Arola, mientras que por Platja d’Aro se dejaba ver Michael Schumacher. En S’Agaró es fácil encontrarse con Joan Laporta y allí está una de las casas de la discordia de los Sánchez Vicario.

¿Dónde sacian el apetito?

Cerró sus puertas elBulli, en Cala Montjoi (Roses) y por increíble que pueda parecer, la oferta gastronómica de la zona no se ha resentido. Sí falta uno de sus mitos, pero no se ha perdido la calidad. Alí sigue estando el mejor restaurante del mundo. Hoy es el Celler de Can Roca y de sus mesas a la playa más próxima, en L’Estartit, hay menos de 40 kilómetros. ¿Lo incluimos? Creemos que sí, pues si usted se acerca a una cala inolvidable quizá quiera probar un restaurante incomparable.

Muy cerca, en Begur, nos quedamos con dos: Café Begú, un speakeasy gourmet ubicado en una casa de estilo indiano, y el chiringuito Toc al Mar, en la playa de Aiguablava y al que acuden nada menos que Joan Roca y Carme Ruscalleda. En S’Agaró encontramos la Taverna del Mar, una marisquería im-pres-cin-di-ble, que este año tiene a los fogones al chef Dani Soto –de Saüc y Moments– y en la que rodó Liz Taylor. A cargo de la cuarta generación de la familia Ensesa, propietarios del Hostal La Gavina. En este 'hostal' (ese es su nombre propio aunque sea un 5 estrellas Gran Lujo) han pernoctado desde Mike Oldfield al rey Juan Carlos pasando por Robert de Niro, Julio Iglesias y Sean Connery. Este año ha incorporado al chef Romain Fornell; visitar su restaurante, Garbí, se hace perentorio. Debemos mencionar también Mas Torrent, una construcción señorial del siglo XVIII con restauración Relais & Chateaux y el spa más famoso y exclusivo de la Costa Brava. No se pierdan sus jardines.

Para irse de copas la oferta es enorme, pero si hemos de escoger el mismo lugar que la jet, Les Teules (en Pals). Allí se sirven gintonics, se ven desfiles de moda y hasta organizan torneos de golf. Su terraza chill out contrasta maravillosamente con la piedra vieja de sus paredes. Es de lo más pijo de toda la Costa Brava junto con Mas Sorrer Jazz Bar (Torroella de Montgrí), con su propio Festival Internacional de Jazz y de Cortometrajes. Para una copa con el agua lamiéndole los pies, acérquese al Xiringuito del Pas, en Port de la Selva.

Golf

Las comarcas de Girona ofrecen una incomparable oferta de golf todo el año: junto al mar, en valles o en zonas de montaña y para todas las categorías y destrezas. Cinco de esos campos están entre los 50 mejores de Europa según la publicación especializada Top 100 golf courses. Además, no hay un hotel de lujo en la Costa Brava más lejos de 15 minutos en coche de un campo de golf. Algunos, incluso –léase Torremirona, Platja de Pals o Peralada– forman parte de un resort de altísima calidad. Para los novatos hay también oferta de par 3 y pitch & putt. En total, entre Girona y Pirineos hay 13 clubes de golf.

Comenzamos por el PGA Catalunya Resort (en Caldes de Malavella), que el año pasado acogió el Open de España. Muchos creen que es el heredero del imbatible Club de Golf Valderrama de Sotogrande, indiscutido entre los mejores de Europa. Consta de dos campos de 18 hoyos: el Stadium Course (en 2014 World Golf Awards le dio el primer premio de España y quinto de la Europa Continental), de 6.500 metros, y el Tour Course, que ofrece un desafío constante y hoyos espectaculares. Ofrece también apartamentos, villas, parcelas y un hotel de 149 habitaciones para pasar allí días de descanso exclusivos. Sus restaurantes son Bistrot de la Casa Club, Tast Brasserie y Quimera. Es candidato a sede de la Ryder Cup 2022.

El veterano Golf Platja de Pals, abierto en 1966 para potenciar la zona de l’Empordà, se encuentra en un paraje excepcional a corta distancia de L’Estartit y L’Escala. Por eso es de los más visitados de la Costa Brava. El campo tiene 18 hoyos (par 73) y 6.222 metros con trazado técnico de estilo británico. Fue diseñado por Sir F.W. Hawtree.

Para disfrutar del golf, la historia y la gastronomía, el ideal es Golf Peralada. Su recorrido es de 18 hoyos con una distancia de 6.071 metros, par 71 y 4 tees de salida para cada hoyo. Consta de escuela de golf y hotel con spa en el que podrá probar un tratamiento con vino de las bodegas añejas. Y si viaja con niños y el golf es una actividad complementaria, le recomendamos La Costa Beach & Golf Resort, con hotel de 120 habitaciones todas con vistas al mar, la piscina o el campo de golf. Tiene piscina tropical, beach club y puede contratar deportes náuticos.

¡No sin mi ancla!

La Costa Brava dispone de 17 clubes náuticos y puertos deportivos, más de 30 centros de submarinismo, escuelas de vela y windsurf y tres parques naturales a lo largo de 200 km. El club de Vela de Blanes, fundado en 1943, destaca por su vocación deportiva. Del 3 al 6 de septiembre se celebrarán los Campeonatos de España de la clase estratégica juvenil Europa y la clase Olímpica Finn. También el Campeonato de Cataluña de la clase Finn. Fue el escogido por Carla Royo-Villanova para su trofeo Carla Bulgaria Rosas Beauty.Tiene escuela de vela y organiza también regatas 420 y Optimist. Las tarifas de amarre las presupuestan a vuelta de correo.

El Club Nàutic Estartit, en la población homónima, dispone de 680 amarres para embarcaciones de 4 m hasta 25 m de eslora. Sus instalaciones ocupan una superficie de 15.945 m² con aparcamiento para vehículos, grúa, travelift, rampa, muelle de servicios, punto de recogida de residuos y club social.

Palamós, una de las localidades más importantes de la Costa Brava, dispone de dos puertos. El puerto deportivo Marina, inaugurada en 1992, recibió al año siguiente la Bandera Azul de la UE y hoy dispone de 866 amarres para embarcaciones de 7 a 30 m de eslora. Los precios van de los 105 euros diarios (o 1.500 euros por quincena) para embarcaciones de 12 m en adelante a los 417 (4.500 por quincena) para las más grandes. Se distingue de otros puertos de su categoría en su política medioambiental. El otro es el Club Nàutic Costa Brava, fundado en 1946 y desde entonces importante motor turístico de la localidad, dispone de 252 amarres para naves de 5 a 25 m. Hoy, su Club de Vela organiza cada año la Christmas Race. Aquí puede consultar sus tarifas.

La Marina de Empuriabrava es realmente una ciudad en sí misma: tiene una red de 23 km de canales navegables y aeroclub, y está considerada la Marina residencial más grande del mundo: 5.000 amarres para embarcaciones de hasta 36 m, 700 para visitantes. Casi todas las casas tienen acceso privado y directo a un canal. Es tan fácil como salir de casa para dar una vuelta en bici, pero en yate. En temporada alta y en el puerto principal, una embarcación de 12 m de eslora paga 1.550 euros de alquiler y una grande, de hasta 25 m, 4.008 euros. Puede consultar aquí el resto de tarifas.

Charlamos con Judit Mascó

Resulta muy difícil presentar a Judit Mascó sin caer en el tópico. Por eso recurrimos a la historia y a los hechos: siendo una de las modelos españolas más reconocidas mundialmente, ahora y antes, no llegó a desbancar a las Campbell, Schiffer o Evangelista seguramente porque renunció a intentarlo. Prefirió no sentirse sola en París y en Milán. Una portada de Sports Illustrated (en 1990) la catapultó a la fama y desde lo alto, más por corazón que por vértigo, decidió volver a casa. Con los suyos. Siempre que se le pregunta contesta lo mismo. “Hice lo correcto, no me arrepiento”. Con los suyos lleva toda la vida veraneando en el Mediterráneo, también en Menorca, pero su infancia está ligada, sobre todo, a la Costa Brava. Ella es nuestra madrina en este viaje a lo mejor de Cataluña.

¿Desde cuándo veranea en la Costa Brava? O mejor aún, ¿cuál es su recuerdo más antiguo?

La Costa Brava es uno de los lugares preferidos de mis padres para pasar unos meses de paz y tranquilidad. Y ese es el motivo por el que con mucho placer les hacemos visitas de fin de semana siempre que podemos. Calella de Palafrugell es uno de los rincones más bonitos del litoral; de postal, diría yo. Es como un cuadro perfecto donde se combinan armoniosamente arquitectura, naturaleza y tranquilidad. Ideal para ir en familia. ¿Lo que más me gusta de Callella? Las coloridas embarcaciones de los pescadores y toda la tradición de las famosas habaneras.

¿Qué cree que la hace distinta de otros lugares a los que puede ir el españolito medio?

Creo que tanto los pueblos como los paisajes, playas y calas de la Costa Brava son de una belleza encantadora. Hay rincones que enamoran y pueblos sorprendentes con historia y solera. Seguramente sea imposible visitarlos todos en un solo viaje. Paisajes de pinos y acantilados y playas cristalinas con el agua siempre a una temperatura que refresca. Recomiendo un paseo maravilloso que consiste en salir de Calella de Palafrugell y dejarse llevar por el camino de ronda que te lleva desde Llafranc hasta la playa del Golfet, junto a Cap Roig. La gruesa arena de sus playas y las pequeñas calas cerradas hace que el agua se vea totalmente transparente. Idílico en pareja, en familia o a solas.

Si se pierde en una cala esa es...

En la minúscula playa del Canadell (en Calella) franqueada por bellas casas de finales del siglo XIX y sus voltes, las arcadas frente al mar. Aunque si realmente quiero perderme de verdad, en algún mágico rincón de alguna cala recóndita. O mejor anclada desde un barco frente a las rocas de la parte más alta del Alt Empordà, Cap de Creus y su salvaje paisaje del parque natural de Cap de Creus. Es impresionante, ¡y allí sí que no te encuentras a nadie!

Recomiéndenos un par o tres de restaurantes tomando como criterio la ubicación, calidad del producto y algún momento bonito que haya vivido en ellos

Una de las cosas que más gustan de Calella de Palafrugell es el buen ambiente. Se trata de un lugar muy bien conservado goza de unas noches tranquilas, ¡todo un lujo en un lugar de costa! Es un buen lugar para descansar pero también para comer bien. Para hacerlo frente al mar, recomiendo el restaurante con encanto La Blava: por criterio de ubicación es mágico, ya que de noche y con las barquitas en el mar como única vista, es para enamorarse. Pero si quieres mi restaurante preferido dentro del pueblo de Calella de Palafrugell, por su calidad es Sa Jambina: productos de primera cocinados con maestría. Es un sitio muy acogedor y el personal es muy simpático. Su carta de vinos es excelente, te ayuda su sumiller... Es un auténtico placer comer allí. ¡Lo recomiendo mucho! Allí disfrutamos celebrando nuestro encuentro familiar con mis padres cenando toda la familia hace solo unos días.

¿Y sus bares de copas preferidos? ¿Dónde se ha tomado el mejor cóctel y dónde está el mejor atardecer?

Tomarse un té o una copa en Calella de Palafrugell puede ser bonito en el mirador Tres Pins del Hotel La Torre, ya que al encontrarse en lo alto de la costa se está siempre fresquito, bajo los pinos, con bonitas vistas de la playa del Canadell y a todo el Mediterráneo tras ella. Para fundirse en un atardecer de película a pie de playa, justo donde cae el sol, hay un sencillo y pequeño chiringuito de Port de la Selva, el Xiringuito del Pas, que tiene música en vivo, soul o reggae. Tomarse un mojito o un cóctel allí es para vivirlo. Está abierto sólo en temporada alta y se encuentra cerca del club náutico de Port de la Selva, justo al extremo contrario de la playa que encontramos al entrar al pueblo.

¿Cómo sería un día completo de vacaciones en su familia?

Suelen ser bastante completos, llenos de actividades y amigos, para poder contentar las distintas edades de nuestras hijas. En grupo de amigos solemos pasarlo todos bien. Aun así, siempre intento poder pasar algún día más tranquilo, para descansar de verdad y no hacer nada. Solo disfrutar de la tranquilidad y del aquí y ahora.

¿Ser famosa se ha supuesto alguna vez un inconveniente para relajarte? Me refiero a admiradores y autógrafos, la moda del selfie, los paparazzi...

Desconecto bien de mi trabajo, y siento como en general la prensa me respeta, y la gente que se me acerca lo hace discretamente, con ilusión y amabilidad.