El personal vestido de novia de Blanca Padilla para su boda en Menorca: delicada originalidad

Blanca Padilla, una de nuestras modelos más internacionales, ha podido cumplir su sueño y el de su pareja, Alejandro García. Tras más de un año de preparativos, ambos se han dado el ‘sí, quiero’ en un precioso enlace que ha sido celebrado en la isla de Menorca.

Rodeada de mucho secretismo, han sido las redes sociales de algunos invitados, una vez más cuando el hermetismo se impone en este tipo de eventos, las que nos han permitido ver algunos detalles de esta boda en la que los novios han estado arropados por numerosos familiares y amigos.

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Virginia García

En un bonito espacio al aire libre con amplios jardines, aprovechando la buena temperatura de finales de mayo, los novios y los asistentes al enlace han vivido románticos momentos y una velada en la que todo fue dispuesto con mucho mimo por la pareja, que contó con la ayuda del equipo de Brich Events, compuesto por Natalia y María, wedding planners desde hace más de 5 años y que trabajan en Menorca como especialistas en bodas rustic chic.

Juntos lograron crear la atmósfera soñada por los novios, donde la madera, las velas y las flores tuvieron una gran presencia en la decoración del espacio en el que todos disfrutaron de la cena y la posterior fiesta.

Para este día tan señalado de su vida, Blanca Padilla apostó por un vestido de novia muy personalizado y original. El look estaba compuesto por un top tipo corpiño, de color crudo, con escote palabra de honor, sobre el que colocó una ligera tela de tul transparente con mangas largas acampanadas. Lo combinó con una falda recta de tul con volúmenes asimétricos en la zona baja y cola.

Para el peinado y el maquillaje, la top model optó por la sencillez y la naturalidad. Combinó su rostro poco recargado de productos con un peinado que consistió en un moño tirante con raya en medio y altura media.

No faltó durante la celebración un romántico baile de los novios ante la atenta mirada de sus invitados ni un paseíllo de la pareja a través de las mesas largas donde los comensales disfrutaron del banquete.

“Hemos pensado no hacer una boda muy grande y que se sienta como una reunión de amigos y familiares y un poco salirnos de la típica boda muy estricta. Queremos que sea algo relajado, como cuando organizas una cena grande con amigos. Eso es lo que más ilusión me hace”, confesaba Padilla en Vanitatis antes del enlace. A juzgar por las imágenes, no cabe duda de que finalmente consiguió su propósito.