Ari Behn no ha recibido sepultura cuatro meses después de su suicidio: las razones

El pasado 25 de diciembre, día de Navidad, la familia real noruega vivía un duro golpe. Ari Behn, el exmarido de la princesa Marta Luisa, decidía quitarse la vida a los 47 años después de atravesar una dura depresión que no pudo superar. Fueron los propios padres del escritor los que anunciaron la muerte de su hijo, cuyo funeral se celebró el 3 de enero en la catedral de Oslo, contando con la presencia de la familia real al completo así como de representantes políticos.

Una ceremonia muy especial en la que su hija mayor, Maud Angelica, se convirtió en la gran protagonista al pronunciar un emotivo discurso en el que resaltaba la importancia de la buena salud mental. Los padres de Ari, Olav y Marianne, han querido siempre hablar públicamente y sin tapujos del suicidio de su hijo. Incluso revelaron que fue el padre del escritor quien encontró a este sin vida en su apartamento de Lommedalen, donde estaba pasando las fiestas acompañando a su vástago.

Ahora, los padres de Ari han revelado una nueva información acerca de su hijo, y es que, cuatro meses después de su muerte, todavía no descansa en paz. El exmarido de Marta Luisa fue incinerado a los pocos días de su funeral y la urna, según su propia voluntad, debía ser depositada en una tumba en el cementerio de Nuestro Salvador, en Oslo, donde se encuentra también el pintor Edvard Munch o el poeta y dramaturgo Henrik Ibsen.

Sin embargo, a día de hoy, la familia de Ari no ha podido cumplir su última voluntad de descansar en ese cementerio. En Noruega es obligatorio que antes de seis meses después de la incineración las cenizas sean enterradas. Los Behn tenían previsto que esto se hiciera a principios de primavera con una ceremonia íntima y familiar. Pero no ha podido ser. ¿El motivo? El coronavirus.

El Instituto Nacional de Salud de Noruega ha recomendado que no se realicen este tipo de rituales en plena crisis por el covid-19. "Desafortunadamente, debido a la crisis del coronavirus, se ha pospuesto el entierro de las cenizas. Pero esperamos poder reunir a la familia cuando la situación sea favorable", han asegurado Olav y Marianne Behn a 'Se og Hør'.

El mismo medio también se ha puesto en contacto con la secretaria de Marta Luisa para conocer más acerca del tema. "La princesa no es se encarga de esto. Son los padres de Ari quienes tienen la propiedad", ha declarado Carina Scheele Carlsen. Y es que, como es normal al estar divorciados, la hija de Harald y Sonia se ha desentendido del tema, aunque sigue siendo muy cercana a los padres de Ari, abuelos de sus tres hijas, Maud, Leah y Emma.