El tierno gesto de Kate Middleton con Carlos de Inglaterra en el funeral del duque

Si hay algo que caracteriza a la familia real inglesa es su sentido del deber, lo que se traduce en una imagen pública protocolaria, rígida, de sentimientos muy controlados y con una latente frialdad. Pero las emociones no siempre se pueden (ni deben) controlar y el funeral del duque de Edimburgo fue un claro ejemplo. Mientras Isabel II mantenía una vez más la compostura durante el último adiós al amor de su vida, sentándose sola en la capilla de San Jorge, su primogénito, Carlos de Inglaterra, no reprimía sus lágrimas al despedir a su padre. Esta fue una de las imágenes más emotivas, a las que ahora se suman otras que muestran un tierno gesto de Kate Middleton con el príncipe de Gales y que dejan clara la especial unión que existe entre nuera y su suegro.

En las imágenes se ve cómo la duquesa de Cambridge, a la salida de la ceremonia religiosa, se acerca al príncipe de Gales y no duda en ofrecerle unas dulces palabras de consuelo y también un cariñoso beso en la mejilla. Algo muy raro de ver… Ella también parecía muy emocionada, pues adoraba al abuelo de su marido. Que a nadie le alarme esta cercanía en plenas restricciones de la pandemia del covid, primero porque parece que todos los Windsor se realizaron una prueba PCR antes del funeral, que obviamente dio negativo, y segundo porque tanto Carlos como su mujer, Camilla, ya han sido vacunados.

La relación de la duquesa de Cambridge con su suegro siempre ha sido excelente, de hecho fue ella quien ayudó a limar ciertas asperezas entre el príncipe Guillermo y su padre. Así pues, Kate es un importante punto de cohesión en la familia, lo que hace que todos, especialmente Isabel II, la adoren. Seguro que ella ha tenido mucho que ver en la esperada reunión de más de dos horas que mantuvo su marido con su hermano, el príncipe Harry, y con Carlos de Inglaterra tras el funeral del duque de Edimburgo. Según publica 'The Sun', los tres intentaron solucionar sus diferencias y al menos llegaron a algunos acuerdos.

Parece que el duque de Sussex permanecerá en Londres para pasar el cumpleaños de su abuela, la reina Isabel, el próximo 21 de abril. Además, Harry también se habría comprometido a estar presente en la inauguración de la estatua conmemorativa de Lady Di, prevista para el mes de julio, fecha en la que se hubiera celebrado el 60 aniversario de la princesa. Todo indica que el tsunami provocado por la entrevista de los duques de Sussex con Oprah Winfrey quedará archivada en sus memorias y llegará la paz, tal y como hubiera deseado el duque de Edimburgo.

Celebrado el funeral y entierro de Felipe Mounbatten, los Windsor mantendrán el luto durante dos semanas y viven su dolor en la intimidad. Isabel II pasó el domingo sola en el castillo de Windsor y se relajó paseando a sus perros por los jardines. Parece que no asistió al oficio religioso que tuvo lugar por la mañana, al que sí acudieron sus hijos menores, el príncipe Andrés y el príncipe Eduardo junto a su esposa, Sophie de Wessex. "La reina es el ejemplo perfecto de mantener la calma y seguir adelante, así que continuó con sus costumbres de domingo", escriben en 'The Sun'.