La reina Camila reaparece con el pie vendado en las islas del Canal: este es el motivo
En su segundo día de visita por las islas del Canal de la Mancha, la esposa del rey Carlos ha lucido un vendaje en el pie derecho y se ha ayudado de un paraguas para caminar
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Los reyes británicos se encuentran desde este lunes de visita en las islas Anglonormandas, continuando con su agenda estival sin que la enfermedad de Carlos III la merme, con parada en diferentes puntos. Y este martes, ya sin los contratiempos de la víspera, ha sorprendido la imagen de Camila, que ha reaparecido en las islas de Canal con un pie vendado. El motivo, según los corresponsales desplazados para seguir la visita real, un esguince que sufría el día anterior.
La imagen acaparaba todos los focos, ya que además la reina se apoyaba en un paraguas para poder caminar. La agenda del día se presentaba intensa, pero ni el esguince ni el vendaje perturbaron el itinerario o su sonrisa, saludando y recibiendo alguna que otra felicitación del público, ya que justo este miércoles cumple 77 años.
De momento, Buckingham no ha dado una información oficial sobre esta lesión visible de la reina Camia, pero han sido varios medios británicos los que han confirmado que sufrió el daño el día antes, durante esta visita a las Islas del Canal, al torcerse el tobillo en Jersey, otra de las islas que formaban parte de este pequeño tour real por la zona.
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Gracias a las imágenes tomadas durante la jornada, hemos podido ver que el vendaje no pasaba precisamente desapercibido. La reina Camila lucía un dos piezas de vestido y chaqueta en azul klein, uno de los colores más abundantes de su armario. Un diseño muy habitual en ella, de largo midi, con ribetes y puños bordados en el mismo color.
Si ya de por sí la reina británica no suele llevar tacón alto y siempre lleva zapatos cómodos, la lesión en el pie derecho ha sido aún mayor motivo para no llevar muchos más centímetros. Su elección, un icónico modelo bicolor, en tono nude y con la puntera negra.
Pero si algo destacaba por encima del resto, además de ese vendaje, era el impresionante collar de perlas que lucía en el cuello, un modelo de cuatro vueltas con cierre de brillantes en la parte delantera. Lo ha combinado con unos pendientes de diamantes y zafiros, no solo a juego con su diseño de Fiona Clare, sino también con un clavel del mismo tono azul que el rey Carlos llevaba en su solapa.
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Como decíamos, no ha faltado un paraguas en el atuendo, que además le ha servido a Camila como apoyo para no resentirse del dolor y poder asistir a los diferentes actos que había previstos en la isla de Guersney, como la apertura del Parlamento, un encuentro con niños o un paseo por un mercado de productos de la zona, donde no han dudado en probar la comida y dar un sorbo a diferentes bebidas, con el correspondiente brindis.
Ese paraguas se hacía imprescindible, después de que la visita del lunes a Jersey estuviese marcada por una intensa lluvia. Este martes, en cambio, el sol ha acompañado a los reyes británicos, pero Camila prefería no prescindir de él para tener una seguridad extra a la hora de caminar.
La esposa de Carlos III se une así a Letizia en esa desafortunada lista de 'royals accidentadas'. Fue en mayo cuando conocimos que un accidente doméstico había provocado a la Reina una fractura en los dedos del pie, lo que le ha obligado a llevar zapatillas de deporte durante varias semanas. Ahora, sin estar recuperada del todo, seguimos viendo que prescinde de los tacones más altos de su zapatero para dar paso a la absoluta comodidad.
Los reyes británicos se encuentran desde este lunes de visita en las islas Anglonormandas, continuando con su agenda estival sin que la enfermedad de Carlos III la merme, con parada en diferentes puntos. Y este martes, ya sin los contratiempos de la víspera, ha sorprendido la imagen de Camila, que ha reaparecido en las islas de Canal con un pie vendado. El motivo, según los corresponsales desplazados para seguir la visita real, un esguince que sufría el día anterior.