Ramón Campos, el hombre tras El caso Asunta: del melodrama de época a la serie del año

Desde el estreno en Netflix de ‘El caso Asunta’, el pasado 26 de abril, la serie ya se ha convertido en una de las producciones del año.

Los motivos son varios. En primer lugar, porque aborda un caso de asesinato que conmocionó a toda la sociedad, el de una niña a manos de sus padres, una realidad que genera muchas preguntas con respuestas que resultan incomprensibles en el espectador y que hacen que queramos saber qué empuja a alguien a terminar cometiendo tal atrocidad.

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Después está la ejecución minuciosa, fiel a la realidad de los hechos, de cada capítulo, con un elenco sublime (con Javier Gutiérrez, Tristán Ulloa y María León, entre otros) en el que Candela Peña ha destacado y sorprendido al público con su increíble interpretación de Rosario Porto.

Una de las personas detrás de ‘El caso Asunta’ y gran responsable de su éxito es Ramón Campos, corresponsable de Bambú Producciones y productor de la serie.

Nacido en Noia en 1975, Ramón Campos, guionista de cine y televisión que comenzó sus primeros pasos en la televisión gallega, es hoy uno de los nombres más importantes de la industria audiovisual. La trayectoria profesional de Campos lleva años vinculada a producciones que han conseguido atraer al público.

Tras cofundar junto a su pareja, la también gallega Teresa Fernández-Valdés, la productora Bambú Producciones en 2007, Campos se propuso producir él mismo sus propias series para ser lo más fiel posible a sus creaciones. Hoy, Bambú Producciones es una empresa muy presente en la industria audiovisual de nuestro país. En 2011 llegó uno de sus primeros grandes éxitos a nivel nacional e internacional. Fue con la serie ‘Gran Hotel’. Después llegarían ‘Velvet’ (2014), 'Las chicas del cable' (que fue la primera serie original de Netflix en España, en 2017) o 'Fariña' (2018), entre otras.

Su último gran proyecto, ‘El caso Asunta’, va camino de convertirse ya en la serie del año y lo hace con cambios en la empresa de Campos que llegaron hace un año, motivados por circunstancias personales. El fin de su matrimonio con Teresa Fernández-Valdés, supuso en abril del año pasado que ella abandonara su cargo en Bambú Producciones.

Sin embargo, ambos percibieron que el ‘True crime’, un género que siempre ha interesado a Campos, cobraría en el ‘El caso de Asunta’ otra dimensión, pues no solo pone de manifiesto el comportamiento atroz de unos padres y la complejidad de la investigación policial, sino también el tratamiento mediático del caso y cómo éste pudo impactar en la sociedad.

El crimen de Asunta afectó de lleno a Campos, tal y como él mismo confesó en El Confidencial. Su localidad natal, Noia, se encuentra a pocos kilómetros de donde se cometió el asesinato. El productor fue testigo del impacto que la muerte de Asunta originó en la población de La Coruña y en parte de una generación de críos, que al conocer la noticia a través de los medios de comunicación, se llegaban a preguntar si sus padres serían capaces de acabar con sus vidas. La propia hermana de Campos, profesora en La Coruña, fue testigo de esta inquietud infantil que pudo observar en algunos alumnos.

A Campos, toda esta realidad paralela al crimen en sí, le interesaba mucho. Tanto que en 2017 se propuso crear un documental sobre el caso. Durante la realización del mismo, se encontró con mucho hermetismo por parte del entorno de los implicados. Pero su buen hacer y el respetuoso y riguroso tratamiento que le dio a dicha producción generó sus frutos.

Campos comenzó a recibir nueva información, más detalles sobre lo sucedido, que no habían sido incluidos en el documental y que sí ha podido utilizar en la exitosa serie, la cual alcanza cada vez más brillo en un momento en el que la protagonista de otro terrible caso, Patricia Ramírez, la madre del niño Gabriel, asesinado a manos de la pareja del padre del menor, Ana Julia Quezada, ha señalado a creadores y productores de contenido audiovisual por querer plasmar el caso de su hijo en la pequeña pantalla, algo que ha criticado duramente. Asegura sentirse indefensa ante lo que considera un intento de lucrarse a costa de hacer espectáculo a partir de la tragedia familiar que ella vivió.

Estas acusaciones en pleno éxito de la serie ‘El caso Asunta’ hacen que muchos se pregunten sobre el posible conflicto moral que ha podido surgir en la mente de Campos y de otros productores.

En una reciente entrevista concedida a ‘verTele’, Ramón Campos abordaba este asunto sin tapujos asegurando que “teníamos claro que no queríamos hacer sufrir a nadie ni provocar más dolor, sólo aportar luz”. Añadió que “mi norma es que, el día de mañana no pueda no tener respuesta cuando mis hijas puedan preguntar por qué hice algo. Es una cuestión ética”. Explicó que “es difícil equivocarse”, al tratar un asesinato tan reciente en la historia criminal de España, si se hace intentando minimizar ese dolor.