La infanta Cristina se repartirá estas Navidades entre Madrid y Vitoria
Ha sido un año duro para la infanta Cristina y la familia de Iñaki Urdangarin. Y seguirá siéndolo por mucho que intentan poner su mejor cara
Ha sido un año duro para la infanta Cristina y la familia de Iñaki Urdangarin. Y seguirá siéndolo por mucho que intenten poner su mejor cara ante el público. El ingreso del exduque de Palma en prisión ha noqueado a todos y estas Navidades, las primeras sin su presencia, servirán para mostrar más unión que nunca. La infanta Cristina ha vuelto a casa, como el anuncio de turrones, y así se materializará en fiestas, cuando la veremos entrar en Zarzuela para estar con su familia. Pero que nadie se lleve a engaño: los Urdangarin seguirán teniendo peso en su agenda y Vitoria sigue marcada en rojo este diciembre.
"Es impensable que Cristina no vaya a Vitoria este año", dicen a Vantatis fuentes cercanas a la Infanta. Y así será. Lo más probable es que viaje a España unos días antes de las fiestas, puesto que las clases de los dos hijos pequeños Urdangarin de Borbón terminan el 14 de diciembre y no vuelven a empezar hasta el 4 de enero. Así que tendrán tiempo de repartirse entre ambas familias.
Lo más probable es que pasen la Nochebuena en Zarzuela, como hacían antes de que la familia se rompiera y los Urdangarin fueran apartados. Y después puede viajar a Vitoria para pasar el día de Navidad o (lo más probable) esperar y pasar la Nochevieja en Vitoria. Es así como era la tradición familiar. Lo que está claro, según detallan sus amigos, es que no puede ni quiere dejar de lado a la familia que le ha dado todo su apoyo durante esta larga travesía en el desierto. "No se entendería de ninguna manera que ahora que Iñaki no está y que su familia [la real] la ha vuelto a acoger, ella desaparezca. Los Urdangarin lo han sido todo durante mucho tiempo", insisten.
Los 55 de doña Elena
La infanta Elena, además, cumple 55 años el 20 de diciembre, momento que pasará con su hermana y su familia sin ninguna duda. Porque la primogénita de los Reyes eméritos ha sido su apoyo férreo y constante durante todos estos años. Incluso viajaba a Vitoria para estar con su hermana y la familia política de esta. Con todo, en el momento en el que doña Cristina ha visto cómo la puerta de Zarzuela se volvía a abrir para ella y sus hijos, no se lo ha pensado ni un momento. E incluso ha dejado algo de lado a los Urdangarin, a quienes ve ahora menos que antes del ingreso de Iñaki en prisión.
Las útlimas Navidades que la Infanta pasó en Zarzuela fueron en 2013. Al año siguiente, en 2014, con su hermano ya coronado como Felipe VI, se inició el conocido cortafuegos que la ha mantenido en la distancia hasta estos días. No fue hasta que don Juan Carlos abdicó que no desapareció de Zarzuela en fiestas. Pese a que en diciembre de 2011, pocas semanas después de que el exduque fuera imputado, el entonces jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, dijera: “Urdangarin no participará en ninguna actividad oficial de la Familia Real por su comportamiento no ejemplar”.
Los exduques de Palma nunca se mostraron satisfechos con el trato recibido por la familia real. Por eso ahora la Infanta está tan contenta de haber vuelto. Prueba del malestar fueron todos y cada uno de los gestos que ofecía la hermana del Rey en público. El mismo 2011, cuando su marido ya estaba imputado en el caso Nóos, la felicitación de Navidad que mandaron era tomada en Zarzuela, lo que se interpretó como una auténtica afrenta. Las advertencias les llegaban tanto de parte del entonces rey Juan Carlos I como del príncipe Felipe. Y el matrimonio Urdangarin, lejos de escuchar, se mostraba desafiante.
Se acabó también el lujo
Así es como se interpretaron la escapada navideña a un hotel de lujo en París y el fin de semana en el mejor hotel de Berlín, todo en plena tormenta judicial y mediática. Fue con la llegada de don Felipe y doña Letizia a la Corona cuando se cortó por completo la relación y, ya despojados incluso de su título nobiliario, fueron vetados en Zarzuela. Hasta estas Navidades.
Lo que está por ver es lo que sucederá cuando Urdangarin salga. Es en este punto cuando entra la tesis de que la infanta Cristina podría estar pensando en divorcio, algo que anunció Pilar Eyre hace unas semanas y que cayó como una bomba en los círculos cercanos a Urdangarin. Según la periodista y escritora, a finales de 2019, cuando Urdangarin salga de prisión con el tercer grado, la separación podría tener lugar. Pablo Molins, abogado de la Infanta, aseguró a Vanitatis en conversación exclusiva que "es rotundamente falso", lo que no quita que la maniobra de doña Cristina sea tan privada que ni su entorno lo pueda saber.
Lo cierto es que si ahora vuelve a Zarzuela, abandonarla de nuevo, una vez su marido sea libre, será muy difícil para ella. Aunque más difícil parece todavía que Iñaki Urdangarin pueda volver a pisar el palacio y menos en las Navidades de dentro de un año.
Ha sido un año duro para la infanta Cristina y la familia de Iñaki Urdangarin. Y seguirá siéndolo por mucho que intenten poner su mejor cara ante el público. El ingreso del exduque de Palma en prisión ha noqueado a todos y estas Navidades, las primeras sin su presencia, servirán para mostrar más unión que nunca. La infanta Cristina ha vuelto a casa, como el anuncio de turrones, y así se materializará en fiestas, cuando la veremos entrar en Zarzuela para estar con su familia. Pero que nadie se lleve a engaño: los Urdangarin seguirán teniendo peso en su agenda y Vitoria sigue marcada en rojo este diciembre.