Sean Wittstock, hermano de Charlène, un Grimaldi más en una noche muy española

A falta de Charlène, buenos son sus hermanos. Las celebraciones del Día Nacional de Mónaco han terminado con el tradicional espectáculo que cada año se celebra en el Forum Grimaldi y que se ha recuperado este año, tras prescindir de él el pasado año por la situación sanitaria. Y si durante los festejos matinales habíamos visto como los hermanos de la Princesa habían compartido protagonismo con la familia de Alberto de Mónaco, la cita nocturna no ha sido diferente. Porque hemos visto a Sean Wittstock, hermano de Charlène, como un Grimaldi más en una noche que además ha resultado ser muy española.

El espectáculo del que han disfrutado los Grimaldi era, precisamente, 'Noche española' y contaba con la voz de Plácido Domingo como artista principal y los bailarines de la compañía Antonio Gades. Una cita diferente a la habitual, ya que normalmente es la soprano Ceciclia Bartoli la que deleita con su voz a Alberto de Mónaco y su familia. En esta ocasión, ha sido el tenor español quien ha vuelto al Principado, donde ya ha actuado en numerosas ocasiones, para ser el encargado de poner el broche de oro a las celebraciones del Día Nacional.

Vestidos de gala para ellas y chaqué con pajarita blanca para ellos es la etiqueta establecida para esta cita de gala con el tradicional concierto. Aunque es cierto que cada uno adapta esta norma a su propio estilo. Por ejemplo, en su última edición, la propia Charlène lució un esmoquin masculino. Y este viernes ha sido su cuñada Carolina la que no ha seguido a rajatabla lo de vertido de gala, luciendo un diseño de falda negra y cuerpo en azul de largo midi. Su hija Carlote sí ha empleado un vestido largo y ha confirmado su idilio con el dorado que ya se intuía por la mañana, con un look en negro y oro de Chanel, firma de la que es imagen.

Y si ha habido una invitada que se ha llevado todas las miradas, ha sido Tatiana Santo Domingo, la esposa de Andrea Casiraghi. No suele estar en la lista de las mejor vestidas en citas sociales, pero esta vez ha sido sin duda la más elegante y además siendo absolutamente fiel a la etiqueta. Su elección ha sido un vestido negro de tirantes, con tirantes, escote corazón y la cintura marcada gracias a una cenefa de pedrería. Para evitar el frío, la nuera de Carolina de Mónaco se ha colocado un chal en el mismo color y tela del vestido.

La venezolana ha tenido que compartir protagonismo con el invitado que ha sido la gran sorpresa de la noche, Sean Wittstock, el hermano de Charlène. Es habitual que veamos al otro hermano, Gareth, en los diferentes eventos que se celebran a lo largo del año en el Principado, incluso los más institucionales -algo que le ha valido alguna que otra crítica-. Pero Sean vive en Sudáfrica, así que pocos esperaban verlo junto a su esposa, Chantell, en la ceremonia religiosa que da comienzo a las celebraciones del Día Nacional.

La explicación a esta presencia la teníamos poco después, cuando salían a la luz unas declaraciones del príncipe Alberto concedidas a la estadounidense 'People', en las que confirmaba que Charlène no se encuentra en el Principado, que está en tratamiento y que su problema no tiene que ver ni con el cáncer ni con una cirugía estética, como se había especulado. Además, afirmaba que la decisión de internarse en un centro especializado para intentar recuperarse había sido consensuada en una reunión que tuvieron con los hermanos de la Princesa.

Así, quedan claras dos cosas. Por un lado, que Sean y Chantell Wittstock no han dudado en viajar hasta el Principado para apoyar en lo que haga falta a Charlène. Ya fueron sus dos principales pilares durante su prolongada convalecencia en Sudáfrica y lo van a ser también en esta nueva etapa en Mónaco, tras su regreso y las últimas noticias sobre su salud, que han preocupado aún más que las que hemos tenido en este tiempo desde África.

Por otro, que Alberto de Mónaco y los Wittstock están demostrando que, al menos en lo que concierne a Charlène, están unidos. Ya veíamos en citas recientes como los Grimaldi daban su sitio a Gareth y su esposa, Roisin, pidiéndoles que posaran con ellos en la Gala por la Salud del Planeta del pasado septiembre, por ejemplo. No sabemos si esa unión entre los Wittstock y los Grimaldi ha sido causada por la situación de Charlène o simplemente, ha salido reforzada. Pero desde luego este viernes hemos visto numerosos ejemplos de que al menos tienen un frente común. El último de ellos, ver a Sean en la gala del Día Nacional, disfrutando de la velada y como un Grimaldi más.