El cumpleaños de Victoria Beckham: Tom Cruise, un fotógrafo por el suelo, las Spice Girls y un loco final

El pasado 17 de abril, Victoria Beckham cumplió 50 años, una redonda cifra que comenzó celebrando esta semana, de manera privada, con su familia. Pero aún faltaba la gran fiesta final que tuvo lugar este pasado sábado por la noche, que fue celebrada en el londinense club privado Oswald's y a la que acudieron un centenar de invitados, entre los que hubo muchos rostros conocidos.

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M. F.

Beckham tiró la casa por la ventana en una velada que dejó muchas anécdotas y que la protagonista calificó como "la mejor noche de mi vida".

Aún afectada por la lesión que sufrió en su pie, la homenajeada realizó una triunfal entrada al recinto, ayudándose de unas muletas y luciendo un vestido de su propia firma, de color verde claro, sin mangas, con falda larga, semitransparencias y volantes en la cintura. Completó su estilismo con pulseras de diamantes en ambas muñecas.

Junto a ella estuvieron su marido, David Beckham, y sus hijos.

Harper, la pequeña de la familia, de 13 años, eligió para la ocasión un vestido lencero en tono crema también diseñado por su madre. Por su parte, Brooklyn, Romeo y Cruz eligieron Dior para sus looks, mientras que David se decantó por la marca italiana Loro Piana.

Una de las grandes ausencias fue la de Nicola Peltz, la esposa de Brooklyn, quien no pudo acudir después de que su abuela enfermara de manera repentina.

Entre los invitados no faltaron sus excompañeras del grupo Spice Girls: Emma Bunton, Melanie Chisholm y Melanie Brown y Geri Horner.

Con ellas protagonizó uno de los momentos más divertidos y nostálgicos de la noche al unirse todas cantando y bailando uno de sus éxitos. El propio David Beckham no pudo resistirse a inmortalizar en un vídeo esta reunión de las Spice Girls.

Tampoco faltaron a la gran celebración Guy Ritchie, Salma Hayek, Eva Longoria, Dave Gardner, el mejor amigo y socio comercial de David, así como las parejas formadas por Rosie Huntington-Whiteley y Jason Statham, Marc Anthony y su esposa, la modelo Nadia Ferreira, o Gordon y Tana Ramsay, entre otros.

Una de las presencias más llamativas en la velada fue la de Tom Cruise, quien protagonizó otra de las anécdotas de la noche. A su llegada, el actor chocó con uno de los fotógrafos presentes en la puerta del local donde se llevó a cabo la fiesta, derribándolo y tirándolo al suelo. Cruise no dudó en ayudarle para levantarlo.

Una vez en el interior, todos los presentes en la fiesta disfrutaron de una cena, bebidas, cócteles y música del DJ Hale Zero, que alargó la fiesta hasta altas horas de la madrugada.

Los Beckham no repararon en gastos y ofrecieron a sus invitados entrantes y platos de inspiración italiana que incluyeron carne y lubina, así como botellas de Chateau Mouton Rothschild, valoradas en 3.500 euros, y de champán por valor de 600 euros.

Tampoco faltó un enorme pastel de cumpleaños para la protagonista de la noche ni un romántico discurso de David Beckham que emocionó a todos los presentes.

La anécdota final de una noche inolvidable para la diseñadora la protagonizó ella misma cuando abandonó el club a las dos y media de la madrugada.

Lo hizo luciendo gafas de sol y montada a caballito sobre su marido, quien la trasladó hasta el vehículo que les esperaba para llevar a toda la familia a casa.