El millonario John Elkann, hermano de Lapo, habla del maltrato al que les sometió su madre

A lo largo de la historia de Italia del siglo XX hay una familia que se ha mantenido como parte fundamental del poder, la economía, la nobleza y la alta sociedad: los Agnelli. A finales del siglo XIX, Giovanni Agnelli fue uno de los fundadores de la casa automovilística Fiat, y desde entonces la saga familiar está siempre en el centro de la polémica.

No solo por movimientos políticos o de negocios, sino también por los problemas del propio clan. Muertes trágicas, como el suicidio de la joven Virginia von Fürstenberg, luchas de poder, visitas a los tribunales y sobre todo una batalla por la herencia familiar que parece no llegar a buen puerto. Un millonario clan que inicia un nuevo enfrentamiento con la revelación de John Elkann sobre su madre, Margherita Agnelli (bisnieto y nieta, respectivamente, del pionero de la saga).

Dignos protagonistas de su propia serie de televisión, John Elkann es el actual director de las empresas del núcleo familiar. De la mencionada Fiat a marcas de coches como Opel, Chrysler, Lancia, Maserati o Peugeot. Además de participaciones en Ferrari o el equipo de fútbol Juventus F.C. Nombrado heredero máximo por su abuelo, Gianni Angelli, está casado con Lavinia Borromeo - hermana de Beatrice Borromeo- y es hijo de la mencionada Margherita Agnelli y del periodista Alain Elkann.

Muy cercano desde la infancia a sus abuelos maternos, que fueron quienes cuidaron de él y de sus hermanos, Lapo Elkann y Ginevra Elkann; su madre mantiene una relación muy tensa con él por los movimientos empresariales de la familia. Unas relaciones tirantes a las que se han sumado las nuevas relaciones del empresario italiano.

"Sufrimos violencia física y psicológica"

A sus 48 años, John Elkann ha confesado los terribles episodios de maltratos que marcaron su infancia y de sus hermanos. A través de una entrevista para el 'Corriere della sera', el empresario revela: "Mis hermanos, Lapo y Ginevra, y yo sufrimos violencia física y psicológica por parte de nuestra madre desde que éramos niños. Esto creó una relación de protección por parte de nuestros abuelos".

Unas palabras a las que ha querido añadir que no entiende las denuncias legales de su madre: "Al igual que mi hermano y mi hermana, tenemos plena fe en el poder judicial italiano. Es una situación que dura 20 años, desde que en 2004, por sentido de responsabilidad, toda mi familia se organizó en torno a Fiat, llevando adelante los deseos de mi abuelo".

"La única que se quejó fue mi madre. En lugar de alegrarse por Fiat, por su familia, por la realización de los deseos de su padre, reaccionó de la peor manera", ha querido añadir al medio italiano. Unas palabras donde señala el apoyo familiar que tiene en relación con su papel como director de la compañía y denuncia la violencia que Margherita Agnelli ejerció contra sus hijos.