Tras el éxito de Cannes, analizamos el ecléctico estilo de María León sobre la alfombra roja

María León ha epatado a propios y extraños en Cannes. Además, Movistar+ acaba de estrenar 'El hijo zurdo', una miniserie de seis capítulos que acaba de alzarse con el premio a mejor miniserie en el festival Canneseries. Detrás de este thriller emocional está el guionista Rafa Cobos, quien, además de creador, se ha estrenado en esta ocasión como director, y como protagonista, María León.

La sevillana no tiene hijos como su personaje en la ficción, pero eso no le ha impedido en absoluto empatizar con esa madre desesperada a la que interpreta, que busca, además de salvar a su hijo, salvarse a sí misma: "Es una historia también sobre la búsqueda de la identidad, el ser madre no significa que tengas un traje único con el que tengas que caminar. No te anula a ti como mujer y como persona. Y sí que el hecho de ser madre o tener un hijo ayuda a que te ponga un espejo lo suficientemente grande para que te veas y te analices, y veas hasta dónde tú has tenido capacidad de saber quién eres tú misma para poder tener esa responsabilidad y dar una educación", explicaba la actriz hace unos días a la cadena SER.

Se trata, por tanto, de un papel muy diferente a lo que esta intérprete de 38 años había hecho hasta ahora. Un registro totalmente inexplorado para ella a pesar de haberse curtido en diferentes formatos a lo largo de su carrera. La hemos visto en el cine, en la televisión e incluso en videoclips –en el 2021 representó esa idea de la fragilidad del éxito de la que habla el tema ‘Ya no vales’ de Alizz y C. Tangana–; y ha alternado con la misma facilidad la comedia y el drama, hasta el punto de alzarse en el 2011 con la Concha de plata a la mejor actriz y el Goya a la mejor actriz revelación por la adaptación cinematográfica de la novela de Dulce Chacón ‘La voz dormida’. Eso de 'la zona de confort' no parece estar hecho para ella.

Esta cualidad, la de no tener ningún miedo a tomar riesgos, es la que también define el estilo que María León adopta en sus distintas apariciones. Sobre la alfombra roja es atrevida, carismática y sorprendente. Lo demostró en la edición de los Premios Goya de este año con un increíble diseño transparente de Juan Vidal, en el Festival de Málaga del 2022 con un slip dress rojo de Philosophy, con un vestido de escote palabra de honor estampado en Sevilla durante la proyección de ‘El hijo zurdo’ hace unos días y, por supuesto, al recoger el galardón a su último trabajo en Cannes con un mono negro de cuerpo metalizado firmado por David Koma.

Podríamos decir que es, como su hermano Paco León la calificó hace unos días, “la Kristen Stewart de Sevilla”.

Y no le falta razón al actor y director en la manera en la que ha bautizado a la intérprete, porque muchos de los looks que luce María León bien podría haberlos elegido la nominada al Oscar por ‘Spencer’. Es el caso de los dos estilismos que llevó durante los otros actos de promoción que tuvieron lugar en la ciudad francesa, tanto del conjunto de top y minifalda de Missoni estampado como del diseño de plumas fucsias con botas-pantalón de charol negro de la marca Amen.

Sus estilismos más terrenales

Desde que saltó a la fama, María León ha ido puliendo sus elecciones y se ha ido animando a ir un pasito más allá pero, no nos equivoquemos, no todas las veces que se pone ante un photocall lo hace desde la aventura. Hay veces en las que, en lugar de jugar, prefiere pisar tierra firme y proponer looks más terrenales. Es el caso del ‘little black dress’ que lució en la última ceremonia de los Premios Carmen que anualmente otorga la Academia de Cine de Andalucía o el vaporoso vestido largo rojo con flores dibujadas de Gucci con el que se dejó ver en una fiesta organizada por una conocida revista en Madrid el pasado invierno.

También su gusto por la sastrería refleja la riqueza de influencias en su variado armario. Ha llevado trajes de Redondo Brand, de Gabriela Hearst y de Roberto Verino, entre otros, y ha sabido defender con maestría todos pese cada uno de estos dos piezas estaba concebido para ofrecer una estética completamente distinta.

Una prueba más del aplaudido eclecticismo que hemos utilizado para referirnos a su personal estilo.