Así era Anna Castillo de pequeña: pizpireta, se chupaba el dedo y lucía calcomanías

Desde que el pasado 28 de julio se estrenara la serie ‘Un cuento perfecto’ en Netflix, convirtiéndose en el número 1 de la plataforma, no se oye más que hablar de sus protagonistas, Álvaro Mel y Anna Castillo. Todos quieren saber algo más de los protagonistas de esta serie basada en el bestseller de la conocida escritora Elísabet Benavent, quien se encuentra también detrás de otras exitosas series como ‘Valeria’.

Mientras el actor es algo más desconocido para el público, Anna es de sobra conocida por todos, especialmente tras protagonizar ‘La llamada’, rodada por los Javis, y conseguir el Goya en la categoría de mejor actriz revelación por ‘El olivo’ en 2017.

Pero en esta ocasión hemos querido viajar en el tiempo para conocer cómo era de pequeña esta actriz catalana, que ha compartido su infancia con su hermana pequeña, Eva, vocalista de un grupo y a la que está muy unida. De hecho, son varias las fotos que la intérprete ha compartido en sus redes sociales, donde se muestra muy activa.

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Para felicitarla por su 24 cumpleaños, Anna compartía una imagen abrazando a Eva, vestidas ambas de blanco y con pañuelo rojo al cuello. Lucía unas divertidas calcomanías en el brazo la actriz, que fueron sus primeros tatuajes antes de hacérselos con tinta.

También compartieron baños en la piscina, donde ambas sonríen con una tierna sonrisa. Veranos como el de aquel 2001 con los que Anna nos ha mostrado una parte de su infancia, aquella en la que ya le gustaba jugar a ser actriz.

“De pequeña jugaba a que era una niña huérfana o drogadicta. ¡Me encanta el drama y la tragedia! Veía mucho la película ‘Annie’, y había un personaje que era alcohólica y un poquito prostituta. Y yo decía que de mayor quería ser alcohólica y prostituta”, aseguraba al programa ‘El intermedio’ en pleno confinamiento. Confesaba también haberse chupado el dedo hasta los nueve años, algo que parece echar de menos.

No en vano la protagonista de ‘Un cuento perfecto’ ya demostraba dotes como actriz y bailarina en sus vídeos caseros y familiares, como el compartido en su cuenta de Instagram en el que ella misma admite: “Flipo con mi rollo y flipo con haber tenido una tía tan guay que me ponía purpurina en la cara”.