La princesa Charlène vuelve a abandonar Mónaco... pero sabemos dónde está

La princesa Charlène ha vuelto a desaparecer. Tras su visita al Papa Francisco y presidir dos actos hace ya unas semanas, la esposa del príncipe Alberto se ha esfumado nuevamente de Mónaco. Es ya habitual que la exnadadora pase largas temporadas alejada del principado del que es princesa consorte. El pasado verano, sin ir más lejos, se pasó cuatro meses en la isla de Córcega junto a sus dos hijos, el príncipe Jacques y la princesa Gabriella, y desatendió por completo su agenda institucional. Ahora Charlène ha vuelto a 'fugarse' de Mónaco y en Vanitatis sabemos el paradero en el que se encuentra la cuñada de la princesa Carolina.

Hace apenas unos días, concretamente el 8 de febrero, la esposa de Alberto II se desplazó en solitario hasta Sudáfrica, su país de origen, para estar presente en el 70 cumpleaños de su padre, Mike Wittstock. La familia al completo se reunió en el exclusivo restaurante Aurelia de la ciudad de Benoni para que Mike soplará las velas. Para la ocasión, Charlène se enfundó un disfraz de vaquera, que incluía peluca pelirroja, jeans, botas, camisa de flores y sombrero, para dedicarle una actuación a su progenitor. Según testigos presenciales, la princesa realizó una 'performance' con la canción 'The Gambler' del cantante estadounidense Kenny Rogers.

Tras ese pequeño espectáculo, Charlène se subió al escenario y tuvo unas cariñosas palabras hacia su padre: "Estoy muy orgullosa de mi padre, mi país y de pertenecer a la ciudad de Benoni. Siempre me hace feliz estar de vuelta a casa y experimentar grandes recuerdos con mi familia y mis compatriotas. Papá, gracias por todo lo que has hecho por mí y mis hermanos. Todos te queremos". Mike Wittstock también quiso tener unas palabras de agradecimiento hacia sus invitados: "Muchas gracias a todos por venir. Es un honor estar hoy con todos vosotros. Espero poder seguir celebrando más cumpleaños en vuestra compañía".

Se desconoce el motivo por el que Alberto no acudió al cumpleaños de su suegro, ya que sí que estuvieron allí las parejas de los hermanos de Charlène. En alguna ocasión, se ha hablado de que a Mike Wittstock no le acabaría de convencer demasiado el marido de su hija y que su relación es un tanto fría. Mientras que su esposa Lynette y sus dos hijos, Gareth y Sean, viven en Mónaco junto a Charlène, Mike ha preferido quedarse en Sudáfrica, algo que es un tanto extraño. Antes de casarse con Alberto, Charlène ofreció a sus familiares dos apartamentos muy cercanos a palacio: uno de cinco habitaciones en el que actualmente vive sola su madre y otro de iguales características, en el que reside Gareth junto a su esposa, Roisin, y su hija Kaia Rose.

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