Melena XL y maquillaje monofoco: las claves 'beauty' de Zoe Saldaña desde cero

Da igual qué momento de la carrera de Zoe Saldaña te pongas a analizar, tanto si viajas a aquel año en el que compartió cartel con Britney Spears en ‘Crossroads’ como si has caído en la adictivamente lacrimógena ‘Desde cero’... Zoe siempre está guapa, hasta cubierta de pintura verde para ser Gamora en el universo Marvel, como en su versión CGI de 'Avatar'.

Su truco, además de contar con una genética envidiable, es no olvidar jamás sus esenciales: lucir su melena lo más natural posible y mantener un maquillaje monofoco en el que color y zonas a potenciar estén perfectamente diferenciadas. Otro detalle curioso y que resulta absolutamente infalible en su cuidada estética es su manicura. En las manos de Zoe no veremos elaboradas creaciones, acrílicos o esmaltes llamativos. Sus uñas siempre van cortas y esmaltadas en un rojo clásico y casi retro.

Una vida de melena XL

Su inalterable melena es, quizá, el elemento más identificable de su look. Mientras otras actrices cortan el largo de su cabello o cambian su color, Zoe siempre se ha mantenido fiel a su marrón chocolate natural, pudiendo iluminarlo en algunas ocasiones, pero siempre con la idea de que resultara natural y encajara con su estilo. Tan solo tenemos imágenes de la actriz de ascendencia dominicana y puertoriqueña con el cabello más corto.

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Margarita Velasco

Por un lado, las míticas fotografías de anuario de secundaria nos revelan a una Zoe con un corte de pelo entre bixie y mushroom, el clásico pelo corto con volumen de los 90. Aquel estilismo que ahora ha sido rescatado fervientemente por la generación Z fue, en el caso de Zoe, un repentino corte de pelo realizado por ella misma, algo que, ha confesado, fue una mala idea.

Más adelante, a inicios de los 2010, cuando las melenas midi comenzaron a popularizarse, Zoe también quiso probar suerte, pero, en pocos meses, su cabello volvía a su longitud habitual. Por este tipo de decisiones efímeras decimos que la actriz -igual que ya han confesado Chiara Ferragni o Cristina Pedroche- siempre se mantiene fiel a la melena larga.

Pero que Zoe Saldaña mantenga una melena que sobrepasa varios centímetros la altura del pecho no significa que su cabello no esté perfectamente cortado, con las puntas saneadas y tan sano y brillante como un pelo más corto. Al mantener los tintes alejados de su cabello, este no recibe agresiones químicas. El único problema al que Zoe sí se enfrenta es a la sequedad y consiguiente encrespamiento. Su cabello, de naturaleza ondulada, tiende a ser seco y, al recurrir de forma habitual a fuentes de calor, tiende a verse más seco, crespo y claro en las puntas.

En su día a día y en trabajos como la serie 'Desde cero', la actríz sí se permite dejar su cabello al natural, mostrando su textura ondulada y ligeramente frizz. Sin embargo, cuando llega el momento de las premières, lo habitual es que sus peinados sean mucho más pulidos.

Esto no significa que Zoe castigue su melena con la tiranía del liso, sino que moldea el cabello para llevarlo tanto suelto como en recogidos originales. Trenzas o muchos rizos con estructura se alternan con looks más sobrios, para crear su característica imagen de equilibrio beauty. Nunca hay un traspiés, incluso cuando en la Met Gala apuesta por glitter, aplicaciones, flores y pelo afro.

Esta personal defensa del cabello largo se traduce, a nivel laboral, en una constante recurrencia a las pelucas. Keira Knightley fue la primera actriz en hablar abiertamente de la importancia de respetar al pelo natural y no someterlo a cambios raciales por exigencias del guion. La inglesa elige siempre roles en los que pueda llevar pelucas y proteger su cabello bajo una redecilla o aquellos en los que su pelo natural no necesite aderezos.

Algo parecido hace Zoe, pues en escena bien opta por pelucas como en 'Amsterdam' (su próximo trabajo de la mano de Disney +) o bien deja su melena ondulada al aire, como en sus trabajos en Netflix.

Artista del maquillaje (con mesura)

Que Zoe Saldaña mantenga siempre un look 'beauty' equilibrado no significa, sin embargo, que sus maquillajes sean sobrios o que su paleta de colores se mueva solo por tonos neutros. La actriz y su maquilladora de confianza, Vera Steimberg, incorporan muchísimo color, pero mantienen una estrategia monofoco, es decir, solo acentúan una parte del rostro: ojos o boca.

Un verdadero trucazo, presente en el rostro de la actriz desde prácticamente el inicio de su carrera, son los labios rojos. No se trata de un rojo que sea tendencia, sino de la tonalidad exacta que a ella le funciona. Por un lado, el rojo anaranjado, mate y cremoso resalta aún más la calidez de su piel (Pat MacGrath suele ser su marca fetiche), pero para ocasiones en las que el maquillaje de los ojos es más brillante o marcado, la elección es un rojo más cereza y de acabado gloss.

Otro de sus colores más repetidos es también un rosa frío muy jugoso con el que potencia la luminosidad del resto del maquillaje. Cuando sale a jugar la barra de labios rojo intenso, el maquillaje de los ojos siempre es muy ligero, apenas un finísimo delineado y un trabajo de la máscara de pestañas para separarlas y marcar su longitud, más que para potenciar el volumen.

Pero la parte divertida y mágica, por la forma en la que incluyen diseños tan atrevidos en looks que parecen minimalistas, es la forma en la que la maquilladora potencia la forma de sus ojos.

En este terreno, los colores no dan vértigo. Jugando con la teoría del color, verdes, rosas y morados, complementarios de las tonalidades cálidas que protagonizan la piel de Zoe, son la paleta habitual de maquillaje.

Igual que la reina Letizia se apoya en los lápices de colores metalizados como el cobre, el bronce o el verde, en el maquillaje de Zoe Saldaña veremos siempre delineados en morado oscuro, rosa glitter o incluso azul, además de sombras de ojos de los mismos colores, creando ahumados o cut creases ultracoloridos que no quedan, sin embargo, recargados.

Esta original mirada llena de color se enmarca con un trabajo de las cejas tan natural como imperceptible. De nuevo, Zoe no sucumbe a las tendencias, sino que exprime su materia prima. Las cejas de la actriz son arqueadas y no demasiado gruesas, por lo que abren la mirada, pero no saturan el maquillaje.

El resumen 'beauty' es una lección tan sencilla como efectiva: no cambies lo que te funciona, aun cuando las tendencias vayan por otro lado. Tema Zoe, siempre.