Sofía Palazuelo deslumbra en el enlace de Cayetano Martínez de Irujo tras dar a luz recientemente: vestido de invitada de seda con su color fetiche
La duquesa de Huéscar no ha faltado a la cita con un diseño fluido de Garaizabal, tan solo tres semanas después de haberse convertido en familia numerosa
Fernando Fitz-James Stuart y su padre, junto a Sofía Palazuelo, en la boda de Cayetano Martínez de Irujo. (Gtres)
La Casa de Alba está demostrando este sábado lo unida que se encuentra. El acontecimiento no es para menos: Cayetano Martínez de Irujo y Bárbara Mirjan se han casado. El escenario escogido ha sido la iglesia de Cristo de los Gitanos, un enclave muy especial dado que allí reposan cenizas de la difunta duquesa. Entre los rostros que no se han querido perder el enlace está su sobrino Fernando Fitz-James Stuart, aunque la que han acaparado todas las miradas ha sido su mujer, Sofía Palazuelo.
Aunque en un primer momento se pudo pensar que la pareja no acudiría a la boda, dado que ayer celebraron un doble bautizo en el Palacio de Liria en Madrid; los duques de Huéscar no se han querido perder la oportunidad de estar al lado de los suyos. A quien se ha echado de menos ha sido a los condes de Osorno, que, de estar, no han sido captados por las cámaras.
Sofía Palazuelo, siempre fiel a su estilo depurado y natural, ha vuelto a demostrar por qué es una de las invitadas más elegantes de la alta sociedad española. Ha apostado por un vestido verde esmeralda de chiffon de seda mate cortado a bies de Garaizabal, fluido y con un precioso movimiento al andar.
La firma nació en 2018 con la misión de personalizar sus creaciones y apostar por fibras naturales, sedas, linos o algodones, todo cortado al bies. Por ello, el diseño escogido por la duquesa es de lo más representativo.
Sofía Palazuelo. (Gtres)
El diseño de esta ocasión, de corte midi asimétrico y a capas escalonadas, presentaba volantes suaves en el escote y las mangas, que aportaban dinamismo y feminidad sin caer en excesos.
La elección del color no es aleatoria, ya se ha decantado por este en otras celebraciones por su efecto favorecedor y sofisticado. Una elección inteligente teniendo en cuenta su tono de piel y su capacidad para integrarse con el entorno andaluz de la celebración.
Sofía ha completado el look con sandalias negras de tiras finas y bolso de mano tipo sobre en el mismo tono, logrando un contraste discreto y atemporal. Como joyas, ha optado por unos pendientes colgantes con brillo, que enmarcaban su melena lisa, suelta y perfectamente pulida. Muy coherente con su estilo minimalista y su elegancia sin artificios.
La presencia de la aristócrata ha sorprendido dado que dio a luz recientemente a su tercer hijo, un niño llamado Fernando. Exactamente el 10 de septiembre, lo que convirtió a la pareja en familia numerosa. Pero poco después dejó claro que no iba a quedarse en casa cuando apareció públicamente en Madrid con el bebé, acompañada de su cuñada, Belén Corsini, caminando por la ciudad en un paseo tranquilo.
La Casa de Alba está demostrando este sábado lo unida que se encuentra. El acontecimiento no es para menos: Cayetano Martínez de Irujo y Bárbara Mirjan se han casado. El escenario escogido ha sido la iglesia de Cristo de los Gitanos, un enclave muy especial dado que allí reposan cenizas de la difunta duquesa. Entre los rostros que no se han querido perder el enlace está su sobrino Fernando Fitz-James Stuart, aunque la que han acaparado todas las miradas ha sido su mujer, Sofía Palazuelo.